Andrés Castillo Mesa
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Andrés Castillo Mesa, “Castillito”: periodista y músico. Su sostenida labor periodística por más de cuarenta años en diversos órganos de prensa ha proporcionado una valiosa documentación sobre nuestra historia musical a través de numerosas entrevistas a figuras, tanto cubanas como extrajeras, a su paso por Cuba.
Síntesis biográfica
Entre el periodismo y la composición musical, transitó la obra de uno de nuestros más destacados creadores: Andrés Castillo Mesa "Castillito", nacido en Guanabacoa el 1ro de junio de 1923 y fallecido a los 79 años el 24 de julio de 2002.
Trayectoria profesional
Desde muy joven inicia su vida profesional vinculada a la radio como redactor de las menciones publicitarias de la firma Sabatés S.A. En el año 1952 recibe el título de Periodista en la Escuela de Periodismo “Manuel Márquez Stérling. Desde 1942 colaboró en la revista-cancionero Guión, con entrevistas a populares agrupaciones de la época. Luego trabajó en otras publicaciones siempre a cargo de los espacios dedicados a la música como la revista El país gráfico, Gente, Romance y Cinegráfico, así como los periódicos El Crisol y El Mundo.
Como colaborador del semanario Selecciones Musicales de México entrevistó a figuras de la talla de Nat King Cole, Lucho Gatica, Trío Los Panchos, Pedro Infante, Lola Flores, Carmen Sevilla. En la sección “Recuerdos Musicales”, considerado su trabajo más conocido y que escribiera por espacio de diez años para la revista Bohemia, se publicaron entrevistas a Miguel Matamoros, Sindo Garay, Benny Moré; esta última recordada por Castillo con especial emoción, titulada "Yo tengo un sitio en el monte", la cual realizó meses antes del fallecimiento de este excepcional músico.
En los años setenta del pasado siglo se encuentra al frente de la sección “Nuestros Artistas” del periódico local Guanabacoa. Aquí publicó numerosas biografías de importantes músicos nacidos o que desarrollaron su actividad musical en esta localidad, entre los cuales se encuentran: Ignacio Villa, Gerardo Delgado Guanche, Rita Montaner, Ernesto Lecuona, Adriano Rodríguez y Marcos Valcárcel.
En su importante labor como compositor abordó diferentes géneros de la música popular cubana en un catálogo de más de setenta obras, donde el bolero resultó el género de mayor presencia; varios de ellos grabados en voces de destacados intérpretes que los convirtieron en éxitos nacionales e internacionales.
Obra
Su primera obra grabada en 1960 por el sello discográfico Panart fue el bolero Invierno Negro, con arreglo del maestro Rafael Somavilla, en la voz del destacado bolerista Fernando Álvarez. Los boleros Tus ojos son mis ojos y Cuando estés muy sola, en la voz de José Tejedor junto a Luis Oviedo se encuentran entre los más difundidos. A estos títulos se suman Aquel anillo pequeño bolero popularizado en las voces del conocido dúo romántico Clara y Mario, grabado luego por Orlando Contreras.
A su amigo entrañable Juan Arrondo, quien guiara sus primeros pasos en la composición y compañero en la vida bohemia habanera, le dedicó el bolero Era un bardo enamorado, grabado por el dúo de Ana María y Luis Arango. Luego al instituirse el Concurso de Composición “Juan Arrondo" en Guanabacoa, participó y fue premiado en una de sus ediciones con el bolero Colegiala enamorada, interpretado por el Trío Guitarras Cubanas.
Otros títulos que lo consagran como uno de nuestros más prolíferos compositores son las guarachas Que te pasa María y El dengue y su tiquitiqui popularizadas por Roberto Faz, compuesto especialmente para los carnavales de 1966; el guaguancó La jeba de la jaba por Los Papines, parodiando a La muchacha de la valija; El infarto está de moda, por el conjunto Gloria Matancera. En los años setenta se difundieron el chachachá Me voy a Sagua por la orquesta de Neno González, Nuestras penas (mozanchá) grabado por la Orquesta Aragón, Repite y pon camarones, son montuno interpretado por Rumbavana con Raúl Planas, Clarita y su minifalda, guaracha que popularizó el Conjunto de Roberto Faz con Orlando Reyes, el calypso Y sigo, por Los Zafiros, entre otros.
Su carácter afable, sus conocimientos y experiencia, dispuesto a brindarlos desinteresadamente le permitieron estar siempre rodeado de amigos, fiel a su natal Guanabacoa, donde conoció y bebió de las excelencias musicales de esta localidad; por lo que traer a la memoria y el recuerdo de quienes lo conocieron y disfrutaron de su música, sus boleros y canciones así como sus interesantes escritos, resulta un acto de justicia a su obra.
Fuente
- Ada Oviedo Taylor. Informe. Centro de Documentación, Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana, Inédito.
- Datos suministrados por Andrés Castillo Mesa
