Sarcoma cardíaco

Sarcoma Cardíaco
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Concepto:Tumor maligno que ocurre en el corazón

Sarcoma Cardíaco: es un tipo de tumor que ocurre en el corazón. El sarcoma cardíaco es un tumor maligno (canceroso) primario, caracterizado por un crecimiento acelerado, que habitualmente conduce con rapidez a la muerte.

Descripción

Se considera que los tumores son primarios o secundarios, en este caso el sarcoma cardíaco es un tumor maligno primario. El tumor primario es el sitio original de crecimiento del tumor. El tumor secundario se origina a partir de otro tumor que se encuentra en otro lugar del cuerpo. Los tumores primarios del corazón no son frecuentes y la mayoria son benignos (no cancerosos).

Los sarcomas primarios del corazón son tumores malignos muy poco frecuentes que se caracterizan por un crecimiento rápido, lo que habitualmente conduce a la muerte en un plazo de tiempo breve.

Síntomas

Los síntomas de los tumores cardíacos varían, dependiendo de donde se encuentra el tumor. Los tumores del corazón pueden comprometer la superficie externa del corazón, pueden encontrarse en una o más cavidades del corazón (intracavitarios) o dentro del Tejido Muscular del corazón. Los sarcomas cardíacos, frecuentemente, son un tipo de sarcoma llamado angiosarcoma. Los angiosarcomas en general se originan en la aurícula derecha (cavidad superior derecha), o en el pericardio (superficie externa) del corazón. La mayoría de los angiosarcomas se desarrolla en la aurícula derecha, provocando la obstrucción de la entrada y la salida del flujo de sangre. Esta obstrucción puede provocar síntomas tales como la hinchazón de los pies, los tobillos y el abdomen así como la distensión de las venas del cuello. Esto ocurre debido a que la sangre que regresa al corazón luego a haber recorrido todo el cuerpo no puede ingresar fácilmente ni ser expulsada de la aurícula derecha.

Los angiosarcomas cardíacos que se originan en el pericardio pueden provocar un aumento de líquido en el pericardio, la fina capa que rodea el corazón. Si se acumula suficiente cantidad de líquido en el pericardio, se verá afectada la capacidad del corazón para bombear sangre. Algunos signos que indican que esto ha ocurrido pueden incluir dolor en el pecho, dificultad para respirar, fatiga y palpitaciones.

Se pueden desprender trozos diminutos (émbolos) de los sarcomas cardíacos y ser transportados a otras partes del cuerpo a través del torrente sanguíneo. Un émbolo puede obstruir el flujo de sangre a un órgano u otra parte del cuerpo, provocando dolor y daño al órgano o parte del cuerpo que se encuentra más allá del lugar donde se produjo la obstrucción del flujo de sangre. Los émbolos pueden afectar el cerebro (provocando un derrame cerebral), los pulmones (causando sufrimiento respiratorio) y otros órganos y partes del cuerpo.

Síntomas adicionales incluyen la hemoptisis (tos con expectoración de sangre), problemas de ritmo cardíaco y congestión facial superior. Otros signos de sarcoma cardíaco que no se relacionan con la ubicación del tumor en el corazón pueden incluir fiebre, pérdida de peso, sudoración nocturna y malestar general (fatiga, cansancio o, no sentirse bien).

Los síntomas del sarcoma cardíaco pueden parecerse a los de otros trastornos o problemas médicos.

Cómo se diagnostica

Los métodos para el diagnóstico del sarcoma cardíaco varían, en cierto grado, de acuerdo con los síntomas presentes. Además del examen físico y la historia médica completa, los procedimientos para diagnosticar el sarcoma cardíaco pueden incluir los siguientes:

El ecocardiograma (También conocido como eco) el cual es un examen no invasivo que utiliza ondas sonoras para estudiar el movimiento de las cavidades y las válvulas del corazón. La ecocardiografía se ha convertido en la herramienta más útil en el diagnóstico del sarcoma cardíaco, permitiéndole al médico ver el tamaño y la ubicación exacta del tumor.

El electrocardiograma (ECG) el cual es un examen que registra la actividad eléctrica del corazón, muestra los ritmos anormales (arritmias o disritmias) y detecta el daño al músculo cardíaco. El sarcoma cardíaco puede provocar cambios en el ritmo del corazón; sin embargo, los cambios ECG pueden indicar la existencia de otros problemas cardíacos, por lo tanto, se necesitan otras herramientas diagnósticas para realizar un diagnóstico definitivo de sarcoma cardíaco o cualquier otro tipo de tumor cardíaco.

La tomografía computarizada (TC) este procedimiento de diagnóstico por imagen utiliza una combinación de radiografías y tecnología computarizada para obtener imágenes de cortes transversales del cuerpo, tanto horizontales como verticales. Una TC muestra imágenes detalladas de cualquier parte del cuerpo, incluidos los huesos, los músculos, el tejido adiposo y los órganos. Las TC son más detalladas que las radiografías generales y se usan para definir con más precisión el tamaño, la localización y otras características del tumor.

Las imágenes por resonancia magnética (MRI) este procedimiento de diagnóstico utilizan una combinación de imanes grandes, radiofrecuencias y una computadora para producir imágenes detalladas de los órganos y estructuras dentro del cuerpo, para definir con más precisión el tamaño, la ubicación y otras características del tumor.

La radiografía de tórax es un examen de diagnóstico que utiliza rayos invisibles de energía electromagnética para obtener imágenes de los tejidos internos, los huesos y los órganos en una placa. Este examen puede detectar el aumento de tamaño del corazón o la congestión pulmonar.

La cateterización cardíaca, con este procedimiento se toman rayos X tras inyectar un contraste (colorante) en una arteria. Este procedimiento se utiliza para localizar los estrechamientos, las oclusiones y otras anomalías de una determinada arteri y la biopsia la cual es la extracción de una pequeña cantidad de tejido para examinarla bajo el microscopio. Otras pruebas pueden sugerir que el tumor es el cáncer, pero la única manera de saber con certeza es realizando una biopsia. El pedazo de tumor extirpado es analizado por un patólogo (un médico que se especializa en la evaluación de las células, tejidos y órganos para diagnosticar enfermedades).

Tratamiento

El médico determinará el tratamiento específico para el sarcoma cardíaco teniendo en cuenta, su edad, su estado general de salud y sus antecedentes médicos, qué tan avanzada está la enfermedad, su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias y las expectativas para la evolución de la enfermedad.

Una vez que el sarcoma cardíaco evoluciona a un punto tal que comienzan a manifestarse los síntomas, significa que el tumor ya se ha diseminado a otras partes del cuerpo (en el 80 por ciento de los casos). En este estadio, el tratamiento resulta difícil y complicado. Cuando el tumor se disemina a otras partes del cuerpo se llama metástasis. El tipo de tratamiento para el sarcoma cardíaco depende principalmente de la ubicación y el tamaño del tumor así como de la extensión de la metástasis.

El médico puede determinar si se puede extirpar el tumor, procedimiento que se realiza como una cirugía a cielo abierto. No obstante, este procedimiento muchas veces es difícil debido a la ubicación del tumor.

En algunos casos, el sarcoma invadió el corazón en tal grado que es imposible extirparlo en su totalidad. En estos casos, se puede intentar realizar un trasplante cardíaco. Sin embargo, luego del trasplante el paciente debe recibir medicamentos inmunosupresores (medicamentos que ayudan a prevenir el rechazo de un tejido extraño por parte del cuerpo), y este medicamento puede estimular el nuevo crecimiento del sarcoma.

Una nueva y emocionante perspectiva para el tratamiento del sarcoma cardíaco es el autotrasplante que es un procedimiento quirúrgico en el cual se extrae el corazón del paciente de manera que se logre la extirpación total del tumor que compromete el tejido cardíaco. Luego de la extirpación del tumor, el corazón se vuelve a colocar en el paciente. Debido a que el paciente no recibe el corazón de otra persona, no hay necesidad de usar medicamentos inmunosupresores. Los nuevos tratamientos farmacológicos también se están estudiando, y puede estar disponible en los ensayos clínicos.

En algunos casos, radioterapia o quimioterapia pueden ser administradas para ayudar a aliviar los síntomas o mejorar la calidad de una persona de la vida.

Vea también

Fuentes