Consejo Mundial de Iglesias

Consejo Mundial de Iglesias
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Institución con sede en Bandera de Suiza Suiza
CMI.JPG
Nombre:Consejo Mundial de Iglesias
Siglas o Acrónimo:CMI
Fundación:1948
Tipo de unidad:ONG
País:Bandera de Suiza Suiza
Dirección:Ginebra
Sitio web
https://www.oikoumene.org/es

Consejo Mundial de Iglesias. Por sus siglas CMI es la mayor y más representativa de las muchas expresiones organizadas del moderno Movimiento Ecuménico, cuyo objetivo es la unidad de los cristianos.

Historia

Las raíces históricas del Consejo Mundial de Iglesias se remontan a movimientos de estudiantes y laicos del siglo XIX, la conferencia mundial sobre misión de Edimburgo de 1910 y la encíclica del Sínodo (Ortodoxo) de Constantinopla de 1920 en la que se sugería una "comunidad de iglesias" semejante a la Liga de las Naciones. Dirigentes representantes de más de 100 iglesias votaron en 1937-38 la fundación de un Consejo Mundial de Iglesias, pero su inauguración se retrasó a causa del estallido de la segunda guerra mundial.

Las organizaciones preexistentes que han sido incorporadas en el Consejo a lo largo de decenios son, entre otras, las conferencias internacionales sobre "fe y constitución" (teología, sacramentos y preceptos) y sobre "vida y acción" (ministerios sociales, asuntos internacionales, servicios de socorro) y el Consejo Misionero Internacional, la alianza mundial de iglesias para la paz mundial, así como un consejo descendiente del movimiento de escuelas dominicales del siglo XIX.

En 1946 se emprendieron dos proyectos pioneros del CMI en cooperación con el Consejo Misionero Internacional: la Comisión de las Iglesias para Asuntos Internacionales (CIAI) y el Instituto Ecuménico de Bossey, Suiza. Actualmente el Instituto Ecuménico ofrece títulos de master y doctorado en estudios ecuménicos por medio de la facultad de teología de la Universidad de Ginebra.

Después de la guerra, el Consejo estimuló la creación de ministerios de desarrollo en las iglesias y continúa esta labor entre los refugiados, los emigrantes y los pobres. Durante la guerra fría, el CMI ofreció un foro para el diálogo entre el Este y el Oeste. En 1961, el Consejo Misionero Internacional se fusionó con el CMI, lo que contribuyó a ampliar el programa del Consejo en relación con la misión y evangelización mundiales. El Programa para Combatir el Racismo, aunque controvertido, ayudó a poner fin al apartheid en África del sur. Un documento memorable, Bautismo, Eucaristía y Ministerio (1982), permitió llegar a cierto consenso teológico entre las iglesias en la búsqueda de la plena unidad cristiana.

Cuando nació el CMI en la Primera Asamblea de 1948, había 147 iglesias miembros. Hoy son 347. Predominantemente protestantes y occidentales en los primeros años, el perfil y la identidad de las iglesias del CMI evolucionó durante la década de 1960 con la afluencia de muchas iglesias ortodoxas del Este y las nuevas iglesias autónomas de las antiguas regiones coloniales del Sur. El Concilio Vaticano Segundo mejoró mucho las relaciones entre el CMI y los católicos romanos.

El CMI celebra sus asambleas cada seis a ocho años. La Primera Asamblea tuvo lugar en Ámsterdam, Países Bajos, en 1948, y la X Asamblea se celebró en Busan, República de Corea, en 2013.

Miembros

El CMI agrupa a más de 340 iglesias, denominaciones y comunidades de iglesias en más de 100 países y territorios de todo el mundo que representan a unos 400 millones de cristianos, incluidas la mayoría de las iglesias ortodoxas, gran cantidad de denominaciones de tradiciones históricas de la Reforma Protestante como anglicanos, bautistas, luteranos, metodistas y reformados, así como muchas iglesias unidas e independientes. Si bien la mayoría de las iglesias fundadoras del CMI eran europeas y norteamericanas, hoy la mayor parte está en África, Asia, el Caribe, América Latina, Oriente Medio y el Pacífico.

Iglesias miembros

Las iglesias que constituyen el CMI viven en condiciones sociales, económicas, culturales y políticas muy diferentes. Tienen diversas formas de culto, de organización y de gobierno. Es esta diversidad la que hace que el CMI sea un foro extraordinario en el que todos se sienten estimulados. En el Consejo, las iglesias se interpelan recíprocamente con miras a un compromiso ecuménico más profundo y costoso. Esta responsabilidad mutua adopta diversas formas:

  • el reconocimiento de que ser miembro de la iglesia de Cristo va más allá de la iglesia de cada uno, y de que las otras iglesias poseen, por lo menos, “elementos de la iglesia verdadera”,
  • la ayuda mutua en casos de necesidad,
  • la abstención de acciones incompatibles con las relaciones fraternales,
  • el establecimiento de relaciones espirituales para aprender unas de otras.Pueden persistir tensiones históricas y diferencias y aparecer nuevas dificultades, pero el compromiso fundamental de erigir una comunidad entre las iglesias miembros del CMI permanece. Aunque la pertenencia al CMI no es en modo alguno la única forma de colaboración a nivel internacional entre las iglesias, evidencia su voluntad de hacer suyos de manera visible, duradera y organizada los objetivos del Movimiento Ecuménico.

Funciones

La Base del Consejo Mundial de Iglesias, ratificada por las iglesias miembros, describe al Consejo como una "comunidad de iglesias que confiesan al Señor Jesucristo como Dios y Salvador, según el testimonio de las Escrituras, y procuran responder juntas a su vocación común, para gloria del Dios único, Padre, Hijo y Espíritu Santo".

Constitucionalmente, el “objetivo principal” del Consejo Mundial de Iglesias es “ofrecer un espacio donde las iglesias puedan exhortarse unas a otras a alcanzar el objetivo de la unidad visible en una sola fe y una sola comunión eucarística".

La Constitución dice también que las iglesias por medio del Consejo:

  • favorecerán la búsqueda en la oración del perdón y la reconciliación en un espíritu de responsabilidad mutua
  • facilitarán el testimonio común en su labor de misión y evangelización expresarán su compromiso con la diaconía, poniéndose al servicio de las necesidades humanas, eliminando las barreras que separan a los seres humanos, promoviendo una sola familia humana en la justicia y la paz, y salvaguardando la integridad de la creación
  • se ayudarán mutuamente en sus relaciones con los creyentes de otras comunidades religiosas
  • promoverán la renovación y el crecimiento en la unidad, el culto, la misión y el servicio.

Las iglesias miembros del CMI (actualmente 342), ubicadas en más de un centenar de países, representan prácticamente todas las tradiciones cristianas. El CMI colabora con consejos cristianos nacionales y regionales, organizaciones internacionales de Comuniones Cristianas Mundiales (p.ej., la Federación Luterana Mundial, la Alianza Reformada Mundial, el Consejo Metodista Mundial) y con muchos órganos ecuménicos especializados en el plano internacional. Mediante su Comisión de las Iglesias para Asuntos Internacionales, el Consejo está acreditado ante las Naciones Unidas como organización no gubernamental.

Entre las tradiciones que no son miembros del CMI están la Iglesia Católica Romana, los Adventistas del Séptimo Día y el Ejército de Salvación. Sin embargo, estas tradiciones forman parte de algún consejo cristiano nacional y/o regional. En su calidad de organismo confesional mundial, el Ejército de Salvación mantiene relaciones fraternas con el CMI. El personal del CMI y del Vaticano colaboran de diversas formas. Además del Grupo Mixto de Trabajo CMI-Iglesia Católica Romana que se reúne anualmente, el Vaticano nombra algunos de los miembros de la Comisión de Fe y Constitución del CMI.

Unas 200 personas trabajan en la sede del CMI en Ginebra. La labor programática del CMI se divide en cuatro grupos básicos: Comunicación; Finanzas, Servicios y Administración; Temas de Estudio y Acción (Fe y Constitución; Misión y Evangelización; Justicia, Paz y Creación; Educación y Formación Ecuménica); Relaciones (Relaciones Ecuménicas; Relaciones regionales y Compartir Ecuménico; Relaciones y Diálogo Interreligiosos; Relaciones Internacionales). El Consejo cuenta con una biblioteca de más de 100.000 volúmenes ubicada en el Centro Ecuménico de Ginebra, y un Instituto Ecuménico situado en Bossey, en las proximidades de Ginebra.

Desde su Primera Asamblea en Amsterdam, en 1948, las asambleas del CMI, órganos legislativos supremos, se reunieron en Evanston (proximidades de Chicago, 1954), Nueva Delhi (1961), Uppsala (1968), Nairobi (1975), Vancouver (1983), Canberra (1991) y Harare (1998).

La Asamblea de Harare eligió los ocho presidentes del CMI, a saber: Dra. Agnes Abuom (Iglesia Anglicana, Kenya); Rev. Kathryn Bannister (Iglesia Metodista, Estados Unidos de América); Obispo Jabez Bryce (Iglesia Anglicana, Tonga); Su Eminencia Metropolitano Chrysostomos (Iglesia Ortodoxa, Turquía); Su Santidad Mar Ignatius Zak

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