Santa María Goretti

Santa María Goretti
Santo

Religión o Mitología	Catolicismo
Día celebración	6 de julio
Fecha de canonización	24 de junio de 1950
País o región de origen	Italia

Santa María Goretti. Adolescente mártir que por conservar su castidad es asesinada.

Sumario

1 Síntesis biográfica
2 Proceso de beatificación y canonización
3 Santa María Goretti, en cine y teatro
4 Fuentes

Síntesis biográfica

María nace el 16 de octubre de 1890, en Corinaldo (Ancona, Italia), en el seno de una familia humilde, siendo la tercera de los siete hijos de Luigi Goretti y Assunta Carlini. Al día siguiente de su nacimiento es bautizada y consagrada a la Virgen, recibiendo el sacramento de la Confirmación a los seis años.

Luego del nacimiento de su cuarto hijo, Luigi Goretti emigra con su familia a las grandes llanuras de los campos romanos; estableciéndose en Ferriere di Conca, al servicio del conde Mazzoleni, donde María no tarda en revelar una inteligencia y madurez precoz. Allí, tras un año de trabajo agotador, Luigi contrae paludismo y fallece en diez días. Para Assunta y sus hijos comienza un largo calvario, que hizo que la niñez de María transcurriera de una forma bastante dura; ayudando siempre a su madre en las tareas domésticas. Era piadosa y asidua en la oración, llevando siempre un rosario enrollado alrededor de la muñeca. De la contemplación del crucifijo, María se nutre de un intenso amor a Dios y de un profundo horror por el pecado.

Al entrar al servicio del conde Mazzoleni, Luigi Goretti se había asociado con Giovanni Serenelli y su hijo Alessandro. Ambas familias vivían en apartamentos separados, aunque con la cocina en común. Al poco tiempo Luigi se arrepiente de aquella unión con Giovanni Serenelli, al ser una persona muy diferente de los suyos, bebedor y carente de discreción en sus palabras; pero luego de la muerte de su esposo, Assunta y sus hijos caen bajo el yugo despótico de los Serenelli. A partir de ese momento Assunta siempre está en el campo y no tiene tiempo de ocuparse de la casa, ni de la instrucción religiosa de los más pequeños; motivo por el cual María se encarga de todo, en la medida de sus posibilidades. Por su parte, Giovanni, posteriormente de que la esposa falleciera en el hospital psiquiátrico de Ancona, despreocupa la educación de su hijo Alessandro, joven robusto de 18 años, quien se convierte en una persona grosera y viciosa.

Al estar en contacto con los Goretti, algunos sentimientos religiosos han hecho mella en Alessandro. A veces se suma al rezo del rosario que realizan en familia y los días de fiesta asiste a Misa. A pesar de todo ello, el joven hace proposiciones deshonestas a la inocente María, quien rechaza la adulación y sus amenazas. Una tarde, María estaba sentada en lo alto de la escalera de la casa, remendando una camisa, cuando Alessandro subió las escaleras con intención de violar a la niña. María opuso resistencia y trató de pedir auxilio; pero como Alessandro la tenía agarrada por el cuello, apenas pudo protestar y decir que prefería morir antes que ofender a Dios. Al oír esto, el joven desgarró el vestido de la muchacha y la apuñaló brutalmente. Ella cayó al suelo pidiendo ayuda y él huyó.

María fue transportada a un hospital, en donde perdonó a su asesino de todo corazón, invocó a la Virgen y murió veinticuatro horas después, un 6 de julio de 1902, a los once años de edad.

Alessandro fue condenado a 30 años de prisión y trabajos forzados. Por largo tiempo, fue obstinado en no arrepentirse de su pecado, hasta que una noche, tuvo un sueño en el que vio a la niña María, recogiendo flores en un prado y luego ella se acercaba a él y se las ofrecía. A partir de ese momento, cambió totalmente y se convirtió en un prisionero ejemplar. Su sincero arrepentimiento y su buena conducta en el penal le devuelven la libertad al cumplir 27 años de su condena. Después, ocupará el puesto de hortelano en un convento de capuchinos, mostrando una conducta íntegra, y será admitido en la orden tercera de San Francisco. Al salir de la cárcel, una noche de Navidad de 1938, pide perdón a la mamá de María, y aquella noche, en la misa de Gallo, comulgan juntos.

Proceso de beatificación y canonización

El caso de María Goretti se extendió por todo el mundo. En 1947, el Papa Pío XII la beatificó y el 24 de junio de 1950 la canonizó, definiéndola como «pequeña y dulce mártir de la pureza».

La ceremonia se realizó en la Plaza de San Pedro, debido a la gran cantidad de asistentes. Aquí acompañaron a Pío XII la madre de 82 años, dos hermanas, un hermano de María y su arrepentido asesino Alessandro. Durante esta ceremonia su Santidad Pío XII exaltó la virtud de la santa y sus estudiosos afirman que por la vida que llevó aún cuando no hubiera sido mártir habría merecido ser declarada santa. Sus restos mortales descansan en el santuario de Nettuno de los pasionistas.

Santa María Goretti fue santa no por el hecho de tener una muerte injusta y violenta, sino porque murió por defender una virtud inculcada por la fe cristiana. A esta santa se la llama la “Mártir de la pureza”. Sus imágenes la representan como una campesina con un lirio en la mano, que es el símbolo de la virginidad, y con la corona del martirio.

Su vida enseña a todos los jóvenes a la vivencia de la virtud de la pureza: pureza de alma y cuerpo. A perdonar a nuestros enemigos, a pesar de que nos hayan causado un daño irreparable y a ser fuertes ante situaciones difíciles, confiando siempre en Dios.