Jusepe Leonardo

Jusepe Leonardo de Chavacier
Información  sobre la plantilla
Jusepe Leonardo de Chavacier.png
Datos personales
Nacimiento1601
Calatayud, Zaragoza, Bandera de España España
Fallecimiento1652
Bandera de España España
Nacionalidadespañola
Ocupaciónpintor
Datos artísticos
Obras notables-Leonardo-socorro_de_brisach, La_rendición_de_Juliers
Premios
* Premio.
  • Premio.

Jusepe Leonardo de Chavacier. Pintor español

Síntesis biográfica

Nació en Calatayud, Zaragoza, España en 1601. Muy joven, al quedar huérfano de madre, fue enviado a Madrid donde ya en 1616 vivía en casa del pintor Pedro de las Cuevas, recibiendo sus enseñanzas. Allí residía aún cuando en 1622 contrajo matrimonio en la Iglesia de San Sebastián con María de Cuéllar, viuda del pintor Francisco del Moral y seis años mayor que él. Al mismo tiempo pudo recibir enseñanzas de Eugenio Cajés, cuyo estilo se pone de manifiesto en sus primeras obras. Nada se sabe de su trabajo en estos años hasta 1625, fecha del retablo mayor de la parroquial de Cebreros, (Ávila).

Trayectoria artística

En 1634 fue llamado a participar en la decoración del Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro, donde se estaba llevando a cabo un programa de exaltación de la monarquía hispana bajo la supervisión artística de Velázquez. A Leonardo se le encargaron dos de los cuadros de batallas: la Rendición de Juliers y la Toma de Brisach. Un año más tarde se le encuentra inscrito como pintor al servicio del arzobispado de Toledo, a la vez que recibía un nuevo encargo de la Corte: la decoración al temple y al óleo de la ermita de San Jerónimo en el Buen Retiro, indicándosele en el contrato que en su ejecución debía seguir las indicaciones iconográficas de Francisco de Rioja.

"El socorro de Brisach", 1635, Madrid, Museo del Prado, decoró el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro. Posteriormente volverá a ser llamado para trabajar en la Corte con regularidad, participando en las más importantes empresas decorativas que se llevan a cabo en los palacios reales en estos años: 1637, tres vistas de los Reales Sitios para la Torre de la Parada; 1639, juntamente con Félix Castelo, ocho retratos de reyes para el Salón Nuevo; 1641, bóveda de la segunda pieza de la capilla del Real Alcázar de Madrid, encargos que no le servirían, sin embargo, para obtener el nombramiento de Pintor del Rey que solicitó en 1638, al quedar vacante la plaza de Eugenio Cajés. Entre tanto hará compatible su trabajo en la Corte con los encargos para las iglesias del arzobispado de Toledo (1639, lienzos para la iglesia de la Magdalena de Getafe).

A partir de 1644 las noticias escasean y faltan por completo las obras. Consta, en cambio, que en 1648 Angelo Nardi cobró por la pintura del relicario de la capilla del Alcázar de Madrid que él había sido incapaz de terminar.

Víctima de la locura, en fecha incierta fue trasladado a Zaragoza, siendo ingresado en el Hospital de Nuestra Señora de Gracia, también llamado la Casa de Locos. Según Jusepe Martínez había sido una bebida que le dieron por envidia la que le hizo perder el juicio. Se desconoce la fecha de su fallecimiento, pero ya en 1653 María de Cuéllar firmaba un poder como viuda. Antonio Palomino, pocas veces acertado en las fechas, dice que falleció en 1656 «con la demencia en lo mejor de su edad, con gran sentimiento de todos los que le conocieron y trataron en su sano juicio, cuando apenas tenía cuarenta años de edad.»

Obras realizadas

En los lienzos del retablo de Cebreros (1625), José Leonardo se muestra como un pintor manierista rezagado que alarga el canon de sus figuras y aplica contraluces con preocupación tenebrista. Aunque indiscutiblemente próximo a Cajés, es capaz de independizarse de sus tipos característicos y crear composiciones equilibradas. Sin abandonar esos rasgos, el encuentro con Velázquez en 1634 en la decoración del Salón de Reinos, potenciando su sentido del color, enriquece y da un valor nuevo a su pintura. En ese sentido se ha dicho que Leonardo es el mejor discípulo de Velázquez y quien mejor comprendió sus preocupaciones por la luz y el color. En los dos lienzos que pintó para este programa decorativo, la Rendición de Juliers y el Socorro de Brisach, Museo del Prado, sabiamente compuestos, algunas figuras y detalles puntuales, como las propias lanzas o el escorzo del caballo del duque de Feria, inspirado en el Conde-Duque a caballo, pueden haber sido tomados de Velázquez, pero es sobre todo el delicado sentido del color lo que aproxima estas obras a las del maestro sevillano.

Esa misma sensibilidad se traslada a algunas de sus obras que, por su nuevo sentido del color, deben corresponder a esta época, como el Nacimiento de la Virgen y el San Sebastián, uno de los más bellos desnudos de la pintura española, ambos del Museo del Prado, o la Serpiente de bronce de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, con su exhibición de dominio del escorzo. Una preocupación espacial, cercana también a la sensibilidad velazqueña, manifiesta en sus últimas pinturas para el retablo de la Magdalena de Getafe, Magdalena despojándose de sus joyas y Magdalena a los pies de Cristo, y en el San Juan Bautista de Los Angeles County Museum, obra firmada pero de fecha desconocida, en la que se perciben huellas de la pintura veneciana que el pintor pudo conocer mientras trabajaba en palacio.

Fuentes

  • El nacimiento de la Virgen [1]. Consultado: 25 de febrero del 2019
  • Leonardo, Jusepe [2]. Consultado: 25 de febrero del 2019
  • José Leonardo pintordelaCorte de FelipeIV -nacido en Calatayud, 1601 [3]. Consultado: 25 de febrero del 2019