Amalivaca

Amalivaca
Información sobre la plantilla
Amalivaca.jpeg
SincretismoAmaruaca y Amarivaca

Amalivaca. Personaje de la mitología indígena venezolana. Principal héroe cultural de los Tamanacos, pueblo indígena de filiación lingüística caribe, hoy desaparecido.

Amalivaca

Dios enigmático, de contextura atlética suavizada por frondosa barba y cabellera blanca, casi del mismo color de su túnica.

Tamanacos

Tamanaco es realmente el nombre de un cacique, que tras la muerte del cacique Guaicaipuro, trató de reunificar las tribus de la costa venezolana para luchar contra los conquistadores españoles. En 1570 fue vencido y preso. Condenado a morir en la horca como su predecesor, un capitán español le ofrece la libertad si logra vencer a su perro. Tamanaco moría en el intento por la mortales mordidas de aquella bestia que tenía por nombre “Amigo” y que a dentelladas le destrozó la garganta al bravo cacique. Su cabeza fue cortada luego y colgada en una viga. Así el valiente cacique se convirtió en una leyenda para los demás pueblos indígenas.

Entre los pueblos indígenas que habitaron desde las costas del Mar Caribe, en la hoy Venezuela, hasta las selvas amazónicas, hubo un pueblo, hoy extinto, que habitó las riberas del río Orinoco y que hoy se conoce como Los Tamanacos.

Los Tamanacos habitaron al norte del actual distrito Cedeño del Estado Bolívar, área en la que situaban su punto de origen; hasta que a mediados del siglo XVIII fueron trasladados a la misión jesuita de La Encaramada, cercana a la población de La Urbana, Estado Bolívar.

Para esta época, los tamanacos eran relativamente pocos, lo que de alguna manera era la expresión de una disminución su población como consecuencia del contacto directo o indirecto de los indígenas con los europeos, lo que trajo bajas considerables en los aborígenes debido a guerras y epidemias. Para el momento de contacto con la civilización europea, las naciones indígenas de la cuenca del Orinoco conformaban, en un marco de horizontalidad política, un amplio sistema de redistribución en interdependencia regional que abarcaba las áreas ribereñas e interfluviales del gran río, los llanos actuales de Venezuela y Colombia, e inclusive, llegaba a extenderse hasta las Antillas.

En este contexto más amplio se debe entender el funcionamiento de esas culturas indígenas llamadas de selva tropical, muchas de las cuales compartían tradicionales similares regionales. En el caso de las religiones indígenas, éstas acusan influencias recíprocas, como lo evidencian las semejanzas entre las diversas cosmogonías.

Mitología

Para los Tamanacos existían tres mundos. El superior donde moraba el Dios Sol y los demás dioses celestes: El Trueno, El Rayo, La Lluvia y El Viento. Un estrato medio donde vivían en armonía los hombres, las plantas y los animales que habitaban la Madre Tierra. El Tercero era un mundo inferior, subterráneo y subacuático; habitado por demonios, duendes, los muertos, los dueños de las aguas, y los animales acuáticos.

En ese mundo subterráneo y acuático habitaba una enorme anaconda de las aguas, Lalikilpará, y en cierto momento, cansada del ruido de los hombres que habitaban las riveras de su dominios provocó un gran cataclismo, un enorme diluvio que inundó toda la tierra, destruyendo a los hombres, sus templos y ciudades. Las montañas, que eran lugares sagrados por estar sus cumbres más cerca del cielo, se volvieron los únicos lugares para escapar de la gran inundación.

Dos jóvenes que sobrevivieron al gran cataclismo preguntaron a los dioses qué debían hacer para poblar de nuevo la tierra y evitar otra calamidad de la misma magnitud. Eran Amalivaca (también conocido por otras tribus como: Amaruaca y Amarivaca) y su hermano Uochi. Los dioses le encomendaron a los jóvenes la tarea de repoblar el mundo sembrando las semillas de Moriche que habían traído en su canoa, desde las tierras del sur.

Los hermanos sembraron las plantas de Moriche y de sus semillas nacieron hombres y mujeres que repoblaron el territorio; crearon los ríos —incluyendo al Orinoco— para que las aguas bajaran hasta el mar; poblaron los ríos de peces y la tierra de animales y aves. Plantaron a su vez cacao, maíz, papas, yuca, etc. Los nuevos hombres ahora pescaban y recolectaban sin maltratar la Madre Tierra.

Amalivaca y su hermano Uochi, al ser los únicos hombres que sobrevivieron, tenían el don de la inmortalidad y los nuevos hombres reconocieron en estos hermanos a seres superiores y los consideraron similares a los dioses; es por ello que Amalivaca para muchos de esos pobladores era visto como un dios de las aguas.

Al momento de detenerse para crear el Orinoco, comenzaron a discutir pues querían que el mismo pudiera fluir a favor de la corriente tanto aguas arriba como aguas abajo, a fin de que los remeros no se cansaran durante su recorrido; pero finalmente ante tan difícil empresa desistieron de su empeño inicial.

Amalivaca vivió entre los tamanacos por un largo tiempo, en el sitio denominado Maita, en donde todavía existe una gruta de piedras en lo alto de un cerro llamada Amalivaca Yeutipe (Casa de Amalivaca) por haber habitado éste allí; y una gran roca conocida como Amalivaca Chamburai (Tambor de Amalivaca), que era precisamente su tambor.

Según la tradición oral, un día Amalivaca decidió regresar en canoa al otro lado del mar, de donde había venido y adonde supuestamente iban las almas de los hombres después de la muerte. Cuando estaba listo para irse, ya en su canoa, les dijo a los tamanacos con otra voz distinta a la usual:

" uopicachetpe mapicatechí (mudarán únicamente la piel)"

Esto significaba que tendrían una vida eterna, pues se rejuvenecerían constantemente como hacen algunos animales al cambiar de piel. Sin embargo, una anciana que lo oía, dudó de lo que decía Amalivaca y pronunció un «oh» que parecía poner en tela de juicio lo anunciado por el héroe, que se enfureció y de inmediato les comunicó que todos tendrían una vida finita al decir con firmeza estas palabras:

"mattageptchí (morirán))"

Los tamanacos terminaron atribuyendo la existencia perecedera de los hombres a este episodio.

Fuente

  • Personajes importantes. Amalivaca. Disponible en:Venezuela online. Consultado el 30 de julio de 2014.
  • Biografía de Amalivaca. Disponible en:Venezuelatuya. Consultado el 30 de julio de 2014.