Diferencia entre revisiones de «Días de fútbol»

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“Días de Fútbol”
Información sobre la plantilla
Comedia | Bandera de España España
Dias de futbol portada.jpg
“La película cuenta como un grupo de amigos asustados ante la idea de enfrentarse a la treintena, deciden recordar viejos tiempos formando un grupo de fútbol 7”
Nombre“Días de Fútbol”
Estreno2003
GuiónDavid Serrano
DirectorDavid Serrano
Producción GeneralMohamed Khashoggi
Dirección de FotografíaKiko de la Rica
RepartoErnesto Alterio, Alberto San Juan, Roberto Álamo, Natalia Verbeke, Fernando Tejero, Pilar Castro, Pepo Oliva, Pere Ponce, Guillermo Toledo, María Esteve y Lola Dueñas
PremiosPremio Goya: Actor revelación (Fernando Tejero)
ProductoraTelespan 2000 S.L. Estudios Picasso
PaisBandera de España España
“Días de Fútbol”; es una comedia española del año 2003, escrita y dirigida por David Serrano; protagonizada por Ernesto Alterio, Alberto San Juan, Natalia Verbeke, María Esteve, Fernando Tejero, Pere Ponce Nathalie Poza, Secun de la Rosa, Roberto Álamo y Luis Bermejo entre otros; con una duración de 118 minutos, no recomendada a menores de 7 años.

Sinopsis

Jorge (Alberto San Juan) se ve con 30 años y sin saber que quiere de la vida. Por ello decide pedirle matrimonio a su novia (Natalia Verbeke) a lo que ella le responde: "Me he enamorado de otro". La vida parece que se le echa encima al igual que el resto de sus amigos, entre los que destaca Antonio (Ernesto Alterio) que acaba de salir de la cárcel y busca curro como taxista psicólogo. Ante esta situación el resto de amigos dialoga para hacer un equipo de fútbol como cuando eran unos chavales y se divertían sin pensar en las responsabilidades de la vida.

Reparto

Notas de producción

Cuando no sabes de qué hablar con tu pareja sólo hay una cosa que puedes hacer: pedirle que se case contigo. A partir de aquí hay dos opciones: que te diga que sí o que te diga que no. Si la respuesta es afirmativa surgirán de repente numerosos temas de conversación: dónde casarse, a quién invitar, la vivienda, ¿compra o alquiler?, el tema de los niños; en fin nuevos problemas sobre los que discutir. La segunda opción es que te digan que no; entonces sí que tendremos nuevos temas: ¿es que ya no me quieres?, ¿estás enamorada de otro?, ¿por qué esto para conmigo? Y consecuentemente acabas sumido en la depresión más profunda, cuando lo único que querías era sacar un tema de conversación para él domingo por la noche.

Los personajes de “Días de Fútbol” se debaten en estas fronterizas lides del sí quiero y del no quiero. Mientras Jorge nuestro protagonista está hundido en un pozo negro porque su novia, enamorada de otro, no lo acepta en matrimonio, Antonio decide coger las riendas de su vida y tras un periodo a la sombra, y no de un pino precisamente, se pone a trabajar y contrae matrimonio. Cuando llega uno de estos momentos cruciales en la vida, hay que tomar grandes decisiones que marquen la diferencia entre la edad adulta y la adolescencia, y adoptar medidas emocionalmente maduras para solucionar los conflictos conyugales. Por eso los protagonistas de nuestra película, optan por montar un equipo de fútbol como cuando eran chavales, lo que les coloca en una nueva categoría de seres que se podría definir como incapaces vitales. Ante el reto de escribir y dirigir una película cuyos personajes optan por la incapacidad vital como modus operandi, necesitaba unos referentes reales que me hicieran creer que esos personajes pudieran existir; la labor de documentación no fue muy exhaustiva: mis amigos son así. Sin entrar en detalles, el que no tiene problemas con el trabajo, los tiene con su pareja, o con las mujeres en general, y las soluciones que toman son muchas veces aún más escalofriantes que montar un equipo de fútbol o robar un cerdo. Pero insisto, sin entrar en detalles porque hoy por hoy, siguen siendo mis amigos (muchos de ellos parte del excelente equipo técnico y, sobre todo, artístico de la película). Amigos como los que aparecen en Días de fútbol, cuya mayor muestra de afecto es preguntarse ¿dónde has aparcado el coche?, pero que sin embargo darían su brazo derecho los unos por los otros. Amigos capaces de infiltrarse en un criadero de cerdos en plena madrugada para colaborar en la carrera de actor de uno de ellos, capaces de sudar la gota gorda jugando al fútbol en pleno verano, sin ninguna gana, y mucho menos talento, con la creencia de que así van a animar al amigo recién abandonado por su novia. En fin, amigos de verdad, de los que merece la pena tener y siendo sinceros, difíciles de soportar.

Para hacer una película sobre la amistad creí necesario rodearme de mis amigos, por esto, para mí, el mayor triunfo en esta película reside en que los que empezamos siendo amigos al principio de la producción sigamos manteniendo la amistad ahora que se va a estrenar la película. Y que aquellos que nos hemos conocido durante el rodaje podamos preguntarnos con cariño dónde hemos aparcado el coche. (Declaraciones del director David Serrano)

Escenas de la película

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Premios

Premio Goya: Mejor actor revelación (Fernando Tejero)

Nominaciones:

Críticas

El guionista David Serrano debuta tras la cámara con una historia propia que explota los mismos recursos que ya le dieron buenos resultados de taquilla con la exitosa El otro lado de la cama. Que la historia está cortada por el mismo patrón, se debe, no tanto al argumento, sino a la variada galería de personajes que presenta, todos ellos algo desorientados, con itinerarios personales y sentimentales que no acaban de llegar a un desenlace feliz. El centro de atención será Jorge, quien tras pedir a su novia Violeta que se case con él y recibir calabazas, entrará en barrena. Con el fin de hacerle olvidar tan mal trago, Antonio rehabilitado en la cárcel tras seguir una terapia para controlar su mal genio, rayano a veces en la violencia psicópata propone al grupo de amigos formar un equipo de fútbol 7 y volver así a recordar los tiempos en que todos ellos no eran barrigudos y calvos, sino jóvenes llenos de vida y esperanzas. Desde ese momento, todos tendrán un nuevo objetivo por el que luchar.

Por encima de otros ingredientes, en esta comedia sobre la crisis de los treinta y tantos destaca el soberbio trabajo de Ernesto Alterio. Está enormemente divertido cuando se ve invadido por sus accesos de furia. Paradójicamente es el personaje que tiene las ideas más claras acerca de su futuro y el único capaz de aunar a todos sus patéticos compañeros: el tímido policía, el actor de baja estofa, el vago estudiante de Derecho, el triste marido preocupado por la alopecia. A ellos se unirá Serafín (gran papel de un sorprendente Fernando Tejero), un mafiosillo que aporta originalidad al conjunto. El guion coral, muy a la española, se apoya a menudo en el chiste verde fácil, a veces de grosor considerable, y en la frescura de los diálogos, que tienen la acertada naturalidad de la vida de un barrio de clase baja, donde el chándal es uniforme obligatorio. Quizá se eche en falta mayor protagonismo femenino, pero ya se sabe que el fútbol es cosa de hombres...

La palma de esta divertida cinta se la llevan sin duda los personajes de Serafín y Antonio, encarnados con maestría por Fernando Tejero (ganador del Goya) y Ernesto Alterio, respectivamente. Mientras que Serafín hace de autoritario “padrino”, Antonio sufre uno ataques de ira tan incontrolables como las carcajadas que provoca en el espectador.(Critica decine21.com)

Fuentes