Adolfo Manuel del Toro Hernández

Adolfo Manuel
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NombreAdolfo Manuel del Toro Hernández
Nacimiento27 de septiembre de 1929
Caibarién, Villa Clara, Bandera de Cuba Cuba
OcupaciónDiseñador - ilustrador
PremiosDistinciones de la ALfabetización, Raúl Gómez García, 40 Aniversario de las FAR. Medalla por la condición de Hijo Ilustre de La Habana Vieja.

Adolfo Manuel del Toro Hernández. Diseñador-ilustrador en la Editorial Pedagógica del Ministerio de Educación. Fundador del Instituto Cubano del Libro y de la Editorial Pueblo y Educación. Ostenta la medalla por la condición de Hijo Distinguido del Municipio La Habana Vieja. Miembro de la Unión de Periodistas de Cuba, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, la Asociación Cubana de Artesanos Artistas y el Fondo Cubano de Bienes Culturales.

Sus inicios

Nació en Caibarién el 27 de septiembre de 1929 y desde pequeño sintió gran inclinación hacia las Artes Plásticas que compartió con sus hermanos Mariano y Ramón. De niños hacían carrozas de lodo: dejaban secar las figuras al sol y las adornaban con otros materiales como plumas de aves y papel brillante; era la parranda de los niños del barrio.

La profesora Catalina Beascoechea, conocida benefactora de muchachos talentosos del pueblo, gestionó sus estudios en La Habana y así se graduó en la Escuela Técnica Industrial y en la Academia de San Alejandro.

Después de graduado

Primero se dedicó a la propaganda comercial, en 1961 comenzó a trabajar para la Editorial Pueblo y Educación como ilustrador publicitario y más tarde como diseñador-ilustrador en la Editrorial pedagógica del Ministerio de Educación. Fue diseñador e ilustrador de más de 400 títulos cuyas tiradas totalizaron unos 50 millones de ejemplares, eran los libros de texto de todas las asignaturas de diferentes grados de la enseñanza general. También trabajó para las editoriales Gente Nueva, José Martí y Casa de las Américas. Mantuvo durante años la sección Fauna curiosa en el periódico Juventud Rebelde. Ilustraciones suyas aparecieron en las revistas Bohemia y Mar y Pesca.

Sus trabajos han sido vistos en exposiciones en los cinco continentes y sus pinturas se han expuesto en unas veinticinco exposiciones personales y más de cincuenta colectivas. Realmente Manuel del Toro no lleva la cuenta, sigue en su laboreo incesante con los pinceles, jubilado ya del trabajo editorial.

Todavía los caibarienenses recuerdan aquella exposición titulada Las aves que vio Colón, basada en un profundo estudio de la naturaleza y de los diarios de los conquistadores de América; formó parte de las actividades por el 500 aniversario del encuentro de las dos culturas.

Condecoraciones y premios

Su largo quehacer ha sido reconocido con medallas y distinciones, como son de la Alfabetización, Raúl Gómez García, 40 Aniversario de las FAR, laureado del Sindicato Nacional de cultura y por la Cultura Nacional. Sin embargo, del Toro insiste en que nada se compara con el hecho de que su obra esté en los libros escolares, según él es su mejor medalla.

Este caibarienense recibió de Eusebio Leal, historiador de la Ciudad de la Habana, la condición de Hijo Distinguido de La Habana Vieja.

Fuentes