Codo de niñera
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Codo de niñera. El codo de niñera es una lesión que se produce en los niños de 1 a 5 años. Está originada por la salida de la cabeza del radio de su lugar, de modo que el ligamento que lo rodea queda entre la cabeza del radio y la del cúbito. Esta lesión popularmente se conoce como "codo de niñera" y médicamente como subluxación de la cabeza del radio.
Causas
- Por la tracción repentina de la muñeca, generalmente cuando el padre intenta evitar que el niño se caiga o cuando lo sujeta y él se opone a moverse.
- La inmadurez de las estructuras y la laxitud del niño hacen que un pequeño tirón produzca la lesión.
Síntomas
El niño llora por el dolor, y deja el brazo afectado inmóvil, en extensión o en ligera flexión. Al pasar un tiempo, si el brazo se mantiene así, el niño dejará de llorar pero se negará a mover el brazo. No podrá realizar la rotación del brazo a nivel del codo (por ello esta alteración recibe también el nombre de pronación dolorosa del codo) y la flexión del mismo no será completa.
¿Qué sucede en el codo de niñera?
En el codo de niñera la cabeza del radio se sale de su sitio, donde es sostenida por un ligamento. Esta lesión produce dolor y limitación para los movimientos del codo.
Tratamiento
El tratamiento consiste en reducir la pronación mediante la tracción del antebrazo con flexión y supinación simultánea. El resultado es espectacular y el niño puede mover el brazo inmediatamente.
Si no se trata esta alteración, la movilidad del codo puede quedar alterada permanentemente, siendo imposible la extensión completa del mismo.
Es una lesión recurrente, por lo que hay casos en los que se repite con frecuencia. Esto sucede sobre todo en niños con un exceso de elasticidad en los ligamentos (hiperlaxitud ligamentaria). En estos casos puede ser necesaria la inmovilización con una férula un par de semanas.
Prevención
Los padres deben estar informados del mecanismo de producción y deben evitar tirar del brazo del niño. Se recomienda sujetar al niño por las axilas o la cintura cuando se eleve del suelo.
Si el niño está aprendiendo a caminar, es mejor cogerlo por ambas axilas o por ambos brazos. Si va a caerse y lo llevamos sujeto de un brazo, no debemos tirar nunca del bracito, mejor sujetarlo con la mano que nos queda libre.
Por otro lado hay que cuidar de no tirar del brazo del niño al subir escalones o al apremiarlo a caminar.
