Juan de Padilla Bravo
| ||||||||||||||||
Juan de Padilla. Dirigente de la rebelión de las comunidades de Castilla (Toledo, 1490 - Villalar, Valladolid, 1521). Perteneciente a una ilustre familia de hidalgos toledanos, llegó a regidor de la ciudad y capitán de su milicia.
Síntesis biográfica
Fue uno de los caudillos del levantamiento comunero de Castilla. Era capitán de Toledo, su ciudad natal, a la que llamó a la sublevación contra el gobierno del nuevo rey Carlos I. Tras ello, otras poblaciones como Segovia, con Juan Bravo al frente, y Salamanca, con Francisco Maldonado a la cabeza, siguieron el ejemplo de aquella, ayudándoles Padilla a rechazar a los realistas en encuentros que con ellos tuvieron. Convocó después una Junta en Ávila a la que concurrieron los representantes de todas las poblaciones sublevadas.
Mientras tanto, la reina Juana se hallaba recluida en Tordesillas, ignorante de la situación que atravesaba el país, por lo que Padilla se dirigió hacia dicha ciudad con un destacamento, la puso al corriente de la situación y, persuadida aquella de lo que éste le decía, le confirmó el título de capitán general y le pidió que trasladase a Tordesillas la Junta de Ávila. La mayor parte de las poblaciones importantes de España siguieron el movimiento y los regentes se vieron perdidos. Sólo cuando el virrey de Navarra les proporcionó tropas y el rey de Portugal dinero, lograron juntar un ejército para pelear contra los comuneros, tropas que pusieron al mando del conde de Haro.
Trayectoria
Con la llegada a España de Carlos I, surgieron en Castilla descontentos contra la influencia del séquito extranjero que traía el nuevo rey, así como contra los costes de su política exterior; Padilla, enojado porque el rey no le concedió un cargo al que creía tener derecho hereditario, se unió a los descontentos y se opuso a la concesión del servicio que el rey pedía a las Cortes para financiar sus campañas en Europa (1520).
El rey le hizo llamar para pedirle explicaciones, pero antes de que pudiera acudir a Santiago -donde se encontraba don Carlos-, estalló una rebelión popular en Toledo y en otras ciudades castellanas. Padilla se puso al frente de la rebelión y capitaneó las tropas toledanas que acudieron a defender Segovia del ataque de las fuerzas reales.
Convertida así la protesta en franca rebelión, se inició la llamada Guerra de las Comunidades. Los jefes comuneros, reunidos en la Junta Santa de Ávila, nombraron a Padilla jefe de su ejército. Como tal, participó en las entrevistas con la reina Juana I, prisionera en Tordesillas, de quien no consiguió un apoyo explícito y por escrito a su causa.
Las tensiones internas entre los comuneros llevaron a Padilla a regresar a Toledo cuando la Junta eligió a Pedro Girón para dirigir la guerra; más tarde, cuando éste se pasó al bando real, Padilla volvió a tomar el mando por aclamación popular (1521). Sus tropas fueron alcanzadas por las del conde de Haro cerca de Villalar, donde se desarrolló la desigual batalla el día 23 de abril de 1521.
Muerte
Fue vencido y hecho prisionero, tras lo cual fue conducido a dicha población en la que fue decapitado al día siguiente, pese a las cartas de petición de amnistía que escribieron tanto la ciudad de Toledo como su esposa, María Pacheco. Con él murieron Juan Bravo, Francisco y Pedro Maldonado, y otros partidarios de la causa comunera.
