Meyer Lansky

Meyer Lansky
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Mafioso estadounidense que cometió delitos en Cuba antes del Triunfo de la Revolución Cubana
NombreMajer Suchowliński
Nacimiento4 de julio de 1902
Grodno, parte del Imperio ruso, actual Bielorrusia
Fallecimiento15 de enero de 1983
Miami Beach, Florida, Estados Unidos
Causa de la muerteCáncer de pulmón
NacionalidadEstadounidense
OcupaciónGángster de la mafia
Conocido porMeyer Lansky

Meyer Lansky. Fue un mafioso estadounidense. Junto a Charles “Lucky” Luciano fue uno de los principales referentes del crimen organizado judeo-norteamericano durante el siglo XX. Creador de la mayor parte del sistema financiero de lavado de dinero de la Mafia.

Síntesis biográfica

Nace en Grodno, parte del Imperio ruso, actual Bielorrusia, el 4 de julio de 1902, con el nombre de Majer Suchowliński. En 1911 su familia se mudó a Estados Unidos asentándose en el Lower East Side de Manhattan, Nueva York. En la escuela conoció a Lucky Luciano que trató de dominarlo pero al verse enfrentado por él, admiró su coraje y se convirtieron en grandes amigos. Otro gran amigo de Meyer era Bugsy Siegel. Los dos formaron uno de los más violentos clanes durante la época de la “Prohibición” Lansky; era hermano de Jacob "Jake" Lansky, quien en 1959 era el administrador del Hotel Nacional de La Habana, Cuba. Muere en Miami Beach, Florida, Estados Unidos el 15 de enero de 1983.

Historial delictivo

Hacia 1936 había establecido redes de juego en Florida, Nueva Orleáns y Cuba. Junto a Bugsy Siegel convenció a los jefes de las familias sicilianas para que invirtieran en la incipiente ciudad del juego de Las Vegas , principalmente en el hotel casino Flamingo. Durante la década de 1940, el socio de Lansky, Bugsy Siegel, persuadió a los jefes de la Mafia en invertir en el nuevo Hotel en Las Vegas, Flamingo. Después de costosos retrasos, el Flamingo Hotel todavía no estaba abierto para negocios. Para discutir el problema Flamingo la Mafia citó a una conferencia secreta en La Habana, Cuba en 1946. Mientras los otros jefes pedían asesinar a Siegel, Lansky pedía para su amigo una segunda oportunidad. A pesar de esta oportunidad, Siegel continuó derrochando dinero de la mafia en el Flamingo Hotel.

Una segunda reunión de la familia fue llamada. Si embargo, a pesar de las advertencias el Casino tenía bajas ganancias. Lansky una vez más, con el apoyo de Luciano, convenció a la familia de darle más tiempo a Siegel. El Flamingo continuaba perdiendo dinero. En una tercera reunión, la familia decidió que Siegel estaba acabado. Había humillado a los jefes y nos les había dado oportunidad. Es ampliamente aceptado que el mismo Lansky debió dar el OK final a la eliminación de Siegel debido a su relación con la familia Siegel. El 20 de junio de 1947, Siegel fue tiroteado y asesinado en Beverly Hills, California. Veinte minutos después del tiroteo a Siegel , los asociados de Lansky, incluyendo a Gus Greenbaum y Moe Sedway, entraron al Flamingo Hotel asumiendo el control de la propiedad.

De acuerdo al Federal Bureau of Investigation, Lansky retuvo una gran cantidad de intereses comerciales en el Flamingo durante los siguientes 20 años Lansky dijo en muchas entrevistas que si le hubiese hecho caso, Ben Siegel podría estar vivo. Esto marcó también una transferencia de poder en Las Vegas desde las familias criminales de New York a las de Chicago. Sin embargo, y a pesar de que su poder estaba bastante mas constreñido que en años anteriores, Lansky asesoró y ayudó al Jefe mafioso de Chicago Tony Accardo a establecer este negocio.

Inversiones en Cuba

Después de la Segunda Guerra Mundial, "Lucky" es liberado de la prisión con la condición de regresar a Sicilia. Sin embargo, Luciano secretamente se trasladó a Cuba, donde reasumió el control de las operaciones de la Mafia norteamericana. Luciano también administraba una serie de casinos en Cuba con la ayuda del Dictador cubano General Fulgencio Batista, a pesar de que el Gobierno de Estados Unidos presionaba débilmente para que Batista deportara a Luciano. Con el auge del turismo a Cuba, Meyer también comienza a invertir fuertemente en la isla. En 1957, Meyer y Fulgencio Batista construyen el Hotel Riviera, el mayor sueño de Lansky. No obstante, con la Revolución Cubana en 1959, el gobierno expropia todos los casinos y hoteles, forzando a los mafiosos a movilizar sus inversiones a otro lado.

El amigo más íntimo de Batista en la Mafia de Estados Unidos era Lansky. Ellos formaron una relación duradera por tres décadas. Durante su estadía en el Waldorf-Astoria en New York a finales de la década de 1940, tenían una relación simbiótica, y Batista ofrecía a Lansky y la Mafia el control de los Hipódromos y de los Casinos. Batista podría abrir a La Habana a las grandes apuestas, y su gobierno podría ganar, dólar] por dólar, todas las inversiones hoteleras sobre US$ 1 millón, las cuales podrían incluír licencia de casino. Lansky, podría, por supuesto, estar en el centro de las operaciones de apuestas de Cuba. Llamó inmediatamente a sus asociados a una conferencia cumbre del Hampa en La Habana.

Conferencia de La Habana

La Conferencia de La Habana fue efectuada el 22 de diciembre de 1946 en el Hotel Nacional. Esta era la primera reunión a gran escala de la Mafia americana desde la reunión de Chicago en 1932. Estaban presentes figuras como Joe Adonis y Albert "The Mad Hatter" Anastasia de New York, Frank Costello, Joseph "Joe Bananas" Bonanno, Vito Genovese, Moe Dalitz, Thomas Luchese, Santo Trafficante Jr. de Tampa, Carlos "The Little Man" Marcello de New Orleans, y Stefano Magaddino, el sobrino de Joe Bonanno de Buffalo. De Chicago estaban Anthony Accardo, los hermanos Fischetti, "Trigger-Happy" Charlie, Rocco, y, representando a la Mafia judía, Lansky y “Dandy” Phil Kastel de Florida.

El primero en arribar fue Salvatore Lucky Luciano, quien habia sido deportado a Italia, y tuvo que viajar a La Habana con un pasaporte falso. Lansky estaba encantado con la visión de una Habana nueva, perfecta para aquellos que querían invertir la adecuada cantidad de dinero. Una ciudad que sería "Las Vegas latina," y que podría ser el hogar perfecto para todo aquel que su trabajo fuera el narcotráfico, la prostitución, negociaciones laborales ilegales y extorsión. De acuerdo a la evidencia de Luciano, sería elegido como el rey de la Mafia, para regir sus negocios desde Cuba hasta que le fuera permitido regresar a Estados Unidos. La entretención fue dada, entre otros, por Frank Sinatra quien voló a Cuba con sus amigos, los hermanos Fischetti.

Delitos en Cuba

En 1952, Lansky había ofrecido al Presidente Carlos Prío Socarrás un cohecho de U.S. $250,000 para permitir que Batista pudiera regresar al poder. Una vez que Batista se hizo del control del poder, el negocio de las apuestas, prostitución y narcotráfico floreció. El Dictador contactó a Lansky y le ofreció un salario anual de U.S. $25,000 como Ministro no oficial de apuestas. Por 1955, Batista había cambiado las leyes de apuestas además de garantizar la licencia de apuestas a todo el que invirtiera US$1 millón en un hotel o U.S. $200,000 en un Club Nocturno nuevo. Al contrario de las licencia de juegos en Las Vegas, nadie averiguaba de dónde procedía el dinero. Mientras más largo el periodo de inversión, se requirió un período de al menos 10 años libres de impuestos.

El gobierno podría dar U.S. $25,000 para licecias mas un porcentaje de las ganancias en cada casino. Las 10.000 máquinas tragamonedas de Cuba, incluso las que dispensaban pequeñas cantidades de monedas, estaban en la provincia del hermano político de Batista, Roberto Fernández y Miranda, General del Ejército y director de deportes, Fernández también lucraba con los parquímetros de La Habana. Las materias importadas para los hoteles aumentaron y los contratistas cubanos gastaban bastante más de lo que debían. Se rumoraba que detrás de los U.S. $250,000 necesarios para conseguir una licencia, era necesario bastante más de soborno para conseguirla. Pagos periódicos eran necesarios y eran recibidos por políticos corruptos.

Triunfo de la Revolución Cubana

Sin embargo, la revolución cubana de 1959 y la subida al poder de Fidel Castro cambió abruptamente el clima para las inversiones de la Mafia en Cuba. En el Año Nuevo de 1958, mientras Batista se preparaba a huir a la República Dominicana y desde ahí a España (donde murió en el exilio en 1973), Lansky estaba celebrando los US $3 millones que había hecho en su palacio de 18 millones de dólares y 440 habitaciones, el Habana Riviera. Muchos de los casinos fueron saqueados y destruidos esa noche, incluidos los de Lansky.

El 8 de enero de 1959, Fidel Castro entró en La Habana y asumió el poder, asentándose en el Hilton. Lansky había volado el día anterior a Bahamas y a otros destinos caribeños. El nuevo presidente, Manuel Urrutia Lleó cerró los casinos, además de nacionalizarlos junto a las propiedades hoteleras. En octubre de 1960, Fidel Castro nacionalizó los casinos y hoteles de la isla y dejó fuera de la ley a las apuestas. Esto afectó especialmente a las ganancias de Lansky. Perdió un estimado de US $7 millones. Con el quiebre adicional de los Casinos de Miami, Lansky fue obligado a depender solo de sus entradas de Las Vegas.

Últimos años

En sus últimos años Meyer llevó una vida sedentaria y de bajo perfil en su casa de Miami, principalmente escapando del acoso constante del FBI. En la década del 70, solicitó refugio en Israel amparándose en la Ley del retorno pero este derecho le fue denegado basándose en su conocido estatus de mafioso y por la gran presión de Estados Unidos sobre Israel para extraditarlo nuevamente y enfrentarse a la corte. Murió de cáncer pulmonar, el 15 de enero de 1983, a los 80 años, dejando una viuda y tres hijos. Para los periódicos, Lansky estaba más activo que nunca. En esos días, el FBI creía que tenía más de US $300 millones escondidos en cuentas bancarias pero jamas encontraron el dinero.

Sin embargo, su biógrafo Robert Lacey describe a Lansky en problemas económicos y sin poder pagar los gastos médicos de sus parientes. Para Lacey, no había evidencia que apuntara "la noción de que Lansky era el rey de los villanos, el cerebro, el motor secreto, el inspirador y controlador del crimen organizado norteamericano." Concluye mediante entrevistas a los miembros supervivientes de la familia Lansky, fue groseramente exagerada y que es más correcto referirse a él como contador de gángster, que como un gángster por sí mismo. Su nieto le contó al autor J.T. English que a su muerte en 1983, Lansky dejó solo US $37,000 en efectivo. Cuando le preguntaron en sus últimos años qué había ido mal en Cuba, el gángster no dio excusas... expresó: "Me expulsaron, eso fue todo". En septiembre de 1982, Forbes lo listó como uno de los 400 hombres más ricos de Estados Unidos de América. Su fortuna fue calculada en US$ 100 millones.¡

Fuentes

  • Enrique Cirules. La vida secreta de Meyer Lansky en La Habana.