Artrosis de la columna dorsolumbar
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En las vértebras se destruye el cartílago interfacetario articular, lo cual se continúa con la esclerosis del hueso subcondral. En los sitios donde la cápsula está expuesta a mayores tironeamientos, hay labiaciones hipertróficas de hueso, y osteofitos que pueden verse mediante los rayos x. La destrucción articular, los osteofitos, la destrucción del cartílago, las deformidades y la disminución del espacio entre las articulaciones laterales, hacen que se penetren entre sí las carillas articulares y disminuya el diámetro del foramen, lo cual puede ser perfectamente identificado en las vistas oblicuas. La disminución de foramen comprime los vasos y nervios, y produce el dolor y contraturas de los músculos paravertebrales.
Radiología
Mediante los rayos x se encuentran lesiones degenerativas de los cuerpos vertebrales y de las articulaciones interfacetarias, disminución del espacio intervertebral, penetración de la articulaciones superiores e inferiores, formación bilabiaciones y osteofitos, así como disminución del espacio del canal de salida de la raíz. Deben hacerse radiografías en vistas anteposteriores, lateral y oblicuas derecha e izquierda.
Tratamiento
El tratamiento de la artrosis dorsolumbar consiste en la administración de medicamentos y la aplicación de fisioterapia. Medicamentos. Son analgésicos, musculorrelajantes y antiinflamatorios. Los analgésicos se usan solo en las fases agudas de la enfermedad; los más utilizados son la aspirina, la dipirona y el ridol. Los musculorrelajantes se utilizan cuando existen contraturas y espasmos de los músculos paravertebrales; los más utilizados son el meprobamato, la mefenesina y el carisoprodol. Los antiinflamatorios se emplean en las fases de agudización de la enfermedad; pueden utilizarse butacifona, feldene y bencidamida. Fisioterapia. La fisioterapia debe ser el tratamiento de elección en la artrosis de la columna; de todos sus métodos el ejercicio físico resulta el mejor. Con la indicación de ejercicios y deportes desaparecen los síntomas de la enfermedad y hasta mejoran radiológicamente la estructura ósea y articulaciones. Los ejercicios pueden complementarse con ultraaltafrecuencia, corrientes dinámicas, masajes, hidroterapia, etcétera. En la artrosis de columna la cirugía tiene mucho menos indicaciones que en las artrosis de cadera y de rodilla, donde es primordial. Se indica solamente en los casos de foramen muy estrecho y en los que se presentan grandes osteofitos que lesionan raíces nerviosas. Las operaciones que se deben realizar son la ampliación quirúrgica del foramen, la extirpación de osteofitos y la artrodesis de segmentos dolorosos de la columna.
Fuentes
- Libro: Ortopedia Tomo II,Editorial Pueblo y Educación 1986, SNLC: CU 01.12372.6