Conejo ribereño de Sudáfrica
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Bunolagus monticularis. Conejo ribereño de Sudáfrica o conejo de los bosquimanos es una especie de mamífero lagomorfo de la familia Leporidae. Es el único miembro del género Bunolagus. Se trata de una especie rara y poco estudiada. Tan solo se encuentra en Sudáfrica, en el centro y sur del desierto de Karoo, entre la densa maleza de las riberas, es capaz de saltar arbustos de más de un metro de alto cuando huye de algún depredador, generalmente águilas negras.
Sumario
Población
Según Collins et al. 2004, hay 10 subpoblaciones, y en ninguna de ellas los ejemplares adultos superan el 10 % del total. Además, no hay más de 50 ejemplares en cada una de ellas. Este conejo es descubierto a la ciencia en 1902. Tras ello fue visto varias veces entre 1902 y 1948 y ya no se supo nada de ellos, al menos oficialmente, hasta 1979. En 1987 se supo que habitaban en dos poblaciones de la zona, en Calvinia y en Deelfontein. Para 2001 la población estaba más reducida y actualmente habita principalmente en las tierras agrícolas privadas creadas en las zonas de vegetación ribereña a lo largo de los cursos fluviales estaciónales.
En 1989 se estimaba que el hábitat potencial para esta especie podría llegar a dar cobijo a 1435 conejos, aunque la población real era mucho menor. En 1995 había menos de 1000. En 2005se calcularon unas 250 parejas adultas. Por si esto fuera poco, la densidad de las poblaciones en 1989 estaba estimada en 0,064 - 0,166/ha. Teniendo en cuenta que se calculó que se necesita una densidad mínima de la población de 6,4 conejos /km2 para mantener una población viable, estamos ante una situación preocupante.
Características
El conejo ribereño de Sudáfrica es el único miembro del género Bunolagus, lo que le convierte en una especie rara, ya que es endémica y con características únicas. Además, se trata de una especie poco estudiada, como ocurre con muchas especies de número reducido. Mide entre 33 y 50 cm. de longitud y su peso ronda el 1,5 Kg (de 1,4 a 1,9 kg). en machos, algo más en hembras.
Solo viven entre 2 y 4 años en estado salvaje, por lo que las hembras solo llegan a tener entre 2 y 4 crías en toda su vida. En cautividad viven hasta 5 años Tiene una característica raya negra que parte desde su boca y llega hasta la mejilla, en forma de “bigote”. También cuenta con largas orejas, una orla blanca que rodea el ojo y su parte ventral es de un tono rojizo. Las patas traseras están densamente pobladas y poseen mayor anchura que las delanteras. La cola posee un pelaje suave, con tonalidades algo grisáceas. Estos conejos son de costumbres nocturnas, escondiéndose durante el día de depredadores y alimentándose por la noche. Son animales más bien solitarios con un comportamiento de apareamiento polígamo. Debido a sus adaptaciones al salto, son capaces de saltar arbustos de más de un metro de alto cuando huye de algún depredador, generalmente águilas de la zona. No obstante son menos rápidos que otros conejos de África, por lo que dependen de la densa vegetación para camuflarse ante los depredadores.
Curiosamente, estos conejos producen dos tipos de excrementos. Por la noche, cuando los conejos son más activos, depositan excrementos duros, más parecido a una egagrópila (bolas formadas por restos de alimentos no digeribles para ellos). Por el día, los excrementos son más blandos y son reingeridos por los conejos, con lo que obtienen vitamina B producida por las bacterias de su intestino, así como minerales de calcio y fósforo más fácilmente asimilables para ellos tras haber pasado por su aparato digestivo.
Las hembras tienen un Home Range de 12,9 hectáreas de media +/- 43 %, y los machos lo tiene de 20,9 hectáreas +/- 14 %. El Home Range viene a ser el área que utilizan de media para cualquier tarea que realicen. Mientras que entre sexos no superponen sus home range, dentro del territorio de un macho sí que se pueden encontrar hembras.
Alimentación
Estos conejos se alimentan principalmente de brotes y hojas de los árboles y arbustos, y no suele alimentarse de vegetación herbácea. Las hierbas las suelen incluir en todo caso cuando hay más disponibilidad en la estación lluviosa.
Reproducción
Los machos se aparean con más de una hembra. Las hembras se guarecen en madrigueras en cámaras subterráneas, de 10 cm. de diámetro y 25 de largo, y dan a luz generalmente a un sólo retoño por camada, una tasa de nacimiento bastante pobre en comparación con otros conejos. La incubación dura entre 35 y 36 días y los nacimientos ocurren entre agosto y mayo.
Al igual que ocurre con el conejo doméstico, las crías son altriciales, lo que significa que nacen ciegas, sin los conductos auditivos abiertos, prácticamente sin pelo y con una movilidad muy limitada. Su organismo debe madurar después del nacimiento para alcanzar las características del individuo adulto y requiere de un largo proceso de aprendizaje. Los recién nacidos, de unos 40 a 50 g, se desarrollan en la madriguera donde la madre acumula pelo y hierba para que las crías estén cómodas; se trata del único conejo africano que hace madrigueras subterráneas para sus crías.
Hábitat y área de distribución
Esta especie es endémida de Sudáfrica, donde sólo se le puede encontrar en la región central de Karoo (meseta semidesértica en la Provincia del Cabo); se le puede ver entre la densa maleza de las riveras.
Vive en zonas de densos matorrales ribereños en las llanuras de inundación aluvial de los ríos estacionales del centro del Desierto Karoo. Los matorrales tienen entre 0,5 y 1 m de altura en las zonas donde viven, y prefieren tipos de suelo que permitan la construcción de madrigueras.
Amenazas
- Destrucción de su hábitat: La pérdida de hábitat debido a la conversión del terreno a la agricultura ha sido la principal amenaza para el conejo ribereño. El mayor problema radica en que la llanura de inundación de los ríos estacionales es una zona idónea en aquel lugar para cultivar. Actualmente más del 60 % de la vegetación original del hábitat de estos conejos se ha transformado a cultivo. Aun así parece ser que la velocidad de transformación se ha frenado enormemente.
- Otras amenazas: Otras amenazas son la pérdida de hábitat debido a la recogida de leña y la presión del pastoreo ovino, la caza tradicional con perros, la depredación incontrolada por los perros, la mortalidad debido a la que caen en trampas, y la construcción de presas que se secan los ríos.
Medidas de conservación
Aunque normalmente a los conejos no se les ha dado mucha importancia en África, el caso del conejo ribereño ha sido diferente. Los esfuerzos de conservación de la Wildlife Society de Sudáfrica y la Fundación de la Naturaleza de Sudáfrica (South African Nature Foundation), con ayuda de las investigaciones, han ayudado mucho a que se conozca la difícil situación por la que pasan. Además algunas organizaciones tanto gubernamentales como no gubernamentales se han unido en el Proyecto de Conservación del Conejo Ribereño (Riverine Rabbit Conservation Project) para llevar a cabo trabajos de conservación.
También existe el Grupo De Trabajo Del Conejo Ribereño (Riverine Rabbit Working Group Overview) (EWT- RRWG) fue establecido en agosto de 2003 y se encarga de la coordinación de todos los esfuerzos de conservación de estos conejos y de su hábitat. Actualmente es la única organización no gubernamental (según su web) que trabaja exclusivamente en la región del Karoo, por lo que su papel fundamental es el de la conservación con vistas al futuro, la educación ambiental, y conseguir que las comunidades locales del Karoo mejoren su situación. Esta organización está llevando a cabo un interesante programa de concienciación entre los agricultores de la zona, ya que al encontrase la mayoría de estos conejos en las zonas de propiedad privada, su supervivencia depende en gran parte de la voluntad de los propietarios por adoptar métodos de cultivo y pastoreo que perjudiquen lo mínimo a estos animales.
Algunos agricultores de Karoo han llegado a declarar sus explotaciones como Lugares de Patrimonio Natural para proteger a estos conejos y a su hábitat (Collins 2001, Yeld 1999). En la actualidad, ninguno de los hábitats fluviales del conejo está protegido, por lo que estas áreas de conservación establecidas por acuerdo voluntario de los propietarios son actualmente la mejor opción. Sin embargo, no hay que dejar de lado la necesidad de zonas protegidas. Hay un estudio genético en curso de la especie.
Medidas de conservación propuestas
Entre las medidas de conservación recomendadas por el CBSG CAMP South Africa workshop se encuentran la investigación sobre la historia de la especie, la gestión del hábitat la gestión de la población silvestre, el estudio de los factores limitantes, la cría en cautividad, la educación ambiental y la reintroducción entre otras.
Véase tanmbién
Enlaces Externos
- Bunolagus monticularis - Diversidad animal
- Bunolagus monticularis - Sitio Zgap
- Nombre vulgar del conejo ribereño - Laberinto en extinsión
- Bunolagus monticularis - Especies evolutivamente distintas
