Iglesia de Copacabana (Bolivia)
| ||||||||||
Iglesia de Copacabana. Construida en siglo XVIII, esta Iglesia fue regentada por la orden agustina hasta 1759. Su construcción, hecha con piedra del lugar, emula las estructuras potosinas de San Benito y Salinas de Yocalla del departamento de Potosí. La pintura mural de la Iglesia da comienzo a un estilo muy próximo a lo popular.
Ubicación geográfica
Población de Copacabana, ubicada en la provincia Carangas del Departamento de Oruro.
Descripción arquitectónica
La Iglesia es de planta de cruz latina y está construida toda en mampostería de piedra. Tiene cúpula sobre el presbiterio y pequeños domos que cubren la única nave. Está rodeada de contrafuertes escalonados y de grandes proporciones. Su construcción prefiere cúpulas con cajón y cimborrio para la nave, en lugar de cañón corrido.
Dos torres flanquean la portada principal. Mantiene intactos sus dos almenados atrios y las cuatro posas cubiertas con cúpula que se encuentran en el atrio adyacente. En la parte central se ubica una imponente capilla miserere.
Desde el atrio se accedes a la Iglesia por cinco ingresos: dos en el muro atrial izquierdo que comunica con una plaza, con una capilla miserere y cuatro posas; uno en el muro atrial delantero, que comunica con la plaza del pueblo; y una avenida que asciende al calvario.
Los tres ingresos principales son grandes y con arco de medio punto y tres almenas; el cuarto ingreso en el muro atrial derecho es de menores dimensiones, arco de medio punto y tres pinjantes pequeños; el quinto ingreso en el muro atrial posterior es simple y sin arco de medio punto.
Pintura mural
En Copacabana comienza un estilo muy próximo a lo popular que perdurará hasta Susques (1872) y que muestra que la pintura mural es el medio de expresión propio de pueblos pobres donde la posibilidad de obtener lienzos y óleo era difícil o, incluso, imposible. Se recurre entonces a la pintura al temple con cola, algunos ocres, más la pared como sustento.
En el interior del templo hay varias hornacinas donde el intradós del arco se decora con rombos, cuadrifolias y querubines, dos de ellas tienen composiciones al temple una de las cuales representa a San Agustín frontal y hierático, que recuerda las representaciones florentinas trecentistas y la otra a Santiago, el Mayor.
El tema de la pintura mural es el fingido bosque que confirma la añoranza por la naturaleza fértil en el hostil altiplano. El recuerdo de huertas y jardines está presente no solo por los españoles que allí habitaban, sino que se hace extensivo a los nativos quienes periódicamente emigraban a los valles en busca de productos. La teoría de Murra de los enclaves que mantienen las comunidades indígenas sobre las cabeceras de los valles explicaría este fenómeno artístico de la transmisión de motivos vegetales del trópico a las iglesias altiplánicas.
A la entrada del templo encontramos una decoración bastante perdida por el deterioro, la cual representa un zócalo adiamantado y sobre esta, a manera de cenefa, una escena en recuadro.
Fuentes
- Iglesia de Copacabana. En: Pintura mural en el área centro surandina. Viceministerio de Cultura. Dirección Nacional de Patrimonio Monumental. Centro Nacional de Catalogación de Patrimonio Artístico. La Paz, Bolivia. PP. 131-133
