Tomillo silvestre

Tomillo Silvestre
Información sobre la plantilla
Thymus vulgaris 9038 1.jpg
Nombre Científico:Thymus vulgaris
Reino:Plantae
Orden:Lamiales
Familia:Labiadas
Género:Thymus
Especie:T. vulgaris
Hábitat:suelos secos y soleados


El Thymus vulgaris, más conocido como tomillo o tremoncillo, es una de las plantas aromáticas originarias del Mediterráneo, perteneciente al género Thymus y a la familia de las labiadas, muy utilizada como condimento y planta medicinal.

Descripción

El tomillo común es una planta silvestre que se encuentra en diferentes regiones españolas, a pesar de que su aspecto es el de un vegetal no leñoso, lo cierto es que se trata de un arbusto muy ramificado con tendencia completamente rastrera, que por lo general no pasan de unos cuantos centímetros de altura. Sus hojas son numerosas y diminutas además de redondeadas que se disponen para cubrir los tallos de la planta en su totalidad durante todo el año.

Hábitat

Los tomillos son amantes de las posiciones soleadas, solo crecen en las laderas dónde da directamente la luz solar. Aunque está acostumbrado a soportar las estaciones de frío.

Coloración

El color de las hojas es de color verde grisáceo y pequeñas.

Floración

El color de sus hojas puede ser del verde oscuro al amarillo, según la variedad, su floración se produce a mediados de primavera en racimos terminales que habitualmente varían del color violeta al blanco.

Durante su floración que se recoge esta hierba, su aroma es muy particular y al sentirlo se identifica inmediatamente con los aromas de cocina.

Propiedades del tomillo

Digestiva, carminativa, antipútrida, aperitiva, antirreumática, antiséptica, pectoral, expectorante, antibiótica, emenagogo. Bucal (enjuagar) cicatrizante, antiséptica, relajante.

Dentro de las propiedades curativas que posee esta planta el componente más importante de este vegetal es el timol y científicamente se sabe que actúa sobre la circulación y los centros nerviosos fortaleciendo todo lo que puede de ésta.

Cuenta con cualidades digestivas y gracias a su consumo a través de infusiones podemos disfrutar de una buena digestión Además de esto, también contiene funciones calmantes lo que consigue que estemos mucho más saludables sobre todo cuando se trata de la gripe y la tos seca que se genera.

Las ramas de tomillo, además de su contenido para las infusiones, también pueden añadirse a la sopa y de esta forma estimular el apetito.

Usos

El tomillo puede ser usado en infusiones, aceite esencial y el pomadas al añadirle gotas del aceite escencial de este.

Los usos más populares del tomillo son aquellos relacionados con la digestión y el sistema respiratorio, debido a las propiedades carminativas y su poder para reducir gases y aerofagias en el primer caso, y por sus propiedades antisépticas, expectorantes y mucolíticas en el segundo.

Por su poder antiséptico, puede aplicarse incluso en heridas abiertas. Su acción purificante de la piel ayuda a equilibrar el cuero cabelludo, eliminando problemas de caspa. El tomillo se emplea también para problemas bucales como aftas o gingivitis, gracias a las propiedades antimicóticas que posee, unidas a las antisépticas, le permiten tratar vaginitis e infecciones por Candida albicans.

El timol presente en el tomillo es la causa de sus propiedades antirreumáticas y antiinflamatorias. Y la naringenina a su vez favorece la circulación, siendo de gran ayuda en personas con problemas de riego. Posee a su vez propiedades antioxidantes, y por consiguiente, anti envejecimiento.

El tomillo es un emenagogo, esto es de ayuda en las menstruaciones difíciles y dolorosas. Y por su actividad sobre el aparato circulatorio ayuda a reducir la intensidad de las migrañas. También antiguamente era empleado para combatir parásitos intestinales.

En la actualidad se estudia su acción sobre el sistema inmunológico y el posible efecto sinérgico de su asociación con otros inmunoestimulantes. Es probada su eficacia como preventivo de procesos gripales y catarrales.

Todas las propiedades medicinales del tomillo, unidas a su baja toxicidad, permiten su aplicación en tratamientos prolongados.

En infusión

Trata las afecciones en las vías respiratorias: el tomillo es una hierba muy usada para esto, ya que actúa como antiséptico, expectorante y mucolítico. De este modo, tomar infusiones de tomillo podrá ayudarnos a eliminar la mucosidad y reducir la tos en caso de resfriado, gripe, catarro, etc.

Mejora los problemas gastrointestinales y de digestión: por otro lado, también puede usarse contra este tipo de dolencias, puesto que el tomillo evita la formación de gases y puede resultar útil en casos de indigestión, flatulencias o dolores de estómago. Además, el tomillo es capaz de reducir los espasmos estomacales e intestinales y, a su vez, incrementar la secreción de bilis y, por consiguiente, facilitar el proceso de digestión.

Efecto desinfectante, cicatrizante y antiséptico: esta es otra de las propiedades del tomillo en infusión, por lo que resulta muy apropiado para tratar heridas. Hierve tomillo en un cazo con agua y aplícalo sobre la zona afectada con la ayuda de una gasa limpia y esterilizada. Notarás mejoría en poco tiempo y deberás repetir la acción hasta que cicatrice por completo.

Mejora la anemia: el tomillo es una planta rica en hierro, de tal forma que puede usarse para suplir las deficiencias de este mineral en casos de anemia. Se recomienda tomar unas tres tazas de infusión de tomillo diarias para contrarrestar el déficit de hierro en la sangre naturalmente.

En la piel

Actúa como repelente de insectos: esto es en parte porque se trata de una planta aromática y, por lo tanto, podrás usar el aceite de tomillo para protegerte de las picaduras de estos animales.

Cicatriza heridas: como mencionábamos en el apartado anterior, el tomillo en la piel puede ayudar a cicatrizar las heridas. Aunque no solo puede aplicarse en infusión, sino también en aceite o en pomada.

Ayuda a combatir el acné: se ha demostrado que es uno de los métodos más eficaces para tratar este tipo de enfermedades juveniles. Esto se debe a que el tomillo tiene altas propiedades para controlar los niveles de grasa de la piel, uno de los motivos por los que aparece el acné.

Regenera, tonifica y reafirma la piel: una de las propiedades del tomillo es que ayuda en la formación de la elastina, elemento fundamental para regenerar, tonificar y reafirmar nuestra piel. Por otra parte, esto también ayuda a combatir la sequedad de la piel.

En el cabello

Estimula el crecimiento del pelo: las propiedades regenerativas del tomillo ayudan a que el cabello crezca más rápido y más sano. Fortalece el pelo: la elastina es también una de las principales causantes de que el cabello se fortalezca.

Estimula la circulación capilar: el tomillo aplicado en el cabello es capaz de estimular la circulación sanguínea de nuestro cuero cabelludo.

Aporta brillo al pelo: al fortalecer y estimular el crecimiento del cabello, también hace que este crezca más sano y, en consecuencia, más brillante.

Combate la alopecia y la caída del pelo: al mejorar el crecimiento del pelo y estimular la circulación capilar, ayuda a combatir la caído del cabello y la alopecia.

Controla el exceso de grasa del cabello: como decíamos más arriba, el tomillo es un excelente controlador de la grasa de la piel, con lo que ayudaría a mejorar este aspecto de nuestro pelo.

Previene y combate la caspa: del mismo modo, también ayuda a controlar la caspa, ya que hidrata y regenera nuestra piel.

Contraindicaciones

En caso de embarazo y lactancia, se debe de respetar la dosis.

Consumo

Se debe de preparar 1,5-3 g por infusión Se puede hacer uso de los beneficios del tomillo en forma de infusiones, decocciones, baños, mezclas con su aceite esencial, extracto, jarabe, vahos y oleatos. Es una de las plantas que mejor mantiene su fragancia luego del proceso de secado.

Como facilita la digestión, los chef utilizan esta hierba en platos muy grasos. Se utiliza para hacer licores, aromatizar vinagres, en sopas, guisos, verduras y rellenos.

Cultivo

Se siembra o desgaja de primavera a verano, se puede plantar todo el año, se adapta bien a todo tipo de clima y terrenos. Si se recoge en flor es mucho más perfumado. Se planta cada 40 cm y es Perenne.

La reproducción puede ser por semilla o por esqueje. Si es por semilla se puede sembrar a finales de invierno en vivero, para disponer de plantas durante la primavera y verano. Y si siembras a finales de verano podrás disponer de tomillos durante el otoño.

Para la plantación se debe prestar un especial cuidado en la elección del sustrato. Este debe de ser para plantas de exterior y que contenga un buen porcentaje de arena que mejore su drenaje. Su pH debe de situarse entre 5,5 y 6,3, aunque un poco por encima no supone grandes problemas.

El abonado de fondo debe de ser equilibrado, aunque ligeramente más rico en potasio para evitar que el tomillo crezca excesivamente tierno y poco compacto. Su exposición será a pleno sol y no necesita de pinzados ya que rebrota con suma facilidad.

La frecuencia de los riegos debe controlarse para evitar un exceso de humedad. El riego localizado es el más recomendado y debe realizarse cuando el sustrato comience a estar ligeramente seco, para favorecer el desarrollo radicular y evitar someter a la planta a un estrés innecesario.

En cuanto a plagas y enfermedades, dada su rusticidad carece prácticamente de enemigos.

Fuentes

  • Tomillo Silvestre Disponible en: flores.ninja Consultado el 27 de enero de 2017.