Carlos Salinas de Gortari

Carlos Salinas de Gortari
Información sobre la plantilla
Carlos-salinas-de-gortari.jpg
Presidente de los Estados Unidos Mexicanos
Presidente de los Estados Unidos Mexicanos
1 de diciembre de 1988 - 30 de noviembre de 1994
PredecesorMiguel de la Madrid
SucesorErnesto Zedillo
Datos Personales
Nacimiento3 de abril de 1948
Ciudad de México, Bandera de los Estados Unidos Mexicanos México
Alma materUniversidad Nacional Autónoma de México,
Universidad de Harvard
OcupaciónPolítico, economista
Carlos Salinas de Gortari. Economista y político mexicano, presidente de dicha nación entre 1988 y 1994. Previamente había sido secretario de Programación y Presupuesto en el gobierno de Miguel de la Madrid. Posteriormente, fue postulado candidato por el Partido Revolucionario Institucional en 1987. Resultó elegido presidente de México el 6 de julio de 1988.

Su sexenio presidencial es considerado uno de los más polémicos de la historia de México en el siglo XX. Grandes cambios y controversias económico-sociales se vivieron durante su gobierno, entre ellos la crisis económica de 1994, privatización de empresas estatales, denuncias de corrupción, puesta en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) así como la restauración de las relaciones entre la Iglesia y el Estado.

Aún después de haberse retirado de la vida pública de su país al finalizar su sexenio, durante los últimos años ha tenido apariciones públicas por invitación de instituciones tanto mexicanas como de otros países.

Vida

Nació el día 3 de abril de 1948 en la Ciudad de México. Siendo sus padres Raúl Salinas Lozano, ex titular de la Secretaría de Industria y Comercio en el sexenio de Adolfo López Mateos (1958 - 1964) y Margarita de Gortari Carvajal, procedente de una familia de gran prestigio en el ámbito cultural.

Se licenció en Economía por la Universidad Nacional Autónoma de México en 1969 y completó su formación en Harvard con un doctorado en Economía Política y Gobierno.

Carrera política

Siguió la estela política de su padre y con 18 años ingresó en la filas del PRI, donde rápidamente sentó las bases de una meteórica carrera política. Comenzó a trabajar en la Secretaría de Hacienda en 1971 y, una década después, fue el responsable de diseñar la campaña electoral de Miguel de la Madrid, quien, tras lograr una abrumadora victoria en los comicios de 1982, le nombró director del Instituto de Estudios Políticos y Sociales y, después, secretario de Programación y Presupuestos.

En octubre de 1987, el PRI presentó su candidatura a la presidencia de la República para las elecciones de julio de 1988 y, tras una larga campaña electoral en la que encontró sobre todo la oposición de sindicatos y líderes del movimiento obrero que recelaban de su programa económico, logró la victoria y se proclamó presidente de los Estados Unidos de México para el sexenio 1988-1994. Durante la ceremonia de investidura, celebrada el 1 de diciembre, anunció los asuntos principales de su agenda política, entre ellos, la reducción de la deuda externa, el incremento de los niveles económicos del país y la lucha contra la corrupción y la violencia.

Presidente de México

Carlos Salinas junto a George H. W. Bush y Brian Mulroney durante la ceremonia inicial del TLC

Desde los primeros meses de su mandato, Salinas impulsó la cooperación comercial con los países vecinos. Con los del sur, Colombia y Venezuela, suscribió un acuerdo en 1989 para constituir a corto plazo una zona de libre comercio; también con los gobiernos centroamericanos estudió la viabilidad de establecer un área comercial libre en la zona y, finalmente, con los vecinos del norte, EE.UU y Canadá, anunció en 1991 el inicio de conversaciones con idéntico objetivo. El proceso negociador fraguó en diciembre de 1992 con la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) que entró en vigor el 1 de enero de 1994 y estableció un mercado común en los estados de América del Norte.

En política interior, su gestión estuvo marcada por el amplio programa de privatización de empresas públicas que reportó a las arcas estatales unos ingresos de 13.000 millones de dólares, la reforma educativa, la devaluación del peso para contener la inflación y la reducción de la deuda externa. Salinas también comprometió su mandato al ejercicio de una profunda reforma en su partido y, en el último año de su presidencia, tuvo que enfrentar una insurrección armada en el estado de Chiapas.

El 1 de enero de 1994, el movimiento indigenista y campesino autodenominado Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se levantó en armas contra el Gobierno de México en protesta por la política neoliberal del presidente Salinas y, durante varios días, la revuelta fue duramente reprimida por el Ejército. El clima de violencia y las críticas, internas y externas, que recibió el Ejecutivo por la contestación militar a las reivindicaciones campesinas colocaron al Gobierno en una crítica situación que el presidente trató de resolver con el anuncio del alto el fuego y la tramitación de una Ley de Amnistía para los involucrados en la revuelta.

Celebradas las elecciones presidenciales el 21 de agosto de 1994, Salinas cedió el bastón de mando de la República al nuevo candidato del PRI y vencedor de los comicios, Ernesto Zedillo. Veinte días después del relevo presidencial se desató en el país una crisis financiera que colocó a México al borde de la suspensión de pagos. Los portavoces del Gobierno entrante endosaron la responsabilidad al Gobierno saliente y las relaciones entre Salinas y su sustituto se deterioraron bruscamente.

Vida post presidencial

En marzo de 1995 Salinas abandonó el país sumido en una complicada crisis política y personal, atacado por todos los medios políticos que antes habían aplaudido sus decisiones ejecutivas. A la grave situación económica del país tras su mandato, se unió la acusación contra su hermano Raúl Salinas de Gortari como supuesto autor intelectual del asesinato, en septiembre de 1994, de quien entonces era su cuñado y secretario general del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Francisco Ruiz Massieu. El procesado fue condenado a 50 años de cárcel, aunque el ex presidente de México mantuvo la convicción de que el juicio fue una trampa política.

Tras abandonar México y permanecer varios años en Dublín, donde se dedicó a estudiar las circunstancias del desarrollo nacional y los efectos de la globalización, entre otros temas, regresó de su exilio en 1999 e hizo pública su retirada de la política.

Fuentes