Niebla

Niebla
Información sobre la plantilla
64,2 KB
Concepto:La niebla es aire saturado de vapor de agua.

Niebla. Aire saturado de vapor de agua. Éste comienza a condensarse cuando alcanza lo que los meteorólogos denominan el Punto de rocío, este valor define la temperatura a la que debe ser enfriada, a presión constante, una masa de aire para que resulte saturada.

Nubes de características parecidas a los estratos que se halla en contacto con la superficie terrestre. Formada por numerosas gotitas microscópicas de agua, la niebla presenta un color blanquecino o gris claro y dificulta la visión, cuando es densa, incluso a corta distancia. La visibilidad queda reducida a menos de 1 Km. (0,5 millas náuticas).

Formación

Las gotas recién formadas son demasiado ligeras y pequeñas para precipitarse, lo que propicia la aparición de una nube a nivel del suelo. Es la niebla. Una condición indispensable para su aparición, aparte del punto de rocío, es que en el aire existan núcleos de condensación. Se trata de motas de polvo, partículas de humo y otros diminutos inquilinos atmosféricos que sirven de soporte material a las gotas de agua.

Sin ellos, el vapor de agua no condensa, aunque se alcancen las condiciones de saturación.Las causas de la aparición de la niebla son variadas, aunque siempre se rigen por el mismo principio. Por ejemplo, surge cuando el suelo se enfría mucho por la noche y enfría a su vez la capa de aire húmedo más próxima a él, provocando saturación; y cuando una masa de aire cálido se desplaza sobre un terreno frío o una corriente oceánica gélida.

Clasificación

La niebla se diferencia de la neblina por su densidad como aerosol y dando una visibilidad de menos de 2 km. Se clasifica según el origen del enfriamiento que provocó la condensación:

  • Niebla de radiación: ocurre tras la puesta del sol, cuando el suelo pierde calor a través de la emisión de radiación infrarroja en una noche sin nubes (de estar presentes, las nubes evitarían que el calor escape al espacio). Entonces, el suelo enfriado produce condensación en el aire cercano al suelo, a través del proceso de conducción de calor.

Este tipo de niebla es común en otoño en los países de clima templado, usualmente tiene un espesor de 1 metro (aunque la turbulencia puede hacer que se eleve}, y es de corta duración.

  • Niebla de viento: toma lugar cuando masas de aire cargadas de humedad pasan sobre suelos fríos, lo cual enfría el aire mismo. Este fenómeno es común en las costas, cuando el tibio aire tropical se encuentra con aguas de latitudes mayores. También es común cuando un frente cálido se mueve sobre un área con una cantidad considerable de nieve.

Niebla matinal en una región montañosa, la humedad retenida en el bosque favorece la aparición de este tipo de nieblas.

  • Niebla de vapor: se da cuando aire frío se mueve sobre aguas más cálidas. El vapor del agua entra en la atmósfera por procesos de evaporación, y la condensación se da cuando se alcanza el punto de rocío. Este suceso es común en regiones polares, lagos de tamaño considerable, y al final del otoño y principio del invierno.
  • Niebla de precipitación: se produce cuando llueve y el aire bajo la nube se halla relativamente seco. Esto hace que las gotas de lluvia se evaporen y formen vapor de agua, que se enfría, y al alcanzar el punto de rocío, se convierte en niebla.
  • Niebla de ladera: se forma cuando el viento sopla contra la ladera de una montaña u otra formación geológica análoga. Al ascender en la atmósfera, la humedad se condensa. Es por esto que muchas veces las cumbres montañosas aparecen nubladas.
  • Niebla de valle: se forma en los valles, usualmente durante el invierno. Es resultado de la inversión de temperatura, causada por aire frío que se asienta en el valle, mientras que el aire caliente pasa por encima de éste y de las montañas. Se trata básicamente de niebla de radiación confinada por un accidente orográfico, y puede durar varios días, si el clima está calmado.
  • Niebla de hielo: es cualquier tipo de niebla en la cual las gotas de agua se hallan congeladas en forma de cristales de hielo minúsculos. Usualmente, esto requiere de temperaturas bastante por debajo del punto de congelamiento, lo cual hace que sean comunes a regiones árticas y antárticas. En ocasiones, pequeñas cantidades de estos cristales se precipitan a tierra, como sucede en Barrow, Alaska. En determinadas regiones esta niebla es conocida como dorondón o boira dorondonera.

Características

La niebla es un fenómeno natural de características propias, variables e imprevisibles, lo cual genera condiciones de riesgo en la circulación de automóviles.

Efectos en la vialidad

  • Reduce la visibilidad del camino y su entorno y cuando es muy espesa prácticamente lo elimina.
  • Disminuye la percepción de posibles obstáculos.
  • Reduce la adherencia de los neumáticos al mojarse el pavimento, con el consiguiente peligro de deslizamiento.

Precauciones

  • Antes de poner en movimiento el vehículo chequee el estado de: neumáticos, frenos, luces y limpiaparabrisas. Además mantenga limpios todos los cristales, espejos y luces.
  • Utilice luces bajas ya que éstas se proyectan directamente hacia el suelo penetrando mejor las gotas de agua y por lo tanto mejorando la visibilidad. Nunca luz alta, ya que el agua la refleja y puede producir deslumbramiento empeorando la visibilidad.
  • Encienda la luz trasera de niebla, sólo si ésta es espesa, ya que de otro modo deslumbra a los que circulan por detrás.
  • Aumente la distancia de frenado (a mayor distancia mayor margen de maniobra).
  • No se adelante a otros vehículos, ya que la falta de visibilidad impide una buena observación.
  • Encienda periódicamente el limpiaparabrisas, debido a que el depósito de las gotas, casi imperceptibles, sobre le vidrio disminuyen aún más la visibilidad.
  • Cuando la visibilidad es nula, deténgase en la primera estación de servicio o parador que encuentre y deje las luces de reglamento encendidas. Vale resaltar el peligro que supone las detenciones en la calzada principal o en la banquina.
  • Use siempre cinturón de seguridad.
  • Disminuya paulatinamente la velocidad y conduzca cautelosamente mientras la velocidad se lo permite. Respete las indicaciones de las señales horizontales y verticales (especialmente las vinculadas con la niebla).

Fuentes