Jean-Henri Riesener

Jean-Henri Riesener
Información sobre la plantilla
Retrato jean.JPG
Ebanista, escultor y proyectista
NombreJean-Henri Riesener
Nacimiento1734
Gladbeck, Bandera de Alemania Alemania
FallecimientoEnero de 1806
Bandera de Francia Francia
OcupaciónEbanista
CónyugeViuda de Oeben
Obras destacadasEscritorio favorito de la reina María Antonieta, escritorio de cilindro de Luis XV

Jean-Henri Riesener. Ebanista favorito de María Antonieta, Riesener es el maestro indiscutible del mobiliario Luis XVI. Riesener realizó para Luis XV uno de los más magníficos muebles del mundo: el escritorio de su gabinete interior en Versalles.

Síntesis biográfica

Nació en Gladbeck en 1734; hijo de un fabricante de sillas, la silla es el único mueble que no hizo nunca. Se trasladó a París y entró con 20 años en el taller de Oeben en el Arsenal. Oeben murió en 1763 y entonces Riesener era uno de los mejores ebanistas del taller. Dos años después se quedo como gerente del taller. Los muebles que salieron del Arsenal durante los cinco años siguientes a la desaparición del maestro eran obra de Riesener y de sus ayudantes, pero llevaban la estampilla se Oeben, en 1767 Riesener alcanzó el grado de maestro.

En 1768 se casó con la viuda de Oeben y siguió su carrera profesional durante treinta años

Mueble realizado por Jean-Henri Riesener

más. El matrimonio a parte de facilitarle el taller, le hizo pertenecer a la principal dinastía del gremio de París. Riesener realizo prácticamente muebles de todo tipo, salvo sillerías. En 1774 fue nombrado “ébaniste du Roi” lo que representó una década de éxito, durante este tiempo suministro muebles al Garde-meuble Royal, por sumas de dinero muy altas, y fue el ebanista más caro de París, trabajo especialmente para la reina María Antonieta.

Trabaja para la monarquía

Inicia su carrera para la monarquía con el escritorio de cilindro de Luis XV, instalado en su gabinete interior. Encargado en 1760 a su suegro y maestro Oeben, constituye un mueble excepcional por su novedad, por la elegancia de su marquetería, la calidad de sus bronces y, sobre todo, la ingeniosidad de su mecanismo: ¡el escritorio al completo se cierra con una sola vuelta de llave y se abre con sólo presionar un botón! Terminado en 1769, es modificado en la Revolución por su autor, que debe eliminar los símbolos reales. El prestigio del mueble fue inmenso y consolida definitivamente la reputación de Riesener.

Desde entonces, no dejan de lloverle pedidos de la corte. Durante más de diez años será el principal proveedor de las residencias reales. Pero sus precios exorbitantes le hacen perder a una parte de su clientela que prefiere a su homólogo Beneman. No obstante, María Antonieta sigue fiel a él.

A partir de 1775, Riesener entrega 4 rinconeras para el salón de los juegos de Luis XVI y ese mismo año hace para él un nuevo mueble excepcional: la cómoda de su Cámara en Versalles. Sus líneas rectas, su aspecto macizo, la pesadez y la riqueza de los bronces, el resalte trapezoidal de la marquetería de la parte central son características del estilo neoclásico que practicaba el ebanista. A este pesado estilo contrapone un estilo más sobrio, como el de la gran mesa de secuoya de la biblioteca del Rey.

Riesener elabora para María Antonieta los muebles de mayor gracia e innovación: para

Este escritorio, obra maestra del genio ebanista Jean-Henri Riesener (17341806), que data de 1783,reconocido como «obra de gran interés patrimonial»,se encuentra en el Palacio de Versalles.

el Salón de los Nobles de Versalles, entrega dos rinconeras y una cómoda en las que sustituye la marquetería por un simple chapeado de caoba. Los bronces se reducen y aligeran. Para su gabinete de Fontainebleau entrega un frágil mobiliario de nácar, único en su género. Para el Pequeño Trianón realiza una serie de muebles originales: escritorio de ángulos redondeados, consola de servicio idéntica en caoba y bronce. Vendidos en subasta durante la Revolución, Riesener recuperará una parte de sus muebles para revenderlos a una clientela extranjera adinerada. De nada sirve. El período marca definitivamente el fin de su genial carrera.

Cambio de estilo

Para poder atender los numerosos encargos, subcontratos parte de ellos, colaboró intensamente con Weisweler y también con el alemán Marklein, fabricante de muebles mecánicos. Su última época de producción representa un estilo de gran sencillez y austeridad. El cambio de gusto y la crisis económica determinaron el cambio de estilo. Empezó a trabajar con los chapeados de caoba de las Antillas y los finos fileteados de bronce dorado que eran menos costosos que los complicados paneles de marquetería floral y los bronces ricamente esculpidos.

Declive

Su declive vino en 1785, cuando cambio la dirección del Garde-meuble Royal. Francia entró en crisis y en la nueva organización no cabían los altos precios de Risesener. Mas tarde la revolución trajo su ruina, y cuando se subastaron los muebles de la Corona, compró muchos de ellos con la convicción de que volvería a venderlos, pero la penuria económica le obligó a poner en venta todas las existencias y modificar la simbología política de sus obras al gusto republicano.

Muerte

Murio en enero de 1806, hacia tiempo que había abandonado el Arsenal y vivía con su hijo en la rue Saint Honoré.

Fuentes