José Surí y Águila

José Surí y Águila
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Poeta, médico y farmacéutico Villaclareño
Nacimiento26 de octubre de 1696
Santa ClaraBandera de Cuba Cuba
FallecimientoSanta ClaraBandera de Cuba Cuba
NacionalidadCubana

José Surí y Águila. Santaclareño, primer poeta cubano; además, médico y farmacéutico. Fue nombrado cirujano principal del Hospital de la Caridad de la villa de Santa Clara. Como poeta autodidacta vale destacar la armonía, la belleza, la imaginación creadora y el pensamiento ingenioso.

Síntesis Biográfica

José Surí y Águila nació el 26 de octubre de 1696. En plena niñez perdió a sus padres, motivo por lo que tuvo que acudir a los favores de un hacendado que lo empleó en su finca como trabajador agrícola. Allí, atraído por al ambiente tranquilo y romántico del campo, el joven poeta despertó su genio y entonó sus primeros cantares alusivos a la labor que realizaba.

En la segunda década del Siglo XVII, gracias a los conocimientos que había adquirido empíricamente, Surí se desempeñaba como médico y farmacéutico en la villa. Pero un buen día llegó desde La Habana alguien nombrado oficialmente para ejercer esa función. Y ahí mismo surgió el conflicto.

Resultó que las personas acostumbradas a tratarse con el médico y también poeta, al que admiraban por su amabilidad, no asistían a la consulta del otro facultativo, quien al verse en tan difícil trance, de inmediato lo acusó de intrusismo profesional ante el Protomedicato.

El juicio se celebró en La Habana. Y para asombro de todos, él se defendió improvisando versos sobre el arte de curar. Dejó, literalmente, aturdido al Tribunal, que le otorgó el título de médico y farmacéutico. Seis años después fue nombrado cirujano principal del Hospital de la Caridad de la villa y se le responsabilizó para evitar el intrusismo profesional.

En cuanto a su literatura quedan pocas muestras, pero vale destacar la armonía, la belleza, la imaginación creadora y el pensamiento ingenioso. Esto, añadido a una época en que apenas se cultivaba el género lírico, adquiere mayor relevancia tratándose de un muchacho autodidacto.

Cuenta la historiadora Martha Anido Gómez-Lubián que Surí gozaba también de sobrados dotes para la improvisación y poseía excelente memoria, de modo que no fueron pocas las festividades religiosas a las que asistió para entonar sus cánticos frente a las imágenes adoradas.

El pionero de los poetas

Más que el pionero de los poetas, por extensión pudiera considerarse el primer cubano que escribió una obra literaria. Porque bien sabemos que ese mérito corresponde a Espejo de paciencia, del español Silvestre de Balboa.

Poesía de Surí

A Udeliquia (fragmentos) Udeliquia, siempre hermosa, a quien por deidad veneran sobre alcatifas doradas en esa mansión febea del regio coro de Clío las nuevas musas supremas. Y a que a ese obsequio de tu culto al teatro alguna letra me has mandado que repita quiero, si no te molesta propalarte una batalla que en los campos de Amaltea previno al vendado Dios al muro de mis potencias.

El poeta en el olvido

El tiempo ha sumido en un olvido tan desgarrador que no existe en la ciudad de Santa Clara, de modo tangible, nada que lo recuerde.

El gran escritor José Lezama Lima, en su Antología de la poesía cubana, lo sitúa como el primer poeta cubano, y el ensayista e investigador literario Enrique Saínz, en su libro La Literatura cubana en el Siglo XVIII, también le confiere igual mérito, mientras el historiador y periodista villaclareño Manuel García Garófalo Mesa lo consignó como el poeta más antiguo nacido en Cuba.

Sobre su poesía dijo que escribió Versos Sonoros, los que hoy pueden ser modelos de metro y dicción. Sin estudio, se hizo médico y farmacéutico, y poseyó en raro consorcio la ciencia y la poesía: el remedio del organismo y el bálsamo del espíritu.

Fuentes