A esmorga
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A Esmorga. es una novela escrita por Eduardo Blanco Amor y publicada en Buenos Aires en 1959. Odisea de 24 horas que expone no solo las aventuras y desventuras de un trío de amigos sino también una crítica social aguda de la Galicia de la época, retratando las desigualdades, la hipocresía y el sombrío panorama de la posguerra española.
Resumen
Un desenfrenado periplo de 24 horas es vivido por tres amigos, Cibrán, Milhomes y Bocas, un día prolongado de juerga en la Galicia de principios del siglo XX en la ficticia ciudad de Auria (un trasunto de Ourense). Se sumergen en el alcohol, la violencia, el sexo y la desesperación. La novela se despliega a través de la perspectiva de Cibrán, quien, desde una cárcel, rememora los eventos de esa fatídica jornada que cambiaría sus vidas para siempre. Todo comienza en la madrugada, cuando el trío, impulsado por un deseo insaciable de libertad y evasión de sus rutinarias vidas, decide embarcarse en una jornada de excesos. Lo que inicia como una búsqueda de diversión en tabernas y bares de la ciudad, pronto se convierte en una espiral de acciones cada vez más autodestructivas y violentas. A lo largo del día, los amigos se ven envueltos en una serie de eventos caóticos: desde enfrentamientos con la ley hasta encuentros íntimos marcados por la pasión y el desenfreno. Cada escenario revela las profundidades de sus personalidades, sus deseos ocultos y las tensiones subyacentes en sus relaciones. Bocas, el más impulsivo y temerario del grupo, arrastra a Cibrán y Milhomes hacia situaciones cada vez más peligrosas, evidenciando la fragilidad de sus vidas y la precariedad de sus existencias. En medio de este torbellino de alcohol, sexo y violencia, se comete un asesinato. Este acto irrevocable marca el punto de no retorno para los protagonistas, empujándolos hacia un abismo del cual no pueden escapar. La realidad de sus acciones comienza a pesar sobre ellos, desencadenando una serie de consecuencias que culminarán de manera trágica. El final de A Esmorga es tan conmovedor como inevitable. Cibrán, el único sobreviviente de esta odisea, se encuentra encarcelado, reflexionando sobre las decisiones y los errores que los llevaron a ese fatal desenlace. A través de su narración, el lector es testigo de la profunda melancolía y el arrepentimiento que lo embargan, así como de su resignación ante un destino marcado por la tragedia.
Personajes Principales
Cibrán, narrador de la historia, un hombre atrapado en una existencia que desprecia, casado con una mujer a la que no ama. Su vida toma un giro drástico cuando decide unirse a sus amigos en una esmorga, una juerga sin límites que lo llevará a cuestionar su propia moralidad y destino. Milhomes, el más equilibrado del grupo, aunque esto no es decir mucho dada la naturaleza de sus acciones. Posee una inteligencia aguda y una capacidad para la manipulación, pero incluso él se encuentra superado por los eventos que se desencadenan durante la esmorga. Bocas es el más trágico de los tres, un ser impulsivo y autodestructivo cuya boca (que le da su apodo) y sus acciones lo meten constantemente en problemas. Bocas es el catalizador de muchos de los eventos más extremos de la novela, arrastrando a Cibrán y Milhomes a situaciones cada vez más peligrosas.
Personajes Secundarios
La esposa de Cibrán, no se le da un nombre específico, la esposa de Cibrán es un personaje que simboliza la vida convencional y las ataduras sociales que él desea escapar. Su presencia en la historia refleja las tensiones entre el deseo de libertad personal y las responsabilidades familiares. O’Viso es el dueño de uno de los bares que los protagonistas frecuentan durante su esmorga. Este personaje representa la indulgencia hacia los excesos de los tres amigos y, a la vez, la complicidad de la sociedad en sus desmanes. La Sargenta, figura autoritaria en la novela, representa la ley y el orden, pero también la corrupción y el abuso de poder dentro de las instituciones encargadas de mantener el control social. Rizos es una joven con la que se encuentran durante su juerga. Su interacción con los protagonistas añade complejidad a la trama, introduciendo elementos de deseo, tentación y las consecuencias de los actos impulsivos.
