Iglesia Evangélica Luterana de Isla de Pinos
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La Iglesia Evangélica Luterana de Isla de Pinos. La actual Iglesia de Confesión Luterana es la hija de la Iglesia Luterana establecida en la Isla de Pinos en el seno de la comunidad caimanera, institución que desde su fundación ha ido creciendo, después de atravesar diferentes periodos.
Sumario
Antecedentes históricos
Esta denominación religiosa es heredera de los grandes acontecimientos que se produjeron en la Europa del siglo XVI cuando se originó un movimiento social, conocido como la Reforma, para que se realizaran cambios en la iglesia Católica, inmensamente rica ella y alejada de la causa de los pobres.
Este movimiento abogaba por el adecentamiento de la iglesia católica, volver a su misión de proteger a los pobres y desvalidos, mantener un espíritu de humildad, ser austera, que sus rituales fueran sencillos no tan pomposos y ostentadores de riquezas y acabar con los gravámenes que ahogaban a la población.
Todo esto provocó una ruptura entre las autoridades eclesiásticas, apegadas al poder y a la fortuna y los feligreses que defendían las reformas propuestas por Lutero, los que constituían la mayoría de la población pobre o de menos recursos que veían que el rol asignado a la iglesia había sido totalmente desvirtuado.
Este movimiento se extendió por varias naciones y la confrontación produjo mucha persecución y muerte. La Iglesia católica junto a los Estados tomó su revancha y desencadenó la contrarreforma. De todo este proceso vino un desgajamiento religioso e institucional, comenzando a aparecer diferentes templos con denominaciones diversas, pero que agrupaban a aquellos seguidores de las doctrinas de Martín Lutero que se habían divorciado de la madre iglesia católica, apostólica y romana. Sus cultos eran sencillos, guiados por el espíritu humilde del Creador y de ayuda mutua entre los congregados.
En 1762 La Habana es tomada por una escuadra naval inglesa. Con los cañones y soldados desembarcaron misioneros que en labor proselitista trataban de captar nuevos discípulos para la fe que profesaban. Ya en el siglo XX existían en Cuba, diseminadas por todo el país, diversas congregaciones protestantes con templos, seminarios, escuelas e instituciones que apadrinaban o dirigían.
Su establecimiento en Isla de Pinos
En la otrora Isla de Pinos, desde el siglo XIX hasta inicios del siglo XX, la iglesia que monopolizaba la vida espiritual de los ciudadanos era la católica, herencia del dominio hispánico, pero esta situación fue cambiando con el arribo a estas tierras de personas procedentes de otros países y culturas disímiles que integrarían una población cosmopolita.
A fines del siglo XIX y comienzos del XX una de las comunidades que se asienta al sur de la isla y progresivamente se consolida es la caimanera, originaria de la isla de Gran Caimán en el Mar Caribe. Hombres que se habían dedicado a la pesca por siglos, parten de su ínsula, llena de carencias por aquellos tiempos, para probar suerte en nuestras costas, manteniendo su actividad productiva tradicional. Llegaron en diferentes oleadas o grupos, solos o con sus familias, trayendo en sus espíritus enraizados sus experiencias, habilidades y tradiciones, dispuestos a levantar una nueva vida.
A comienzos del siglo XX y según la tradición oral, una pareja de alemanes luteranos, aquejados de ciertos males, llegaron a la Isla procedentes de La Habana para recuperar su maltrecha salud en los conocidos baños mineros medicinales. Conocieron durante su estancia de la existencia de una comunidad de habla inglesa, asentada al sur del territorio pinero que era afín con sus creencias religiosas y que entonces estaba necesitada de asistencia espiritual. Con posterioridad se comunican con el Sínodo de Missouri para que mandara a algún misionero al lugar. Posiblemente en 1907 o en años próximos a este, establecen contactos con la comunidad caimanera y esta recibe con satisfacción al misionero que inicia su labor evangélica. El Pastor se convierte en maestro, consejero, amigo, pues no había las condiciones mínimas creadas en la comunidad para desarrollar la misión encomendada, pero a pesar de las carencias lleva adelante su trabajo.
En un local habilitado como escuela, imparte los primeros grados de primaria. Los primeros cultos se realizaron en un hotel-especie de albergue- en el poblado de Jacksonville.
Incremento de las comunidades religiosas
A partir de la década de 1920 se establecen comunidades religiosas en la zona norte de la Isla, es el caso de la comunidad de Palm Grove, en Los Colonos, donde instalan su templo hacia la costa. Alrededor del año 1946 construyen una humilde iglesia de madera en el llamado reparto Mañana en la calle 37 entre 36 y 38 en Nueva Gerona, donde el último pastor que ofició fue Glienke.
En la década de 1940 los residentes de Cocodrilo se dieron a la tarea de construir una iglesia. En un principio hicieron la cimentación para una gran obra, pero por falta de recursos se tuvieron que conformar con una más pequeña con paredes de madera de mangle patabán-mangle blanco-, arena y cal. La madera fue donada por Benjamín Navarro, dueño del corte de madera del sur, y el resto de los materiales fueron comprados en Nueva Gerona. La mano de obra la puso todo el poblado de Cocodrilo. Para esta época, con un pastor y la ayuda de estudiantes ministeriales se realizaba los trabajos evangélicos en la entonces Isla de Pinos.
La Iglesia Luterana del Sínodo de Missouri inicio sus actividades religiosas en La Habana alrededor de 1946, ya que hasta esa fecha sólo oficiaba en la Isla. En el año 1956, a través de los pastores Glienke y Gruell atienden a feligreses de habla hispana. Se funda una pequeña comunidad con fieles pineros-caimaneros en la capital, en el central azucarero Hersey y también en Boca de Galafre en Pinar del Río.
Desarrollo
En los años 50 los líderes religiosos tienen una perspectiva mayor del desarrollo futuro de la Iglesia Luterana en Cuba. Comienza así a proyectarse la construcción de sendos templos en La Habana e Isla de Pinos, de mayores dimensiones, amplios, modernos y confortables, atendiendo al crecimiento de las congregaciones. A finales de 1950 comienza a levantarse a la salida de Nueva Gerona, en los terrenos cercanos al conocido reparto “Francois”-hoy “26 de Julio”- un gran edificio destinado a un templo luterano. El capital para ello fue aportado por el Sínodo de Missouri; el aporte de la feligresía fue simbólico, pues su inmensa mayoría estaba conformada por gente muy humilde. Al existir la Zona Franca se abarataban los productos, el cemento se traía de Santo Domingo y otras materias eran de producción nacional.
La Iglesia Evangélica Luterana “San Juan” quedó terminada en el año de 1959, inaugurándose en agosto o septiembre de este año al igual que su similar en La Habana, iniciando así su labor evangelizadora. La obra pinera contaba con tres edificaciones: un enorme y amplio templo, la casa pastoral y una biblioteca - archivo. El pastor que oficiaba, atendía a las feligresías de los poblados de Nueva Gerona y Jacksonville. En una avioneta pilotada por el pinero Cosme Salas, el clérigo luterano se trasladaba al Sur del territorio después de dar el culto en la capital municipal, actividad que se comportó de esta manera hasta el mismo año de 1959.
Con el triunfo de la Revolución Cubana y su política de beneficio popular, son afectados los intereses de la burguesía criolla y de sus padrinos las transnacionales norteamericanas. La intervención y nacionalización de sus propiedades, genera una fuerte hostilidad del gobierno estadounidense hacia el recién inaugurado proceso revolucionario, reflejándose esto también en la actitud asumida por la cúpula de diversas denominaciones religiosas, cuyas matrices estaban en el país norteño. Se incita a sus ciudadanos a abandonar el territorio cubano y a partir de 1960 al 61 estalla el conflicto; todos los pastores se van retirando de Cuba y dejan abandonadas las instalaciones, edificios, bienes y congregaciones religiosas; sus fieles quedan “a la buena de Dios” sin ningún tipo de dirección pues esta iglesia es muy ortodoxa para darle autoridad eclesial a un laico y no prepara su relevo, a sus diáconos.
El último culto que se celebró en el templo de Nueva Gerona fue el de la Navidad de 1960, aunque se conoce que después de 1962 aparece un devoto, con autoridad no reconocida por el Sínodo de Missouri, que asume esa responsabilidad pastoral hasta aproximadamente 1964.
Situación de las entidades religiosas
La situación en que queda la Iglesia Luterana, llevó a que elementos oportunistas sin potestad para ello, asumieran la dirección de la misma, disponiendo a su antojo de sus bienes y propiedades. En 1963 el Gobierno revolucionario, a través del Ministerio de Justicia, dicta una ley para la reinscripción de todas las entidades religiosas vigentes en el país. Ningún representante de la iglesia luterana se presentó, reflejo de la incapacidad de la espuria dirección de la misma en aquellos tiempos. Por tanto, el Estado cubano incautó todas sus propiedades abandonadas por no tener personalidad jurídica.
El templo pinero corrió suerte parecida, sus archivos fueron destruidos y sus símbolos arrancados con violencia producto del apasionamiento desbordado de la época. Fue convertido en almacén mayorista del Ministerio de Comercio Interior y funcionó como tal hasta 1970 en que por gestiones del Dr. Antonio Núñez Jiménez se proyecta y se decide instalar allí la sede Territorial de la Academia de Ciencias de Cuba. El 24 de febrero de 1971 queda inaugurada la sede en las instalaciones de la iglesia. La casa pastoral fue convertida en Archivo Histórico, junto a otra dependencia, el local del santuario fue ocupado por un museo que permaneció hasta finales de los años 80 del pasado siglo en que fue retirado, acondicionándose este espacio para ubicar al Archivo Histórico Municipal, el cual permanece en dicho lugar hasta nuestros días.
Relación de los pastores que oficiaron en los templos pineros
Hasta 1933 aproximadamente:1 Ortel Precose, 2 Nestle, 3 Hoffner, 4 Seller, 5 Labranze, 6 Norman, 7 Hartman, 8 Finnegnmer,
A partir de la década de 1930:, 1 Bruning, 2 Abehallemant, 3 Noll, 4 Tippin, 5 Rush, 6 Oermann, 7 Delgado, 8 Glienke,
Después de 1959
1 H. Glienke partió de Cuba en enero de 1961 por el llamado de su gobierno porque “no tenía garantías para su vida”.
2 Gustavo Puerto, motivado por la propaganda norteamericana sobre el retiro de la patria potestad por parte del gobierno cubano.
Kart, parte entre los años 1963-1964 debido a problemas personales.
Fuente
Guillermo Fabián Maquintoche Vázquez. Ponencia La Iglesia Evangélica Luterana de Isla de Pinos.
