Leucocitosis

Leucocitosis
Información sobre la plantilla
Educacional34.jpg

Leucocitosis. Es una condición donde usted tiene demasiada leucocitaria en su sangre. A las leucocitarias también se les llama glóbulos blancos (WBC). Sus WBC son parte de su sistema inmune. Su sistema inmune es la parte de su cuerpo que combate infecciones y enfermedades. Las WBC son creadas en su médula ósea, que es un tejido suave, esponjoso dentro de sus huesos. Algunas de sus WBC permanecen en su médula ósea y algunas son liberadas en su sangre. Hay diferentes tipos de WBC. Cada tipo de célula puede ser liberada en su sangre para un propósito distinto.

Causas

Ocurre cuando demasiados WBC son liberados en su sangre. Leucocitosis podría mejorar con o sin tratamiento. Si su sangre tiene una gran cantidad de WBC, usted entonces podría tener hiperleucocitosis. Hiperleucocitosis es una condición seria que requiere tratamiento inmediato. Con tratamiento, sus WBC podrían regresar a un nivel normal. Sus síntomas, como dolor y apetito pobre, podrían disminuir.

Otras de las causas son:

  • Infección: Una infección es una causa común de leucocitosis. Una infección puede ser causada por gérmenes llamados bacteria. También podría ser causada por un virus o parásito (pequeño insecto que podría vivir en sus intestinos). Neumonía y viruela son infecciones que pueden causar leucocitosis.
  • Inflamación: [Inflamación] (hinchazón, dolor, y enrojecimiento) es otras causa común de leucocitosis. Artritis es una inflamación en las articulaciones que puede causar leucocitosis. Sus articulaciones son donde se unen dos huesos.
  • Daño a tejidos: Usted puede adquirir leucocitosis cuando el tejido de su cuerpo sufre daño, como quemaduras. Algunas enfermedades que causan daño a los tejidos incluyen cáncer y enfermedades del corazón.
  • Reacciones inmunes: Leucocitosis puede ocurrir cuando su sistema inmune reacciona fuertemente. Esto puede ocurrir durante una ataque de asma o de alergia.
  • Problemas con la médula ósea: Usted podría adquirir leucocitosis si su médula ósea produce demasiados WBC. Esto puede ocurrir si se tiene leucemia (cáncer en la sangre o médula ósea). Con leucemia, su cuerpo produce más WBC de lo que necesita. Estos WBC no funcionan como WBC normales. Otras enfermedades en la médula ósea que pueden producir demasiados WBC incluyen policitemia vera, mielofibrosis, y trombocitopenia.
  • Medicamento: Algunos medicamentos podrían causar leucocitosis. Estos incluyen medicamentos usados para tratar inflamación, trastornos mentales, cáncer, y problemas con la respiración.
  • Estrés: Se puede adquirir leucocitosis si setiene demasiado estrés emocional. Leucocitosis también puede ocurrir si el cuerpo pasa por estrés físico. Esto puede ocurrir si usted pone demasiado esfuerzo en su cuerpo, como durante ejercicio extremo. Cirugía, convulsiones (temblores incontrolables), y enfermedad también puede causar tensión en el cuerpo.

Signos y síntomas

Es posible no tener ningún síntoma con leucocitosis. De tener síntomas, estos serían causados por la enfermedad que condujo a su leucocitosis. Síntomas comunes que se podría tener con leucocitosis, o su causa, podrían incluir cualquiera de los siguientes:

  • Fiebre (temperatura del cuerpo elevada).
  • Sangrado o moretones.
  • Sentirse débil, cansado, o enfermo.
  • Sentirse mareado, desvanecido, y sudoroso.
  • Dolor o hormigueo en sus brazos, piernas, o abdomen (estómago).
  • Dificultad para respirar.
  • Dificultad para pensar o ver.
  • Pérdida de peso sin estar intentándolo o apetito pobre.

Actitud clínica ante una leucocitosis

Ante un paciente con una leucocitosis se debe evaluar el hemograma, para discernir qué tipo de glóbulos blancos están aumentados. Es muy importante reseñar que siempre debemos fijarnos en el valor absoluto, no en el porcentaje. Con este primer análisis se aclara si se encontra ante una neutrofilia, una linfocitosis, una eosinofilia o una monocitosis. También deben descartarse otras alteraciones analíticas asociadas y sobre todo (lo más importante) realizar una cuidadosa historia clínica que orientará el diagnóstico en la mayor parte de los casos. Siempre es necesario repetir los resultados del hemograma a las 2-4 semanas. En ocasiones puede estar indicado solicitar un frotis o extensión de sangre periférica que podría mostrar alteraciones morfológicas que orienten en el diagnóstico.

Si se encontra ante una leucocitosis persistente sin una causa aparente y/o hay afectación de otras series (eritrocitos/plaquetas), o aparecen en la exploración datos como adenopatías o esplenomegalia, sería recomendable la derivación a hematología para descartar procesos mielo o linfoproliferativos.

Estudio de la morfología de la sangre periférica

Para el estudio de la morfología de la sangre periférica se utiliza el frotis. En una extensión de sangre periférica observada al microscopio pueden detectarse algunas alteraciones morfológicas, que si bien rara vez son patognomónicas, sí suelen orientar hacia un diagnóstico. A continuación se detallan algunas de las más importantes con su potencial significado clínico:

Desviación izquierda o mielemia (elementos jóvenes) más granulación tóxica: la presencia de formas inmaduras de granulocitos en sangre periférica (mielocitos, metamielocitos, cayados, etc.) junto con una granulación más intensa de los mismos debe hacer sospechar en primer lugar un proceso infeccioso.

Linfocitos activados, células linfoplasmáticas y linfomonocitoides: deben hacer sospechar en primer lugar una infección vírica (mononucleosis infecciosa). También pueden aparecer en reacciones de hipersensibilidad a fármacos.

Presencia de blastos (células muy inmaduras) en sangre periférica. Su aparición obliga a descartar enfermedades hematooncológicas (leucemias). Degranulación de los neutrófilos: Síndromes mielodisplásicos y anemias refractarias. Anomalía de Pelger- Huet: defecto congénito de la segmentación de los neutrófilos.

Véase también

Fuente