Caja china (técnica literaria)

Caja china
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Concepto:Las técnicas narrativas o, recursos narrativos, son modos ordenados que utiliza el escritor, para atraer al lector hacia la realidad, que esta dentro de una historia contada.

Caja china (Técnica Literaria). En literatura, narrativa y narratología se reconoce así a la técnica literaria estructural desarrollada desde los albores de la narrativa oral donde, como si fuese una caja china, dentro aparece otra similar pero más pequeña y dentro de ésta, otra más pequeña aún y así pudiera ser hasta el infinito, pero que luego, al cerrarse, vuelve a la historia ancestro y así mientras el autor lo desee.

Importancia de la técnica

Un aspecto interesante de esta técnica radica en el hecho de que una historia no tiene que tener vínculos argumentales, ni de personajes, ni de tono, ni atmósfera con los núcleos argumentales ancestros, ni con los descendientes; conformando un potente recurso que dota de sutileza, misterio, riqueza, dinamismo e interés por parte del lector cuando es correctamente usada.

Características

Esta técnica aplica al argumento y a la estructura narrativa dramatúrgica, permitiendo una exposición no lineal de los hechos que van a surgir como realidades alternativas a partir de una historia inicial que se ramifica para, al término de las ramas, regresar hasta el origen y continuarlo o darlo por terminado.

Existen varias maneras de usar las cajas chinas que no necesariamente inciden en el argumento ni en la representación que tiene el lector de la historia principal, conformando entes independientes en forma, planos de realidad, personajes y por supuesto, historia; aunque también existen usos que alteran o significan puntos de giro para la historia precedente.

Escrito de Vargas Llosa

”Entre el lector y la materia narrativa ha surgido un intermediario: el plano objetivo desaparece, se cruza un plano subjetivo a través del cual pasa la materia antes de llegar al lector. En este tránsito, como es lógico, la materia sufre modificaciones, se carga de elementos emocionales que no le son propios, que pertenecen al intermediario. Esa mezcla sutil es otro de los recursos más viejos de la novela y podría llamarse de “ la caja china”… La caja china es también uno de los procedimientos más usuales de la novela moderna, en la que el intermediario, el testigo, es personaje esencial: él establece la ambigüedad y la complejidad de lo narrado, él multiplica los puntos de vista, él matiza, profundiza y eleva a una dimensión subjetiva los actos que refiere una ficción. Para citar sólo un ejemplo mayor, conviene recordar que casi todas las historias de Faulkner no están contadas directamente al lector, sino que son historias que se van estructurando a través de historias que se cuentan entre ellos los personajes de la ficción.”
Vargas Llosa

Origen

Parece tener sus raíces en la forma de hablar común de la gente donde se está hablando de algo y luego, se recuerda otra cosa y ahí comienza a contarse, para al final volver al hecho inicial luego de varias derivaciones. Esto se transliteró desde hace milenios, primero a las formas orales y después, a la literatura escrita. El origen geográfico también parece ser plural en tanto es encontrada en expresiones literarias de varias culturas antiguas con ejemplos clásicos que han llegado a la actualidad. Quizás el paradigma de esta técnica sean Las mil y una noches de origen persa, donde la estructura de las historias que narra la protagonista Scherezada sigue este canon clásico, siendo su propia historia la principal de la que derivan las ramificaciones argumentales, sin nexos entre sí ni con sus predecesoras. Pero existen ejemplos anteriores en la India, China, Japón y en las culturas precolombinas.

Ejemplos

Las mil y una noches es el ejemplo cimero de uso de esta técnica, sin embargo no es ni por mucho menos el único caso, ni el más antiguo. En historias épicas como Gilgamesh de Mesopotamia, los Vedas y otros libros clásicos indios como el Mahabharatta, Ramayana; la novela del casanova japonés por excelencia Gengi, Viaje al oeste de la antigua China en las que, o bien se recurre a las cajas chinas para narrar una leyenda alternativa o constituye la forma estructural de toda la obra.

Don Quijote de la Mancha, obra cumbre de la literatura universal y fundadora de la novela moderna, también se apela a este recurso para contar historias alternativas en la boca de Sancho, otro personaje o el propio narrador omnisciente que produce historias completas como “El capitán cautivo” y “El curioso impertinente”.

En la narrativa contemporánea también aparecen ejemplos escritos totalmente según la estructura de caja china como La vida breve del uruguayo Juan Carlos Onetti. Esta técnica ha trascendido el ámbito literario para constituir también una forma dramatúrgica usada en los espectáculos teatrales y el cine como La pequeña princesa, Forest Gump, La línea de Antonia.

Desventajas

La caja china es funcional en dependencia de la historia. Cuando es bien usada aporta riqueza, diversidad, imaginería, gran interés psicológico de parte del lector y dinamismo. Por lo contrario, puede ser mal empleada provocando aburrimiento y confusión, generando obras que constantemente pierden la atención e interés del lector.

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Fuentes

  • Heras León, Eduardo Rafael. 2001. Los desafíos de la ficción (técnicas narrativas). La Habana : Editora Abril. 110 p.
  • Vargas Llosa, Mario. 1997. El dato escondido. Cartas a un joven novelista. México : Editorial Planeta. 226 p.
  • Artículo: La caja China. Fragmento de Vargas Llosa. Disponible en: Elmonorojo. Consultado el 31 de enero de 2014.