Pablo Nápoles Miranda

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Pablo Nápoles Miranda
Información sobre la plantilla
NombrePablo Nápoles Miranda
Nacimiento25 de enero de 1931
San Miguel de Manatí, Las TunasBandera de Cuba Cuba
Fallecimiento9 de noviembre de 1958
Santa Lucia de Camagüey Bandera de Cuba Cuba

Pablo Nápoles Miranda. Patriota representativo del Municipio Manatí, integrante del movimiento 26 de julio.

Síntesis biográfica

Pablo Nápoles Miranda nació el 25 de enero de 1931 en la finca Ram Blacito, en en el seno de una familia humilde. Su infancia trascurrió en ese lugar, donde sólo pudo cursar hasta el segundo grado debido a que al morir su padre tuvo que ponerse a trabajar en las labores agrícolas para ayudar al sostén de la familia. Tenía 10 años de edad, trabajaba con un cuñado.

En 1957 el cuñado vendió las tierras en que ambos laboraban y compró una parcela en Cayo Confite en el extremo norte del territorio de Manatí. Pablo se trasladó hasta ese lugar y allí conoció a Rosa Galvía con quien contrajo matrimonio y de cuya unión nació su hijo Cesar.

Activides revolucionarias

En Cayo Confites se relacionó con los hermanos Pipo y Paco. Tiempo después se alzó y participó con la tropas del Capitán Botello en acciones en Monte Grade, Jacinto y Martillo. Fue armero en las tropas; además, preparó carteles y, cuando en la acción del Martincillo cayeron varios guerrilleros. Él y otro compañero arriesgando las vidas los sepultaron. Al realizarse la farsa electoral, pasó varias veces por un colegio con vista a un posible ataque al lugar.

En octubre de 1958 se le encomendó la misión de ajusticiar a dos chivatos en la ciudad Camagüey y la cumplió exitosamente. Regresó a San Miguel el 5 de noviembre.

En esos primeros días de noviembre salió del poblado por la madrugada en la camioneta de un yanqui del lugar, cuando llegó a la entrada de la finca, efectivos del ejército le dieron el alto y uno de sus compañeros dejó caer accidentalmente en el camino un paquete con balas, dos revólveres calibre 32 y brazaletes del Movimiento 26 de Julio.

En ese instante los guardias no descubrieron nada y los dejaron pasar, pero unos minutos más tarde encontraron lo que habían perdido los revolucionarios y salieron inmediatamente en su persecución alcanzándolos en el lugar conocido por El Cafetal.

Al llegar los uniformados Pablo estaba en el comedor del lugar y los mismos le dijeron que se fuera, a lo que este respondió que si lo hacía sería un cobarde porque matarían a otros compañeros que no debían nada y, acto seguido, se lanzó hacia donde estaban los esbirros, quienes respondieron propinándole golpes en la cabeza. Mientras eso ocurría, Pablo les gritaba: ¡bandidos, cobardes no son hombres! Posteriormente fue llevado al cuartel de Santa Lucia; allí, al relacionarse con otros 41 detenidos, les planteó que él se iba a hacer único responsable de lo ocurrido y de ser un “rebelde” para tratar de salvarles con su declaración.

Muerte

El 9 de noviembre de 1958 lo sacaron de la cárcel, lo torturaron salvajemente y luego lo mataron con disparos de una escopeta de perdigones calibre 12. Posteriormente escondieron su cadáver lanzándolo en el pozo conocido por Agua Verde. Así, alevosa y sádicamente actuaba la fuerza represiva de aquel régimen pecaminoso con los mejores hijos de la Patria.

Fuente