Diferencia entre revisiones de «Pablo Luna Carné»

(Cine)
(Etiqueta: revisar proyecto)
(Fuente)
(Etiqueta: revisar proyecto)
Línea 58: Línea 58:
 
* 1951: Teatro Apolo (dir.: Rafael Gil).
 
* 1951: Teatro Apolo (dir.: Rafael Gil).
 
==Fuente==
 
==Fuente==
*[http://www.enciclopedia-aragonesa.com/voz.asp?voz_id=8286&tipo_busqueda=1&nombre=Carn%E9%20Luna%20Pablo&categoria_id=&subcategoria_id=&conImagenes= ]
+
*http://www.enciclopedia-aragonesa.com/voz.asp?voz_id=8286&tipo_busqueda=1&nombre=Carn%E9%20Luna%20Pablo&categoria_id=&subcategoria_id=&conImagenes=  
 
[[Category:Tenor]]
 
[[Category:Tenor]]

Revisión del 12:32 24 ago 2016

Pablo Luna
Información sobre la plantilla
Pablo luna carne.jpg
NombrePablo Luna Carne
Nacimiento21 de mayo de 1879
Alhama de Aragón, España Bandera de España España
Fallecimiento28 de enero de 1942
Madrid, España
ResidenciaBandera de España España
NacionalidadEspañola
CiudadaníaEspañola
OcupaciónCompositor

´´Pablo Luna Carné´´ Alhama de Aragón Zaragoza, 21 de mayo de 1879 Madrid, 28 de enero de 1942, uno de los más prolíficos compositores de zarzuelas español. Pablo Luna se convirtió en un destacado representante de un nuevo estilo de zarzuela inspirado en la opereta vienesa, especialmente en las obras de Franz Lehár

Síntesis biográfica

Pablo Luna Carne, compositor. El organista de su pueblo natal le dio las primeras clases de solfeo y aconsejó a los progenitores que lo llevasen a Zaragoza, donde podría cursar la carrera musical. Su padre, Pablo Luna Ferrer, era teniente de la Guardia Civil y pidió el traslado a la ciudad del Ebro.Pablo estudió violín con Teodoro Ballo y armonía y composición con Miguel Arnaudas. Pronto se dio a conocer tocando el violín en hoteles, cafés, cines, iglesias, en una agrupación de cámara y en los teatros, donde no sólo ocupaba el atril de violín concertino, sino que con frecuencia el directorial, al suplir a los maestros concertadores.

Trayectoria de su carrera

Anhelando dedicarse a la composición, escribió varias zarzuelas con libros de periodistas locales, entre ellas La rabalera y El oso blanco. El director de una compañía lírica le ofreció una de las dos plazas de maestro concertador y director de orquesta del teatro de la Zarzuela, de Madrid. Aceptó y se trasladó a la villa y corte hacia el año 1905, ya que ello le facilitaría llevar a cabo su deseo de componer obras líricas. Instalado en Madrid, contrajo matrimonio con Dolores Montaña, joven cantante catalana, con la que tenía relaciones desde algún tiempo antes y que fue su consuelo en momentos de dificultades y de desaliento. El matrimonio no tuvo descendencia y adoptó como hija a la de un matrimonio amigo, que quedó huérfana. Es la señorita Encarnación López Tinaut, que reside en Madrid en la casa en que falleció el maestro. En el teatro de la Zarzuela, concertó y dirigió zarzuelas de Chapí, Giménez, etc., con toda solvencia, por lo que se hizo admirar en los medios artísticos. Luis Pascual Frutos le confirió el libreto de opereta Mussetta, al que dotó Luna rápidamente de bella y acertada música, en la que no faltaban marchas y valses, imprescindibles en el género indicado, a la par que mostraba el donaire y gracia precisos para el éxito de las piezas nombradas. Mussetta, estrenada con éxito en 1908, fue seguida de ocho zarzuelas, precursoras del primer gran triunfo de Luna, Molinos de viento, obra estrenada en Sevilla el 2 de diciembre de 1910 y en Madrid, en el teatro Eslava, el 3 de febrero de 1911. Es opereta imperecedera, siendo su partitura verdadera joya musical. Traducido el libro, se ha cantado en varias capitales de Italia, y en él Real, de Madrid, por artistas extranjeros, bajo la dirección de Luna, el 16 de enero de 1914. En Zaragoza se estrenó Molinos de viento en el desaparecido teatro Circo, el 11de marzo de 1911, con acogida triunfal. Así inició Luna una carrera extraordinaria. Compondrá más de ciento cincuenta obras, que suponen unos doscientos actos, ya que muchas de ellas constan de dos y tres actos y esa amplia producción está henchida de éxitos verdaderamente rotundos. Son: La canción húngara, opereta, en la que, a no dudar, colocó Luna su primera jota; la segunda copla que canta a coro un grupo de aragoneses que se encuentra en París tiene esta letra de súplica a la Virgen del Pilar, Canto de primavera, opereta en dos actos, estrenada en Bilbao y en Zaragoza antes que en Madrid; el libreto, de Luis Pascual Frutos, proporcionó a Luna la composición de diez números musicales: preludios, concertantes, dúos, valses, marchas, una mazurka... Sobresalió el número cuatro, el «Canto a la primavera», verdadero himno a la juventud y a la alegría. Los cadetes de la reina, opereta en un acto 18 de enero de 1913, con piezas musicales imperecederas; asimismo se encuentran en: El asombro de Damasco 20de octubre de 1916; El niño judío 5de febrero de 1918, con la famosa Canción Española, Los calabreses 19de octubre de 1918, en cuya partitura se destaca la Serenata; Benamor 12 de mayo de 1923, opereta en tres actos, con magníficos números uno, la Canción Española, rival de la de El niño judío; La picara molinera, zarzuela en tres actos, de ambiente asturiano, primera representación en Zaragoza, el 29 de diciembre de 1928, y Las Calatravas, comedia romántica en tres actos 12 de septiembre de 1941, con música tan inspirada y fina como Molinos de viento, pues Luna no sufrió ninguna decadencia a pesar de sus treinta y tantos años de trabajo constante, en los que creó una obra verdaderamente gigantesca. En marzo del año 1925,Zaragoza rindió un sentido homenaje a Pablo Luna solemne función lírica en el teatro Principal, concierto en el paseo de la Independencia, e imposición de la medalla de oro de la ciudad. Le pidieron que compusiera una obra de carácter aragonés y escribió la suite-fantasía Una noche en Calatayud, que tuvo su primera interpretación en la plaza de toros de Zaragoza, el 19 de octubre de 1925 y es una de las páginas más populares de Luna. Otras composiciones aragonesas de Luna son la jota ¡Arre borrico! y el pasodoble-jota Ballesteros, fenómeno baturro. El Pilar de la Victoria es la postrera producción lírica de Pablo Luna, compositor de los más valiosos que ha tenido el teatro lírico español en la primera mitad del siglo XX.

Cine

En las diversas entrevistas que sostuvimos antes de fallecer con Adolfo Aznar, realizador de Miguelón, puso de manifiesto la ilusión de Pablo Luna por dar al cine una obra musical notable, escrita con el pensamiento y la inspiración en Miguel Fleta, el gran tenor aragonés que habría de interpretarla entre noviembre y diciembre de 1933. Eran los primeros tiempos del cine sonoro español, cuando hacía muy pocos meses se habían iniciado en Estudios nacionales las primeras películas habladas.Pero, desde sus inicios, Miguelón parecía vaticinar un fracaso. No era Adolfo Aznar un hombre de simpatía arrolladora y no gustaba tampoco del juego sucio. La acción de la película se desarrollaba en el Pirineo aragonés durante las guerras carlistas, con la participación de Miguelón como jefe de una partida de contrabandistas que suministran armas a los beligerantes. El guión era tópico, reiterativo. Sin embargo, la partitura de Pablo Luna era inspirada, colorista, muy apropiada para el lucimiento del divo tenor. Pero todo, en el film, estaba falto de medida. Como los equipos sonoros -montados en plena montaña- eran deficientes, no se pudieron escuchar bien las romanzas cantadas por Fleta. Resulta hoy incomprensible que sólo existan tres grabaciones de tres romanzas cantadas por Miguel Fleta, de las doce que interpretaba en la película. Igual sucede con la música ambiental y descriptiva de Pablo Luna, que llenaba, bien colmada, la obra toda, modalidad musical muy habitual a principios del cine sonoro. No es muy abundante la filmografía de Pablo Luna, pues el maestro no miró con muy buenos ojos el cine desde su decepción en Miguelón. Sus películas casi siempre hay que referirlas a meras adaptaciones de sus obras teatrales, en las que ni siquiera figuraba como adaptador al medio cinematográfico, cometido realizado por otros músicos más especializados. Entre la música escrita para el cine, cabe mencionar Una aventura oriental, Hogueras en la noche y En busca de una canción. Pero después de estas actividades, el desinterés del maestro hacia el cine es total.

Filmografía

  • 1933: Miguelón (dir.: Adolfo Aznar).
  • 1935: Una aventura oriental (dir.: Max Nosseck).
  • 1936: Hogueras en la noche (dir.: Arturo Porchet).
  • 1937: En busca de una canción (dir.: Eusebio Fernández Ardavín). La Farándula (dir.: Antonio Momplet). Molinos de viento (dir.: Rosario Pi).
  • 1942: Sucedió en Damasco (dir.: José López Rubio).
  • 1943: Con los ojos del alma (dir.: Adolfo Aznar).
  • 1951: La danza del corazón (dir.: Raúl Alfonso e Ignacio F. Iquino).
  • 1951: Teatro Apolo (dir.: Rafael Gil).

Fuente