Alcoholismo en mujeres embarazadas

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Alcoholismo en mujeres embarazadas
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Concepto:La Organización Mundial de la Salud (OMS), lo define como un trastorno conductual crónico manifestado por repetidas ingestas de alcohol respecto a las normas dietéticas y de la sociedad, que acaban interfiriendo con la salud o las funciones socioeconómicas del bebedor.

Alcoholismo en mujeres embarazadas. Impacto del alcoholismo en el embarazo. El consumo de sustancias en la vida y salud de las mujeres se relaciona con los roles, funciones y expectativas que les son asignados, entre ellas el cuidado y continuidad de la familia. Es por eso que la ingesta de alcohol durante el embarazo representa una problemática particular debido a que afecta la salud de la madre y la del producto.

Durante el embarazo la mujer alcohólica tiene un riesgo elevado de presentar importantes complicaciones obstétricas. Además, aumenta el riesgo de que los niños nazcan con bajo peso, diversas anomalías congénitas y afecta el desarrollo conductual y del aprendizaje.

El consumo de alcohol por parte de la madre es la causa principal de defectos congénitos evitables. Todo lo que una madre bebe le llega también al feto. El alcohol se descompone mucho más lentamente en el cuerpo inmaduro del feto que en el cuerpo de un adulto. Esto hace que los niveles de alcohol permanezcan elevados durante más tiempo en el cuerpo del bebé. Además, el riesgo de abortos espontáneos y de nacimientos de niños muertos aumenta considerablemente con el consumo de alcohol.

Cuando una mujer bebe alcohol durante el embarazo, se arriesga a dar a luz a un bebé que pagará las consecuencias -con deficiencias mentales y físicas- para el resto de su vida. Efectos nocivos del alcohol durante la embriogénesis.

Durante la gestación, concretamente durante el período embrionario (aproximadamente desde la 4ª semana al 4º mes) se forman los órganos. Para la formación de estos órganos es necesaria la glucosa y para crearse los metabolismo glucogénicos es necesaria la existencia de dos enzimas: - APOENZIMAS ( de procedencia endógena, las aporta el embrión) - COENZIMAS (de procedencia exógena, las aporta el exterior) Si una sustancia tóxica, como es el alcohol, es ingerida en el momento de la elaboración de esos metabolismos glucogénicos, es posible que afecte a una de esas dos enzimas no funcionando, no uniéndose, haciendo que el órgano que se está formando en ese momento se forme mal o que ni siguiera tenga lugar su formación.

Existen datos que indican que otro de los efectos adversos pueden ser debido a que el alcohol altera la transferencia placentaria de aminoácidos esenciales y de zinc, necesarios para la síntesis proteica, produciendo, por tanto, un retraso en el crecimiento intrauterino.

Como ya he señalado anteriormente, la desnutrición materna por el alcoholismo repercutirá mediante un bajo aporte calórico proteico al feto, por consiguiente se producirá la desnutrición intrauterina, irrecuperable en la vida postnatal.

Se piensa que las anomalías cráneo-faciales y cerebrales pueden ser consecuencia del ambiente alcohólico intrauterino, sin embargo, se ha señalado que dichas anomalías pueden estar en relación con que el óvulo materno se ha envejecido tanto por la desnutrición materna como por el mismo ambiente alcohólico en que el óvulo se ha encontrado durante tiempo. Así resulta lógico relacionar las anomalías cráneo-faciales y de otras zonas (miembros, corazón, hernias, etc) con las encontradas en otros síndromes de malformación congénica que nos pueden llevar a pensar por un lado en herencia autonómica recesiva como, por otro lado a que se produzcan debido al envejecimiento del óvulo o espermatozoide. (Ej. Síndrome de Facies Fetal, Discrania-pigo-falangia...)

Consecuencias para el feto

Los bebés en formación dentro del útero, expuestos al alcohol, generalmente nacen antes de la fecha prevista naturalmente. La circunferencia de la cabeza (perímetro cefálico), el peso y la estatura suelen ser inferiores (recién nacidos hipotróficos), lo que implica que todo o parte de su organismo no logra desarrollarse lo suficiente y llega a estar inmadura (recién nacidos prematuros, que tienen una mortalidad media del 6%) Estos bebés al nacer con esta alteración, producto del alcohol, no se reponen fácilmente. El peso y la estatura siempre se mantendrán entre los porcentajes o valores más bajos en comparación con niños que nacen sanos.

Los desórdenes o problemas del desarrollo del Sistema Nervioso Central, son muy variables:

  • Síndrome de abstinencia neonatal.
  • Mala regulación de los estados de vigilia y de sueño.
  • Irritabilidad, intranquilidad, llora sin motivo aparente, no quiere que le carguen, que le cojan.
  • Se mueve constantemente.
  • Llega a registrarse desde un pequeño retraso mental, a un retraso mental grave, distracción, falta de concentración, retraso al hablar dificultades de aprendizaje, incluyendo poca memoria, incapacidad para entender conceptos como el tiempo y el dinero, deficiente comprensión lingüística y escasa capacidad de resolución de problemas
  • problemas para oír o ver, problemas al relacionarse con otras personas y en controlar su comportamiento, como hiperactividad, incapacidad para concentrarse, retraimiento social, testarudez, impulsividad y ansiedad.

Las diferencias faciales incluyen: (distrofias craneo-faciales)

  • frente angosta o corta
  • abertura de los párpados muy chica ya que, a veces, se puede observar un pliegue de piel que cubre la parte o ángulo interno del ojo, con el párpado superior caído.
  • ojos demasiados pequeños (microftalmía)
  • labio superior delgado
  • mandíbula con falta de desarrollo (de perfil se ve hundida)
  • paladar hendido o separado en dos partes
  • orejas malformadas (más pequeñas e implantadas por debajo de lo normal)

Pueden existir otro tipo de alteraciones:

  • músculos rígidos o contraídos
  • endurecimiento de las articulaciones, sobre todo codos y rodillas.
  • defectos de la pared que divide el corazón, con problemas cardiacos.
  • Vértebras de la columna a nivel del cuello unidas unas con otras.
  • Lunares de sangre de color rojo oscuro.

Las diferentes anomalías pueden depender de:

  • la dosis de alcohol a que se expuso al feto.

- el momento del desarrollo fetal en el que se consume el alcohol (la etapa más crítica consta de los primeros tres meses de embarazo, ya que es cuando el bebé se forma)

  • Las diferencias individuales de cada feto para resistir los efectos del alcohol.

Únicamente se ha encontrado un cuadro clínico completo del Síndrome Alcohólico Fetal en los bebés de madres alcohólicas, no obstante, en los bebés de madres que consumen alcohol de manera esporádica se ha encontrado alguno de los síntomas que dependerá del momento en que se ha consumido el alcohol así los estudios indican que el estado del desarrollo fetal tiene un efecto importante en el tipo de anomalía que aparecerá.

  • durante el 1er trimestre se produce, más probablemente, dismorfologías o malformaciones.
  • durante el 2º trimestre pérdida del feto.
  • durante el 3er trimestre, disminución del crecimiento intrauterino. El consumo de alcohol durante este trimestre puede dar lugar a problemas en el comportamiento intelectual y desarrollo motor aún en ausencia de malformaciones en cráneo y cara.

Complicaciones en el feto

Las complicaciones que se presentan con mayor frecuencia son las siguientes:

  • Microftalmia (ojos demasiado pequeños)
  • Estrabismo (uno o los dos ojos se desvían)
  • Pecho “excavado” o sumido.
  • Lengua “subdesarrollada”.
  • Hirsutismo facial (la cara del bebé está cubierta de vello).
  • Defectos en el diafragma (músculo de la respiración).
  • Pliegues de la palma de la mano cortos lo cual implica una dificultad en la extensión de los dedos.
  • Se está estudiando una relación directa entre la ingesta de alcohol en útero y la presencia de cáncer.
  • Insuficiencia cardíaca (el corazón del bebé no funciona normalmente)
  • Bronconeumonías.
  • Desnutrición.

Prevención

Educación a la población, principalmente a las mujeres que tienen la posibilidad de quedar embarazadas para limitar el consumo de bebidas alcohólicas. Lo indicado es el no consumo de las mismas durante todo el embarazo. El retraso mental relacionado con el alcohol puede prevenirse.

Suspender la ingesta exagerada de alcohol después del primer trimestre no modifica el riesgo de malformaciones, aunque puede disminuir la presencia de problemas en las funciones del Sistema Nervioso Central.

El alcohol que se ingiere cuando las madres dan el pecho a su bebé, pasa a través de la leche materna, y cabe indicar que tienen un efecto ligero, pero degenerativo en el desarrollo motor (no en el mental) del recién nacido. El alcohol debe evitarse durante el embarazo y períodos de lactancia.

Tratamiento

Para los bebés que nacen con malformaciones mayores el tratamiento es quirúrgico. No obstante, los que nacen con malformaciones menores se recomienda dar estimulación temprana para lograr un mejor desarrollo motor, mediante la rehabilitación.

A los niños con problemas de aprendizaje, de concentración, al hablar, e incluso con retraso mental se recomienda la ayuda de especialistas en cada una de las materias por ejemplo: logopedas, psicólogos, maestros en educación especial. A aquellos niños que padezcan defectos físicos aparentes, así como a las madres alcohólicas, se les recomienda apoyo psicológico y emocional por parte de la familia. Su integración en la sociedad es fundamental.

Pronostico

Al abarcar tantas malformaciones o enfermedades es difícil concretar un pronóstico concreto. El pronóstico depende del tipo de malformación o complicación que se presente, de la rapidez con que se trate el problema, y de la resistencia que presente cada niño. El tiempo de vida probablemente está reducido y no se puede esperar que mejore la deficiencia mental ni la del crecimiento al cien por ciento.


Véase También

El Consumo de Alcohol

Fuentes

Periódico Trabajadores Digital [Periódico Granma Digital] Emisora Radio Rebelde Portal de Salud Pública

Bibliografía

Valdés Pe, Alonso Dn, Franco Na. Alcoholismo, un problema de salud de nuestro siglo. Rev Cubana Med Gen Integr 1992; 8(4):374-9. Sandoval Je, Laningan Me, Gutiérrez L. Conocimientos y actitudes de la población acerca del alcohol y el alcoholismo. Rev Cubana Med Gen Integr 2000;16(1):13-7