Anemia

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Anemia
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Concepto:La Anemia es una alteración causada por disminución del número de glóbulos rojos y disminución de la hemoglobina bajo los parámetros estándares.

Anemia . es una alteración causada por disminución del número de glóbulos rojos y disminución de la hemoglobina bajo los parámetros estándares. Anemia afección que afecta los glóbulos rojos. Los glóbulos rojos llevan el oxígeno desde los pulmones hacia el resto del cuerpo. La hemoglobina es la proteína presente en los glóbulos rojos que les permite llevar el oxígeno. El cuerpo necesita hierro para producir hemoglobina.

Personas con anemia

Las personas con anemia no tienen suficiente hemoglobina. La causa más común de la anemia es cuando el cuerpo no produce suficiente hemoglobina porque no tiene suficiente hierro. Esto se llama anemia por deficiencia de hierro. Otro tipo común de anemia es cuando el cuerpo no tiene suficiente cantidad de glóbulos rojos, pero los glóbulos rojos que tiene son de tamaño normal. Esto se llama anemia normocítica. Es un síndrome producido por múltiples causas de significado pronóstico y tratamiento diferentes. No es una enfermedad por si misma aunque con frecuencia es considerada como tal y medicada en forma automática, sin ningún estudio diagnóstico previo, con hierro y/o vitamina B12 y/o ácido fólico con lo cual lo único que se consigue es retrasar el hallazgo de su causa y su tratamiento adecuado. No es privativa de las personas con bajo nivel socioeconómico (desnutrición, parasitosis, etc.), también puede afectar personas con buen status. No afecta solamente a personas que se dedican a las tareas agropecuarias como en las parasitosis sino también puede hacerlo a gente que vive en la ciudad y con tareas puramente intelectuales. Ataca tanto a los niños, como los adolescentes, adultos y ancianos. La mayoría de las veces, (alrededor del 75% de los casos), con una buena historia clínica y algunos estudios básicos de laboratorio es posible encontrar el mecanismo principal y la causa del síndrome sin necesidad de recurrir al auxilio del hematólogo. El diagnóstico positivo de anemia se define por medio del hemograma al encontrar disminución del valor de la hemoglobina, hematocrito o de los hematíes. Normalmente estos valores son menores en la mujer que en el hombre y se obtienen con el promedio de más o de menos dos desviaciones standard de mediciones efectuadas en poblaciones sanas.

Hematocrito

  • Mujeres: 36-48%.
  • Hombres: 40-52%.

Hemoglobinemia

  • Mujeres: 12-16 g%.
  • Hombres: 13, 5-17, 7 g%.

Hematíes

  • Mujeres: 4-5 millones por mm3.
  • Hombres: 4, 5-6 millones por mm3.

Estos valores deben ser considerados en el contexto clínico del paciente ya que a veces los valores tomados aisladamente, aunque normales, pueden indicar una anemia (por ejemplo un paciente que acostumbra a tener un hematocrito de 49 a 50%, que baja bruscamente a 40%, puede padecer anemia aunque esta cifra sea normal). De la misma forma, un individuo que vive en zonas de grandes alturas es normalmente policitémico o el fumador crónico igualmente así que en ellos un hematocrito "normal" puede significar anemia. Debe considerarse que el hematocrito y la hemoglobinemia relacionan los hematíes con el plasma de modo que si por cualquier motivo aumenta el volumen plasmático (hemodilución) puede encontrarse un hematocrito bajo simulando anemia como sucede en un hipoproteinémico, insuficiente cardíaco, etc. Lo opuesto también puede suceder en un caso de deshidratación en que la contracción del volumen plasmático aumenta artificialmente el que ocupan los hematíes de modo que una anemia con deshidratación tiene posibilidades de tener valores hematimétricos normales.

Sintomatología general

La función primordial del eritrocito es la de transportar oxígeno a los tejidos por lo que la consecuencia de la anemia es la hipoxia tisular. Si esta alteración se desarrolla en forma paulatina permite el desarrollo de mecanismos que tratan de mantener la oxigenación de los tejidos. Uno de ellos es el aumento del volumen plasmático por pasaje de agua al compartimiento intravascular para que aumente la perfusión en la unidad de tiempo. Otro mecanismo es el aumento del difosfoglicerato eritrocitario que aumenta la capacidad de disociación de la oxihemoglobina liberando mayor cantidad de oxígeno en los tejidos que en condiciones normales. El mecanismo compensador más importante es la estimulación cardíaca que aumenta la fuerza de contracción ventricular y la frecuencia de la misma al tiempo que se produce una vasodilatación arteriolar a nivel visceral con vasoconstricción cutánea y muscular esquelética. Todo ello produce una hiperkinesia circulatoria que se manifiesta en la clínica (palpitaciones, taquicardia con pulso saltón, soplos cardíacos funcionales, aumento de la presión arterial diferencial, cefaleas pulsátiles) y que sumada a la disnea, mareos y palidez cutaneomucosa permiten el diagnóstico del síndrome que nos ocupa. También los pacientes suele aquejar astenia, cansancio fácil con tareas habituales, torpeza mental y si hay desnutrición, nefropatías o hepatopatías acompañantes, edema subcutáneo. En los ancianos, la suma de la hipoxemia por la anemia más la estenosis de las arterias por arteroesclerosis, puede desarrollar manifestaciones de isquemia como sucede en la cardiopatía coronaria (angor o infarto de miocardio). Lo mismo puede suceder en la demencia vascular o en la arteriopatía de los miembros inferiores en que el deterioro cognitivo o el dolor isquémico pueden ser desencadenados por la anemia. En las anemias de instalación aguda como las hemorrágicas, la hipovolemia brusca origina un cuadro de shock, diferente del síndrome hiperkinético de la anemia crónica.

Etiopatogenia de la anemia

Las anemias pueden producirse por tres mecanismos:

1) Pérdidas de sangre: anemias posthemorrágicas 2) Destrucción de eritrocíticos: anemias hemolíticas 3) Falla de la médula ósea en la producción de hematíes: anemias arregenerativas.

  • Posthemorrágicas
  • Anemias Hemolíticas
  • Arregenerativas

Las anemias del primer y segundo grupo suele ser regenerativas puesto que la médula ósea incrementa su actividad eritropoyética en un intento compensador de la hipoxia estimulada por la eritropoyetina. Las del tercer grupo, por definición no cursan con esta respuesta medular. Los conceptos de anemias regenerativas y arregenerativas son importantes porque se pueden mensurar y nos sirven para orientar el diagnóstico. Estos criterios, si bien útiles, no son absolutos por cuanto dos o más mecanismos pueden combinarse en determinados casos y originar cuadros mixtos.


Anemias post hemorrágicas

Las enfermedades locales sangrantes o las diátesis hemorrágicas ocasionan este tipo de anemia. Las hemorragias pueden ser agudas o crónicas.

  • Anemias Agudas

post hemorrágicas

  • Crónicas

Anemias hemolíticas

La destrucción anormal de hematíes puede deberse a dos mecanismos:

1) Defectos intrínsecos de los hematíes que los vuelve frágiles: Anemias hemolíticas intracorpusculares. 2) Hematíes normales que son destruidos por alteraciones extrínsecas a ellos: Anemias hemolíticas extracorpusculares. Intracorpusculares Anemias hemolíticas:

  • Extracorpusculares

1) Anemias intracorpusculares:

  • Los hematíes se vuelven frágiles por :

a) Falla en la función de la membrana celular: Anemia microesferocítica hereditaria de Chauffard Minkovski b) Defectos enzimáticos del citoplasma eritrocitario que alteran el metabolismo: favismo (anemia por la ingestión de habas), porfiria. c) Hemoglobinas anormales, inestables que no se mantienen en suspensión en el citoplasma celular, precipitan y llevan a la hemólisis: talasemia, anemia drepanocítica, hemoglobinuria paroxística. 2) Anemias extracorpusculares: Los hematíes son normales pero existe un medio ambiente a su alrededor que los destruye por: a) Agentes tóxicos: plomo, venenos de serpientes, toxinas bacterianas (clostridium perfringens), parásitos (plasmodios del paludismo). b) Factores mecánicos: irregularidades y anfractuosidades en el aparto circulatorio que traumatizan los eritrocitos y los rompen: anemia hemolítica microangiopática de algunas vasculitis y anemia hemolítica por prótesis cardíacas o vasculares. c) Anticuerpos que se unen a antígenos eritrocíticos y los destruyen: Autoanticuerpos como en la anemia hemolítica autoinmune primaria y anemia hemolítica secundaria a Lupus eritematoso sistémico. Anticuerpos inducidos por drogas que funcionan como haptenos de constituyentes del hematíe e inducen la producción de anticuerpos: antibióticos betalactámicos o macrólidos, alfa metil dopa, fenotiazinas, ranitidina, sulfas, isoniazida, etc. d) Secuestración de hematíes en el bazo: hiperesplenismo. Cualquier enfermedad que produzca esplenomegalia puede producir este tipo de anemia como por ejemplo las cirrosis hepáticas.

Anemias arregenerativas

La médula ósea es incapaz de producir hematíes por:

1) Desaparición de las células progenitoras de hematíes únicamente o de todas las líneas medulares (granulocitos y plaquetas) : Anemia aplástica por: tóxicos industriales (benceno), drogas (cloranfenicol, dipirona, AINES, citostáticos antineoplásicos) radiaciones ionizantes) y de causa desconocida (anemia aplástica primaria). 2) Invasión de la médula ósea por células extrañas que reemplazan las células progenitoras por: leucemias, metástasis de carcinomas, granulomas inflamatorios como TBC o sarcoidosis, tejido conectivo fibroso (mieloesclerosis). Esta son las anemias mieloptísicas. 3) Las células progenitoras proliferan pero no maduran ni se diferencian a hematíes y son destruidas en la misma médula ósea (eritropoyesis ineficaz). Estas son anemias mielodisplásicas. Este tipo de anemia se puede producir por drogas antineoplásicas o radiaciones. En circunstancias se instalan sin causa aparente, en forma primaria o idiopática. 4) Las células eritropoyéticas son normales pero no reciben material suficiente para producir eritrocitos. Son las anemias carenciales. Las carencias pueden ser de: a) Hierro: sideropénicas por falta aporte o con aporte normal pero incapacidad de utilizar el hierro como sucede en algunas enfermedades crónicas inflamatorias no infecciosas e infecciosas (artritis reumatoide, enfermedad inflamatoria intestinal, TBC, osteomielitis ) b) Vitamina B12 y/o ácido fólico: Anemias megaloblásticas. c) Hormonas: hipotiroidismo, hipopituitarismo, hiposuprarrenalismo, hipogonadismo masculino, eritropoyetina en la insuficiencia renal.

Causas de la anemia

Deficiencia de hierro

Por lo general, una mujer puede tener anemia porque su cuerpo no está recibiendo suficiente hierro. El hierro es un mineral que ayuda a producir glóbulos rojos. La deficiencia de hierro afecta a la mitad de todas las mujeres embarazadas. Durante el embarazo, la deficiencia de hierro se ha vinculado con un mayor riesgo de nacimiento prematuro y bajo peso al nacer.

Enfermedad

Algunas mujeres pueden tener una enfermedad que causa anemia. Las enfermedades como la anemia falciforme o talasemia afectan la calidad y el número de glóbulos rojos que el cuerpo produce. Si usted tiene una enfermedad que causa anemia, hable con su profesional de la salud acerca de cómo tratarla.

Señales de anemia

Puede tomar tiempo para que la anemia se desarrolle. Al comienzo, es posible que no tenga ninguna de las señales o pueden ser leves. Pero mientras empeora, usted puede tener estos síntomas:

  • Fatiga (muy común)
  • Debilidad (muy común)
  • Mareos
  • Dolor de cabeza
  • Entumecimiento o frialdad en sus manos y pies
  • Temperatura del cuerpo baja
  • Palidez
  • Ritmo cardíaco rápido o irregular
  • Falta de aliento
  • Dolor en el pecho
  • Irritabilidad
  • Tener dificultad en el trabajo o en la escuela

Dado que su corazón tiene que trabajar más fuerte para impulsar sangre oxigenada a través de su cuerpo, todas estas señales y síntomas pueden ocurrir.

Obtener suficiente hierro

Antes de quedar embarazada la mujer debe obtener aproximadamente 18 miligramos (mg) de hierro a diario. Durante el embarazo, la cantidad de hierro debe aumentar a 27 mg por día.

La mayoría de las mujeres embarazadas ingiere esta cantidad mediante una combinación de alimentos ricos en hierro y vitaminas prenatales que contienen hierro.


Algunas mujeres necesitan suplementos de hierro adicionales para prevenir la anemia por deficiencia de hierro.

Alimentos ricos en hierro

Usted puede ayudar a reducir su riesgo de la anemia comiendo alimentos que contienen hierro a través de su embarazo. Estos incluyen:

  • Carnes rojas
  • Mariscos (aprenda acerca de los mariscos y pescados que usted puede comer durante el embarazo)
  • Aves (carne oscura)
  • Cereales para el desayuno, pastas y panes enriquecidos
  • Avena enriquecida con hierro
  • Granos integrales
  • Espinacas, brócoli, col rizada y otras verduras de hojas verde
  • Papas horneadas con piel
  • Frijoles o habichuelas
  • Pasas, dátiles, ciruelas, higos, albaricoques
  • Nueces y semillas

Los alimentos que contienen vitamina C pueden aumentar la cantidad de hierro que su cuerpo absorbe. Por esta razón, es aconsejable que tome alimentos como jugo de naranja, tomates, fresas y toronja.

El café y el té, las yemas de los huevos, la leche, la fibra y la proteína de soja evitan la absorción de hierro. Trate de evitar estos alimentos al comer alimentos ricos en hierro.

Suplementos de hierro

Si usted tiene anemia, su profesional de la salud puede recetarle un suplemente de hierro. Algunos suplementos de hierro pueden producir acidez, estreñimiento o náuseas. Los siguientes consejos pueden ayudar a evitar o aliviar estos síntomas:

  • Tome las pastillas con comidas.
  • Empiece con dosis pequeñas y poco a poco llegue a la dosis completa. Por ejemplo, trate de tomar una pastilla por día por unos días, luego dos pastillas hasta que no sienta las molestias por esa cantidad. Aumente la cantidad de pastillas hasta que usted esté tomando la cantidad que su profesional de salud le recomendó.
  • Pruebe diferentes marcas para averiguar cuál le funciona mejor a usted. Asegúrese de hablar con su profesional de salud antes de realizar cualquier cambio.
  • Evite tomar las pastillas a la hora de dormir.
  • Combata el estreñimiento aumentando la cantidad de agua que bebe y comiendo más fibra. La fibra se encuentra en los alimentos de grano integral, cereales para el desayuno, frutas y verduras.

Enlaces externos

Bibliografía

1) Lindenbaum J. Estudio de las anemias. En: Wyngaarden J. B. Smith Ll H. Bennet J. C., ed. Cecil tratado de medicina interna. 19ºedición. Filadelfia: W. B. Saunders Company, 1992. vol 1: 955-965.

2) Hernández Nieto L Hernández García M T. Enfermedades del sistema eritrocitario Anemias. En: Farreras Valentí P Rozman C, ed. Medicina interna. 12º edición. Barcelona: Ediciones Doyma, 1992: 1617-1657.