La Canchánchara la taberna del embrujo

La Canchánchara: La taberna del embrujo
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Taberna con sede en Cuba
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País:Bandera de Cuba Cuba
Sede:Trinidad, Sancti Spíritus


La Canchánchara. Inaugurada en 1984, a partir de una restauración de casa, cuyos orígenes se remontan a 1735. Fuentes documentales dan fe de que por esta última fecha estuvo en Trinidad como alarife Tomás Jiménez, sabio en el oficio de los techos. El inmueble, ampliado posteriormente, dispone de una pieza abierta en un portal, sostenido con horconaduras.

Historia

A los forasteros que deciden concurrir a este lugar, los guías turísticos explican el surgimiento de la canchánchara, la cual, ayudaba a los mambises cubanos, durante su lucha contra la metrópoli española, en el Siglo XIX, a soportar el frío y protegerse de las diversas enfermedades respiratorias en tiempos de guerra en los campos de la isla. La tradición no murió, pervive en dicho recinto, que respira cubanía por los cuatro costados.

Tradición

La cubanía habita la taberna La Canchánchara. Para confirmarlo no se precisan tesis doctorales ni otros estudios académicos. Esta casona de Trinidad embruja desde que usted escucha su nombre, tan auténtico como sonoro. Noviembre puso a este sitio trinitario en el camino del reportero.

Y en la propia entrada, un bolero son, con la autoría del mítico Miguel Matamoros, saludó al visitante, quien, de inmediato, pasó a ocupar asiento para disfrutar un entorno, que en la Santísima Trinidad , es único. La credencial del centro, perteneciente al Grupo Empresarial Extrahotelero Palmares, sigue siendo la canchánchara, esa bebida criolla, que no se sirve en jícara, como en otros siglos, pero sí en una vasija de barro, que armoniza con el trago.

Turismo

Turistas procedentes de Canadá, Alemania, Francia, España y Gran Bretaña, entre otros mercados emisores, suelen tener a dicho sitio en su itinerario turístico, atraídos no sólo por la original bebida, preparada a base de aguardiente de caña, la miel de abejas y el zumo de limón; sino por la calidad del servicio en general.

Así lo testimonia a Escambray digital Lisbey Ortiz Balmaceda, trabajador de la entidad, quien asegura que para ese colectivo no existe nada tan prioritario como la atención esmerada al visitante.

Fuentes

La Canchanchara