Horacio Cobiella Domínguez

Horacio Cobiella Domínguez
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Mártires de Pino Tres
Nacimiento13 de noviembre de 1924
colonia Castillo, del central Préston
Fallecimiento27 de septiembre de 1958
Santa Cruz del Sur,La Caobita
NacionalidadBandera de Cuba Cuba
CiudadaníaCubana
EducaciónEscuela Profesional de Comercio de Camagüey

Horacio Cobiella Domínguez Joven revolucionario cubano que consagró su vida a la lucha por la patria.

Síntesis biográfica

Nació el 13 de noviembre de 1924, pero la mayor parte de su vida transcurrió en Macareño, municipio de Santa Cruz del Sur. Era un hombre delgado, de unos treinta y tres años de edad; pelo rubio y ondeado; cara perfilada. Usaba espejuelos de aumento. Estudió en una escuela privada y luego curso la Escuela Profesional de Comercio de Camagüey, donde se relaciona con los luchadores de la clandestinidad Cándido González Morales, Tato Rodríguez Vedo, Noel Fernández y Rodolfo Ramírez Esquivel.

Trabajó durante muchos años en la vidriera del Bar correo de Camagüey. Ese lugar al que llamaban La Acera del Bar correo, servía de punto de contacto a la juventud camagüeyana. Estudiantes y trabajadores intercambiaban ideas, mensajes, propagandas y mantenían una lucha frontal contra la tiranía.

Allí conoció Horacio a la mayoría de los que luego fueron sus compañeros. Estudiaba en la Escuela de Comercio de la capital agramontina, cantera inagotable de jóvenes insurrectos que llevaban al plantel a un puesto de vanguardia entre centros estudiantiles revolucionarios.

La Escuela Revolucionaria

La Escuela de Comercio entregó a la Revolución a sus mejores alumnos entre ellos “Cándido González Morales”, “Tato Rodríguez Vedo”, “Rodolfo Ramírez Esquivel” y el propio Cobiella, hoy Mártires de la Patria.

Esa sería la escuela revolucionaria de la Caobita. El joven de constitución física delgada, no era precisamente una persona saludable no obstante, sabía imponerse y correr los mismos riesgos que los demás. Algunos temían que su participación en la guerra de montaña lo afectara seriamente y tenían sus dudas de que soportara las serias dificultades de la guerrilla en la Sierra.

Caídos en la emboscada de Pino Tres

Rafael Almenare ,Cedeño,Braudilio Álvarez Zorzán, Rafael Álvarez Zorzán,Genaro Andrés Brito Vargas,José María Cardoso, Jacobo Cruz Espinosa, José Fernández Peña, José M. Gómez Estrada, Algérico Lara Correa, Jesús Loti Osorio, Jorge Mendoza Alonso, Adolfo Núñez León, José Oquendo Díaz,Ricardo Pérez Alemán,Miguel Peña Utra, Remigio Riverón Sánchez, Gerardo Rodríguez Árias,Hermes Rondón Llanes,Emilio Urra Mayedo,Rafael Urra Peña,Fernando Figueredo Castellano y Horacio Cobiella Domínguez, estos dos úlimos fueron asesinados después del combate.

Heridos asesinados en La Caobita

Pedro Ballester Noriega, Ramón Bazán Rivero, Ramón Domínguez de la Peña, Felino Figueredo Jiménez, Gelacio Gutiérrez García, Rubén Martín Agún, Alfredo Martínez González, Rafael Martín Gómez, Luis Palomino Aldana, Raúl Peña González, Marciano Ross Castro.

Su Rebeldía

Se opuso a esas opiniones y marcha a las gloriosas lomas orientales el 29 de julio de 1958 y viste el uniforme verde olivo del Ejército Rebelde. Como otros jóvenes camagüeyanos forma parte de la columna “Cándido González”, para hacer la guerra activa en las llanuras camagüeyanas. La columna “Cándido González” va dejando grupos en zonas de la provincia hasta llegar al lugar conocido por “Pino Tres”, donde son emboscados por el ejército Batistiano que le hace 22 bajas debido a la traición de un delator.


En ese combate del 27 de septiembre de 1958 resulta herido Horacio el que por su estado de indefensión es apresado por las huestas enemigas al mando del conocido esbirro Suárez Suquet, siendo trasladado a una enfermería en la zona del Central Macareño donde permanece algunas horas junto a otros 10 combatientes con heridas en sus cuerpos.

Muerte

Es uno de los actos más repugnantes que marca la negra historia del ejército tiránico, se les notifican que van a ser trasladado a un hospital en Santa Cruz del Sur, cuando marchan por la carretera son acribillados a balazos en el lugar conocidos por “La Caobita” hasta ultimarlo sin la más mínima oportunidad de defensa.

Así tronchó la vida aquel revolucionario que jamás titubeó ante una acción si esta podía contribuir al derrocamiento de un sistema de gobierno contrario a los intereses del pueblo, era del 27 de septiembre de 1958.

Fuentes