Evelio Rodríguez Plaza
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Evelio Rodríguez Plaza. El Rey de la Música Campesina Cubana, trovador.
Sumario
Síntesis biográfica
Infancia y Juventud
Nació en Cabaiguán, Sancti Spíritus. Cuando tenía 16 años, cantaba tangos. Por aquel tiempo había fallecido Carlos Gardel y estaban de moda los tangos. Comienza a presentarse en radio Trinidad, pero rápidamente se lanzó de trovador ambulante para trabajar donde hubiera alguna fiesta, en cabaret, teatros. Evelio es un cantor muy amistoso, campechano, cuando conversa con uno. Comienza a improvisarle décimas o alguna de sus 200 composiciones. Son 80 años de vida que acaba de cumplir, en los que ha cantado por todos los campos de Cuba y su voz es imprescindible a la hora de recordar nuestra música campestre. Evelio, tienes el sello de aquellos isleños canarios que vinieron de la vieja España en la colonia. Me imagino que procedes del centro del país, donde emigran esos guajiros.
Trayectoria laboral
En 1943 se traslada a la capital, comienza a trabajar en la emisora “Mil Diez”, seguía interpretando tangos y boleros. Todos los turistas pasaban por la Plaza de Marianao, llena de cabaretuchos de mala muerte, buscando la autenticidad. A ese lugar también iban los músicos, para conseguir alguna oportunidad de ganar algo.
Trabaja también en la calle Prado 86, y se presento con “Los Tres ases” en "La Bodeguita del Medio". A La Bodeguita le dedico una décima:
"Me gusta La Bodeguita, con sus clientes/ y me gusta el sano ambiente/ que en ella se precipita/ me gusta la masa frita/ de un buen criado marrano/ me gusta el ambiente sano/ que respiramos aquí/ y me gusta el aguardiente/ sano, sabroso y cubano/."
Trabaja un tiempo con el “Dúo Espirituano”, junto a Ramón Huerta. Con ellos fue muchas veces a la emisora de Radio Progreso en un programa titulado: “Estampas criollas”.
Carrera como solista
Comienza su carrera como solista en 1960, con La voz del Instituto Nacional de la Reforma Agraria (INRA), en la emisora Radio Rebelde.
En el año 1953, compone su canción más conocida “Mi guayabera”: "Yo tuve una guayabera hace algunos años ya/ regalo de mi papá/ cuando yo muy joven era/ recuerdo la vez primera/ que con ella me vestí/ a una fiesta concurrí/ y esa memorable noche/ hice de gala derroche/ y hasta novia conseguí".
