Casa de Cultura Minas de Charco Redondo
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Casa de Cultura Minas de Charco Redondo. Institución cultural con un amplio movimiento de artistas aficionados donde se atienden diversos grupos etáreos, con el propósito de elevar el nivel cultural de la población en lo referente a bailes y música cubana tradicionales.
Reseña histórica
El sitio que hoy ocupa está institución perteneció al sindicato de los mineros, aquí se reunían todo los fines de semana los trabajadores que laboraban bajo Mina junto a sus familiares, compartían charlas, conferencias, conversatorios, intercambios de vivencias y experiencias del trabajo minero, además de otras actividades festivas por el cumplimiento de planes de producción y por algunas fechas conmemorativas.
Se realizaban bailables con una agrupación musical creada por los mismos trabajadores como muestra de afición para el disfrute de los presentes, en ocasiones agrupaciones de relevancia de otros territorios.
La parte frontal estaba dividida en dos áreas una cantina donde podían adquirir productos como refresco, confituras y conservas. A partir de una visita realizada por el comandante Ernesto Guevara en 1959, en la otra parte del lugar se comenzó a vender una mercancía destinada a los mineros (jabón, leche condensada, bacalao, entre otras).
Inauguración
El 24 de julio de 1986 el sitio es inaugurado como una casa comunal de cultura, objetivo que cumple en la actualidad. Cuenta con un total de 15 trabajadores: directora, 2 metodólogos, 1 programadora, 8 instructores, 4 trabajadores de servicio. Además, vinculados a la institución permanecen 20 promotores culturales que propician un amplio trabajo en toda la zona y elevan la cultura de sus pobladores. Este histórico lugar se ha convertido en patrimonio cultural.
Otros aspectos importantes
En 1959 fue visitada por el comandante en jefe Fidel Castro Ruz cuando regresaba con sus columnas de la Batalla de Guisa por interés propio de reunirse con los trabajadores mineros.
Por otra parte, cuando se recesaba en el trabajo minero el lugar se utilizaba para la realización de otras labores, como la trilla de café, durante un período de dos o tres años. Esto contribuía a los mineros pudieran sustentar a sus familiares.
Este sitio sirvío de refugio a cinco familias de la zona cuando al pasar el ciclón Inés sus viviendas fueron afectadas. Cuando se les da solución de vivienda a estas personas se convierte en una institución docente por la necesidad de aulas en las escuelas, luego pasa a un combinado de comercio por la falta de local para brindar atención a la población.
Fuente
- Archivo Histórico de la localidad
