Prepucio
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Prepucio. El prepucio es una piel fina que recubre el glande cuando el pene está en reposo y lo deja al descubierto durante la erección. En los hombres circuncisos, el prepucio ha sido cortado quirúrgicamente.
Sumario
Definición
El prepucio es un anillo de piel que recubre el glande en la punta del pene. En el nacimiento y en niños muy pequeños, una parte del prepucio puede adherirse más o menos al glande y podemos encontrar dificultades para bajarlo: hablamos entonces de adherencias prepuciales. La bajada del prepucio no debe ser forzada en estos casos y por lo general desaparece normalmente en los primeros años de vida. Sin embargo, esta limitación puede ser difícil o imposible en algunos niños y a pesar del crecimiento el glande sigue sin poder ser descubierto: hablamos entonces de fimosis. Puede ser necesario recurrir a la eliminación parcial o total del prepucio a través de una intervención quirúrgica cirugía llamada circuncisión o postectomía.
Esquema
Fimosis (estrechamiento del prepucio)
En caso de fimosis, el prepucio no se repliega por detrás del glande o lo hace con mucha dificultad. Las causas pueden ser congénitas o por un estrechamiento sobrevenido del prepucio. La fimosis patológica debe diferenciarse de la adherencia que posee el prepucio en la infancia, algo completamente normal por motivos de desarrollo. La fimosis en bebés y niños, esto es, que el prepucio no permita replegarse a esas edades, no es, por tanto, preocupante. La adherencia es en este caso algo pasajero que desaparece a una edad de entre tres y cinco años, la mayoría de las veces por la retirada manual del prepucio. Solo cuando esta sigue sin ser posible estamos ante una fimosis patológica que necesita tratamiento.
El tratamiento de una fimosis consiste, por tanto, en eliminar o alargar un prepucio que es demasiado estrecho. En algunos casos es posible solucionar la patología sin necesidad de operar, pero la mayoría de las veces hay que intervenir. En una fimosis sin tratar puede sobrevenir una complicación al replegar el prepucio por detrás del glande: que no vuelva ya a su posición inicial. Es la parafimosis, y puede llevar a la necrosis del tejido del glande.
Fimosectomía, cuidados en el domicilio
Tras una fimosectomía, es recomendable que descanse durante unos días. Después de la intervención, el pene puede estar algo hinchado y mostrar una coloración rojiza o azulada durante una semana. En los primeros días tras la intervención, el paciente puede sentir cierta quemazón al orinar. Durante los tres primeros días, le recomendamos que después de orinar se cambie la venda.
Transcurridos esos tres días, se recomiendan baños de agua templada sin jabón. Lo más adecuado es utilizar un calzoncillo que ofrezca soporte y que sitúe el pene hacia arriba, en dirección al ombligo, para que la hinchazón desaparezca lo más rápido posible. Para el dolor puede utilizar paracetamol o aplicar una crema anestésica. Transcurridas un par de semanas se desarrolla una capa protectora en el glande y desaparece la sensación desagradable. Para nadar o practicar deporte, debe esperar de tres a cuatro semanas. Los puntos que se utilizan en una fimosectomía son solubles y se caen en un plazo de 7 a 14 días. Después de cuatro a seis semanas podrá volver a masturbarse o a mantener relaciones sexuales.
Fimosectomía, Circuncisión, el tratamiento
La fimosectomía se realiza normalmente bajo sedación intravenosa. Durante la intervención se acorta el prepucio, lo que permite que el glande quede al descubierto, ya sea parcial o totalmente. Una fimosectomía (extirpación del prepucio) dura aproximadamente una media hora. Transcurridas de una a dos horas desaparecen los efectos de la anestesia y el paciente vuelve a sentir el pene.
