Tarea extraclase
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Tarea extraclase. La tarea extraclase es una forma de tarea docente, entendida esta última como célula del proceso docente.
Sumario
Tarea extraclase
Es la acción del profesor y los estudiantes dentro del proceso que se realiza en ciertas circunstancias pedagógicas, con el fin de alcanzar un objetivo de carácter elemental, de resolver el problema planteado al estudiante por el profesor. Bajo esta concepción el proceso docente se desarrolla de tarea en tarea hasta alcanzar el objetivo, es decir, hasta que el estudiante se comporte del modo esperado, de forma que todo el proceso docente en la escuela estará dado por una serie sucesiva de situaciones, las que poseerán como núcleo el desarrollo de una tarea, es decir, el logro de un objetivo, que implicará la transformación sucesiva de la personalidad del estudiante.
¿Por qué tarea extraclase?
Antes de abordar el concepto y la definición, analicemos primero la semántica, el significado de las unidades lingüísticas que conforman la expresión: tarea extraclase . Tarea: viene del árabe vulgar ṭaríḥa, y este de la raíz árabe clásica ṭarḥ, que significa, echar , asignar ; es el trabajo que debe hacerse en un tiempo limitado, generalmente breve. La palabra extraclase contiene el prefijo latino extra, que quiere decir, fuera de (la clase). En consecuencia, tarea extraclase es toda tarea docente que se orienta para que se realice fuera de la clase que imparte el profesor.
Características
- La tarea extraclase, no es una vía o instrumento de evaluación, como pudiera pensarse, sino un trabajo puramente académico que orienta de antemano el profesor al alumno para que lo desarrolle en un tiempo relativamente breve, fuera del aula y de la jornada escolar, en la casa, en la biblioteca, etc., con o sin ayuda de la familia, para que después, mediante instrumentos bien definidos, evaluar lo asignado.
- La eficacia y eficiencia de la materialización de la tarea extraclase se puede valorar por medio de la evaluación; con ella se puede comprobar si se ejecutó o no correctamente y si se puede o no calificar.
- Las tareas extraclases se realizan para determinar el nivel de dominio alcanzado por el estudiante en el desarrollo de las competencias cognitivas implicadas en los contenidos de la misma, mediante la sistematización de ellas, es decir, por medio de la búsqueda y aplicación de otros conocimientos ya adquiridos en función de la solución de dicha tarea, contribuyendo, así a la formación y desarrollo de diferentes habilidades y posibilitando su solidez.
- La tarea extraclase generalmente tiene un carácter evaluativo, al retroalimentar al profesor del nivel de dominio de los objetivos propuestos en ella y, a partir de ahí, tomar decisiones para elevar la calidad el proceso docente-educativo.
- De acuerdo con su finalidad, las tareas extraclase pueden ser orientadas a la solución de problemas teóricos, a problemas prácticos o a la combinación de esto: teórico-prácticos. (En los procesos escolares, se habla de problema en el sentido educativo-cognitivo. Un problema es una cuestión relacionada con un contenido de enseñanza con algún grado de dificultad y que para su resolución se tiene que investigar, consultar, procesar, etc.).
Pasos para elaborar la tarea extraclase
Para elaborar la tarea extraclase, el profesor deben tomar en cuenta los siguientes pasos:
- Formular los objetivos.
- Determinar los contenidos (conocimientos, habilidades, convicciones).
- Elaborar la tarea extraclase:
- Confeccionar o seleccionar el texto de la tarea con todos los datos suficientes y necesarios, de manera que permitan la salida coherente de los contenidos en su solución, sobre la base de la experiencia y creatividad de cada profesor.
- Elaborar el sistema de preguntas que permitan, con su solución, el cumplimiento de los objetivos propuestos.
- Determinar las fuentes bibliográficas y no bibliográficas que deben consultar los estudiantes para la solución de la tarea extraclase.
- Preparar la orientación de la tarea extraclase como una actividad justamente para tal fin.
Momentos en la aplicación de la tarea extraclase
La aplicación del sistema de tareas transita por tres momentos fundamentales:
- Momento de orientación:
Metodológicamente la orientación de la tarea extraclase (y cualquier tarea docente) tiene sus reglas, la observancia cabal de ellas posibilita una adecuada guía y ajuste para la resolución de los planteamientos propuestos que los alumnos han de resolver. Ellas son:
Primera regla: para la orientación de la tarea extraclase hay que prever necesariamente el tiempo suficiente para ello. ¿Cuántas veces se les orienta apresuradamente a los alumnos la misma? Evidentemente, cuando se actúa así, los alumnos ven en ella algo sin importancia e inútil. También, hay una tendencia generalizada a creer que ellos son incapaces de resolver la tarea por sí solos o que ella constituye una sobrecarga para los alumnos; por tal razón, hay profesores que no dejan tarea extraclase; conjetura errónea, por demás, dañina.
Segunda regla: al plantear el trabajo con la tarea extraclase tiene que hacerse con todo el grupo en total escucha y atención. Los alumnos tienen que ser conscientes de que la orientación del profesor es vital para la consecución del aprendizaje cabal. No deben darse las orientaciones pertinentes en presencia de la más mínima entropía, interna o foránea que haya en el aula.
Tercera regla: el profesor tiene que lograr que todos los alumnos comprendan íntegramente el contenido del trabajo con la tarea extraclase, tienen que saber qué van a hacer en cada uno de las preguntas, ejercicios o actividades propuestas y cómo lo van a resolver. Para lograr que el trabajo de orientación la tarea extraclase sea resuelta de la mejor y productiva manera, el profesor tiene que ser consciente que en la medida en que les describa a los alumnos los algoritmos de trabajo, las diferentes variantes de solución, la técnica operatoria, los recursos mnemotécnicos a utilizar para un mejor aprendizaje (cuadros sinópticos, resúmenes, esquemas, fichas de contenidos, gráficos, mapas y redes conceptuales, determinar lo esencial, etc.), resolverán aventajadamente las preguntas, ejercicios o actividades propuestas. De este modo ellos deben quedar en condiciones de trabajar la bibliografía básica y complementaria y elaborar informes y/o trabajos investigativos acerca del contenido estudiado.
A los alumnos se les ha de enseñar a aprender, como se les ha de enseñar a leer y a escribir. Esto es muy importante, porque son incontables las veces que asumimos como un hecho que ellos saben objetivar los elementos esenciales del contenido sobre la base de diversos recursos de aprendizaje, sin valorar que en realidad no poseen estos requerimientos. No debemos olvidar que en la estructuración del trabajo con la tarea extraclase es necesario tomar en cuenta las diferencias individuales, planificar la ayuda que se dará a los alumnos que presentan dificultades y las tareas adicionales para aquellos más aventajados. El profesor debe ser consciente de la alta responsabilidad que tiene de lograr que todos y cada uno de sus alumnos adquieran conocimientos, habilidades, hábitos y convicciones necesarias para la vida y, se eduquen como ciudadanos capaces de enfrentar las múltiples exigencias del quehacer social.
- Momento de ejecución:
Es el momento que más tiempo consume, implica la búsqueda, la indagación, el procesamiento de la información, su cotejo, su sistematización. También requiere del intercambio con el profesor para hacer consultas, evacuar posibles dudas que surjan en el camino. El alumno en esta etapa tiene la posibilidad de enfrentarse por sí solo o de trabajar colectivamente, siempre apoyándose en todos los recursos posibles para resolver las interrogantes planteadas. La etapa de ejecución tiene su colofón en la elaboración del informe escrito con la estructura formal de estilo, de forma y género, convenido previamente durante la etapa de orientación. Durante la ejecución de la tarea extraclase por parte de los alumnos, se alcanza mayor interacción y socialización entre los propios alumnos, entre estos y la familia o con los mismos profesores a partir del análisis, el intercambio de vías de solución, la comunicación y el debate entre ellos para buscar la solución que expresarán luego durante la etapa de evaluación.
En la etapa de ejecución el trabajo con las fuentes bibliográficas es muy importante, ya que constituye en esencia el trabajo intelectual escolar: incluye la consulta de bibliografía, la elaboración de distintos tipos de fichas; el trabajo con el catálogo de la biblioteca y con los softwares educativos; la elaboración de resúmenes, cuadros sinópticos, esquemas, gráficos, fichas, informes, redes y mapas conceptuales con la literatura básica y complementaria.
- Momento de control
Es un momento muy importante y definitorio de la tarea extraclase, pues es en él donde se mide y valora la eficacia y eficiencia de las dos etapas anteriores, comprobándose si se realizaron o no correctamente y si se puede o no calificar como se ha afirmado anteriormente. Es aquí donde se emplean las diferentes vías para su evaluación y autoevaluación de los resultados, mediante trabajos escritos, exposición oral, individual o colectiva, por medio de seminarios, trabajos teórico-prácticos, prácticas de laboratorio, etc., todos con un carácter formativo, democrático, procesal y contextualizado. En esta etapa es donde se manifiesta con mayor intensidad la cuarta regla metodológica para el trabajo con la tarea extraclase: la tarea extraclase tiene que ser controlada individualmente, alumno por alumno, a través del llamado de atención, el convencimiento de su importancia, la prudente sanción y, mediante formas adecuadas de control que tengan un carácter ejemplarizante, comprobatorio y demostrativo.
La experiencia pedagógica revela que la ausencia de compromiso por la realización de la tarea extraclase por parte de los alumnos, depende en gran medida, de la autoridad, ejemplaridad y preponderancia del profesor en el aula. Si no hay el firme y sistemático control y evaluación de la realización del trabajo con la tarea extraclase, no habrá, en modo alguno, el responsable cumplimiento del deber por parte de los alumnos.
Existen diferentes formas de tareas extraclases, entre los más comunes se encuentran: el seminario, la práctica de laboratorio y el trabajo teórico-práctico.
Es importante acotar que la tarea de la clase, esa que se orienta para la casa, constituye la forma más sencilla y palmaria de tarea extraclase; se instituye, generalmente, en evaluación sistemática, empleada habitualmente al inicio de la clase, para evaluar a un grupo bien reducido de alumnos a causa de que el tratamiento del nuevo contenido lleva orgánicamente procesos de consolidación, control, y evaluación. La consolidación es trascendental para fijar el contenido tratado, ello se materializa principalmente en la tarea para la casa, forma muy importante del trabajo independiente.
