Día Mundial de los Océanos en Cuba

Día Mundial de los Océanos en Cuba
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La protección de los océanos es determinante para la vida de las especies, incluyendo el hombre.
Fecha:8 de junio de 1994
Lugar:Cuba
Descripción:
Los océanos cubren dos terceras partes de la superficie de la Tierra, y a través de sus interacciones con la atmósfera, la litosfera y la biosfera juegan un papel relevante en la conformación de las condiciones que hacen posible las distintas formas de vida del planeta.
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba


Día Mundial de los Océanos en Cuba. Surge por una iniciativa canadiense, y su celebración es relativamente reciente. Los océanos cubren dos terceras partes de la superficie de la Tierra, y a través de sus interacciones con la atmósfera, la litosfera y la biosfera juegan un papel relevante en la conformación de las condiciones que hacen posible las distintas formas de vida del planeta. Además de servir como hábitat de una vastísima colección de plantas y animales, los océanos proporcionan alimento, energía y múltiples recursos a los seres humanos. En 1994, la comunidad internacional dio un paso muy importante para la protección de los océanos al haber entrado en vigor la Convención de las Naciones Unidas sobre la Ley para los Océanos.

Historia

El 8 de junio de 1994 quedó instituido como el Día Mundial de los Océanos cuando entró en vigor la Ley para los Océanos, a partir de la Convención de las Naciones Unidas. Se estableció desde entonces que los fondos marinos y oceánicos, más allá de los límites de la jurisdicción nacional, son patrimonio común de la humanidad, por lo que todos los habitantes del planeta azul tenemos derecho a utilizarlos y obligación de protegerlos. La ley además determina el marco jurídico global regulador de las actividades que se realizan en los océanos y las responsabilidades de los diferentes estados sobre ellos.

Los océanos es una fuente primaria de alimento para más de tres mil millones y medio de personas y uno de los recursos económicos vitales para el desarrollo de las naciones, era lógico que algún día del almanaque estuviera dedicado a ellos, teniendo en cuenta que más del 30 % de la producción mundial de petróleo proviene de los océanos y que por ellos se garantiza el empleo de 150 millones de personas aproximadamente en labores de acuicultura y del sector pesquero. Si añadiéramos a la lista de beneficios los ingresos de muchos países a partir del turismo de playa, los cruceros y la propia transportación del comercio internacional, en sentido general, y el papel que juegan en la conformación de las condiciones de vida a partir de sus interacciones con la atmósfera.

Sin embargo, ese espacio natural actualmente no tiene motivos para celebrar. La pesca excesiva, la contaminación y el desmedido crecimiento urbano costero constituyen amenazas latentes para su buena salud, de origen humano.

Protección de los océanos

Una de las tareas de la campaña a partir del año 1994 fue el apoyo de la flora y la fauna marinas, la preservación del atún, el tiburón, el pez espada y las poblaciones de merlín, pero la acción del hombre pone en peligro cada día el equilibrio de la sociedad en su conjunto y por consiguiente del ecosistema oceánico. Y, como ya es costumbre, las esperanzas rebotan contra frías paredes de inactividad. Los compromisos solo quedan en declaraciones de buenas intenciones y futuras voluntades.

La humanidad no acaba de comprender que millones de personas mueren anualmente por hambre y que las posibilidades que nos brindan los océanos en alimentos son infinitas y demás de aprovecharlas debemos preservarla, en ocasiones no se presta la debida atención a la muerte de animales marinos como delfines, marsopas o ballenas sofocados por redes de pescas.

¿Por qué descuidar el hecho de que la temperatura de los océanos se eleva cada vez más debido al efecto invernadero, lo cual trae aparejado consecuencias nefastas para numerosas especies, entre ellas, la humana?, además del impacto ecológico provocado por el vertimiento consciente o negligente de sustancias tóxicas.

Importancia de los océanos para la vida del hombre en el planeta tierra

Las especies marinas no pueden sobrevivir en las aguas contaminadas por el petróleo

Los océanos son importantes y deben ser tenidos en cuenta. Debemos lograr que el agua vuelva a ser lo más limpia posible. Lamentablemente en los últimos tiempos las personas indolentes se han empeñados en contaminarlos y un ejemplo de esto es el derrame de petróleo en el Golfo de México por solo citar uno, y esto es uno de los peores desastres ecológicos que le puede ocurrir a los mares, ya que en el agua, contaminadas no puede resistir ningún ser vivo porque es completamente nocivo para la salud.

Con el paso del tiempo el ecosistema de los océanos se ha ido deteriorando y si no se les pone freno, el agua cristalina se puede convertir sólo en un buen recuerdo.

Preservar el agua de los océanos y los fondos marinos debería ser casi una obligación de todos ya que ellos son patrimonio de toda la humanidad, independientemente de las fronteras, se debe pensar que el agua de los océanos representa las dos terceras partes de la superficie del planeta Tierra, en el también se encuentra casi el 90% de la biomasa mundial y son variado los seres vivos que habitan en sus profundidades.

Preservación del medio ambiente subacuático en Cuba

Dos días después de la celebración del día mundial de los océanos en el 2011 se firmó un convenio con el fin de preservar el medio ambiente subacuático una colaboración entre el Club Náutico Internacional Hemingway de Cuba y The International SeaKeepers Society], institución no política con sedes en Mónaco y Estados Unidos.

El documento, firmado por el Comodoro José Miguel Díaz Escrich, y Dean C. Klevan, presidente de la organización internacional, identifica objetivos comunes que abogan por la salud de los océanos y el resguardo de su flora y fauna.

Al respecto, Díaz Escrich refirió la celebración de los Torneos Internacional de Pesca de la Aguja Ernest Hemingway como un símbolo de las relaciones entre los hombres amantes del mar, y un homenaje al Premio Nóbel de Literatura, quien también inculcó su pasión por esta práctica.

Klevan manifestó el interés de impulsar planes de acción en conjunto y estimular la participación en misiones científicas en la Isla y el país norteamericano para incentivar el cuidado de los océanos en todo el orbe.

The International SeaKeepers Society tiene la misión de aunar y distribuir información oceanográfica y atmosférica útil para contribuir al bienestar de la vida marina, la cual comparte con gobiernos, científicos e instituciones educacionales del planeta. Igualmente proporciona fondos y apoyo a las investigaciones sobre esta temática y promueve oportunidades de capacitación sobre asuntos relacionados con mares y océanos.

Fundado el 21 de mayo de 1992, el Club Náutico Internacional Hemingway de la nación caribeña, integrado por socios de 60 países, fomenta los vínculos de amistad y colaboración con la comunidad náutica internacional, los deportes, y el estudio y preservación del medio ambiente subacuático, mediante la organización de seminarios, cursos, conferencias y otros eventos.

Mal accionar del hombre sobre la vida marina

Hoy en días, la porción sólida del planeta parece haber sido la más vulnerable a la contaminación. La mayor parte de las muertes humanas se registran en tierra firme, se conoce que las pérdidas en el mar, sin duda, son inferiores en número. A pesar de temores ancestrales, antes de sucumbir a las catástrofes que se originan allí, una buena parte de los tripulantes, pasajeros, buzos o pescadores, generalmente logran llegar a tierra y ponerse a salvo.

En la actualidad, los desechos continúan creciendo y resultan desconocidas o ambiguas las cifra exactas de tales desperdicios, que se cree van llegado a los 70 000 millones. Y no para ni frena. Parte de esos desechos son conducidos a los ríos. Los ríos, a su vez, los llevan hasta sus desembocaduras y los arrojan al mar.

Ese bulto de podredumbre lleva a las aguas agentes contaminantes muy peligrosos:petróleo,

Peligro para la vida de cualquier especie, incluso las que no son marinas

[tóxicos químicos, sustancias radiactivas, metales, plaguicidas, pesticidas y defoliantes, así como el equivalente de más de 60 000 trasatlánticos cargados con puros desperdicios arrojados por el hombre.

Se calcula, por otro lado, que cada año se van a la atmósfera mucho más de 20 000 millones de toneladas de otras sustancias, en forma de gases y partículas. Cada año se descargan al mar entre 5 y 25 millones de toneladas de petróleo. Eso sucede durante la extracción del combustible, su transportación y evacuación en los puertos o refinerías. La cifra crece al activarse la explotación de yacimientos, incrementarse la compra-venta de hidrocarburos y aumentar los accidentes en las travesías.

Datos sobre los océanos

  • El 71% de toda la superficie de la tierra, es decir más de 361 millones de km2, esta cubierta por los océanos.
  • El volumen del agua de los océanos representa más del 97 % de toda el agua del planeta.
  • Aproximadamente el 70 % del oxígeno que se encuentra en la atmósfera es producido por los organismos de la flora marina.
  • Casi el 78 % del consumo mundial de pescado es de origen marino.
  • En varios millones se estima el número de especies, aun por descubrir, en los fondos oceánicos.
  • El descubrimiento de las fuentes hidrotermales submarinas ha permitido identificar, hasta ahora, 400 nuevas especies de animales marinos con formas de vida no conocidas.
  • Se calcula que 500 millones de personas están empleadas en labores relacionadas directamente con los recursos marinos y costeros, de ellos 200 millones en la industria pesquera.
  • El Caribe recibió durante 1997 más de 17 millones de visitantes, tres millones de ellos por medio de cruceros.
  • Las pesquerías mundiales han alcanzado valores superiores a los 100 millones de toneladas en los últimos años.
  • Aproximadamente el 80 % del comercio mundial se realiza por medio del transporte marítimo.
  • El 90 % de toda la actividad volcánica del planeta ocurre en los fondos oceánicos.

Referencias Bibliográficas

  • Revista Medio Ambiente y desarrollo

Fuentes