Emboscada de Levisa
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Emboscada de Levisa. El 10 de octubre de 1958 es una fecha gloriosa para el Ejército Rebelde. Una emboscada con un reducido número de miembros logra detener el avance de una amplia tropa del ejército de Batista bajo el mando de Sosa Blanco, en el entronque de Levisa, Nicaro.
Sumario
Propósito
El propio día Melquíades González se aproximó a Nicaro, proveniente del campamento de Los Mulos, lo acompañaban como chofer el combatiente Hugo Consuegra y Hugo Fauvel. Su propósito era contactar con los movimientos clandestinos de Nicaro y obtener información sobre los pasos del ejército de la tiranía.
Vista del enemigo
Cuando se encontraban en las proximidades de la curva de Levisa, pudieron ver que una columna enemiga que venía de Mayarí se aproximaba. Melquíades Ordenó al combatiente Fauvel que se trasladara hacia el Jovo, donde estaba Pancho González para que viniera con refuerzos. Mientras tanto indicó a los vecinos del lugar que lo abandonaran porque allí podía haber un combate.
Las piedras
Aprovechando dos grades piedras que había cerca, dentro de una pequeña plantación de caña, Melquíades se colocó detrás de una de ellas y ubicó a Hugo Consuegra en la otra. Cuando estaban emboscados, una columna enemiga se detuvo cerca de una alcantarilla, de un camión se bajaron un grupo de civiles que los guardias se dispusieron a matar.
Asesinato
Melquíades, que se dio cuenta de la indigna maniobra, abrió fuego contra la columna enemiga al mando del repudiado capitán Sosa Blanco. No obstante, no se pudo impedir que asesinaran a nueve civiles, entre ellos un hermano del sargento Ernesto Darias Pérez
Acción
El enemigo respondió el fuego de Melquíades y emplazó una ametralladora 50, creyendo que los rebeldes eran muchos por el volumen del fuego que hacia el teniente con su Sancristobal. El arma de Consuegra pronto quedó inservible por lo que Melquíades se mantuvo combatiendo solo. Se movía de una piedra a otra y disparaba el fusil automático desde distintas posiciones. Al propio tiempo daba ordenes a grupos imaginarios y en voz alta gritaba: “¡Pancho ataca por el flanco derecho; Darías atácalos por la retaguardia!”. El enemigo seguía disparando con todas sus armas y llegó a ubicar morteros, hasta que un teniente de la vanguardia se dio cuenta de que eran pocos rebeldes y decidió avanzar para cercarlos. Melquiades dejó que avanzaran y cuando estaban a unos 300 metros hizo una descarga cerrada hiriendo gravemente al teniente enemigo y a tres más de la tropa que este comandaba.
Resultado
Resultado del combate: la columna de guardias se retiró de vuelta a Mayarí llevándose sus bajas, cinco heridos, un oficial y dos soldados muertos. Los rebeldes procedieron a recoger los civiles muertos y heridos, a estos últimos los enviaron en la camioneta del norteamericano presidente de la compañía de níquel de la Nicaro, que en aquel momento pasaba por allí.
Final de la maniobra
Cuando la acción había terminado llegó Pancho, que no pudo estar a tiempo por el mal estado de los caminos. A propuesta del jefe de la columna Belarmino Castilla Mas, el teniente Melquíades González fue condecorado por Raúl Castro Ruz, Jefe del Segundo Frente Oriental con la Orden Legión de Honor Frank País, máximo galardón que se poseía.
Fuentes
- Cuba: Comisión de Historia de la Columna 19 ¨ José Tey ¨. Columna 19 ¨ José Tey ¨. Segundo Frente Oriental ¨ Frank País ¨. La Habana: Editorial Ciencias Sociales, 1982. Historia
