Pedro Castillo (pintor venezolano)

Pedro Castillo Pintor y Grabador
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Datos personales
Nombre completoPedro Castillo
NacimientoAño 1970
Villa de Cura, Edo. Aragua Venezuela
Fallecimiento24 de noviembre de 1858
Valencia, Edo. Carabobo Venezuela
ResidenciaAragua Venezuela
NacionalidadVenesolano
OcupaciónPintor y tallista
Datos artísticos
ÁreaÁrea dentro de las artes plásticas es el artista tallista
EducaciónA los 12 años ya tenía conocimientos del dibujo
Obras notablesEn 1806 pinta una Virgen del Cura, realizó esculturas y fue un buen dorador sobre madera y vidrio y en el ramo de esmaltes sobre plateados bruñidos con colores

Síntesis biográfica

Pedro Castillo “Pintor y tallista”. Sus padres fueron Silvestre Castillo, natural de Málaga España, y de Francisca Ynojosa. Es un pintor autodidacta, sobre ellos las notas escritas por su yerno Juan Antonio Michelena, el padre de Arturo Michelena.. Su niñez transcurrió en Villa de Cura Edo. Aragua y Caracas, trasladándose con su madre y su hermana. A los 12 años ya Pedro Castillo tenía conocimientos del dibujo al creyón, el esfumino, la miniatura en marfil y la acuarela, y a los 16 era ya pintor al óleo, había adquirido conocimientos en el ramo de la pintura de ornamentación al fresco y paisajes, y ejecutaba retratos con un parecido admirable. Michelena recuerda que Castillo perfeccionó sus conocimientos recibiendo dos lecciones por semana a razón de cuatro reales, bajo la dirección de un pintor italiano, "hábil dibujante y colorista". Es posible que se tratara de Onofre Padroni, miniaturista y pintor al fresco, aunque éste estuvo por muy poco tiempo en Caracas entre 1804 y 1805. Rosario y poco después es llamado a Villa de En 1806 pinta una Virgen del Cura Edos. Aragua para ornamentar y decorar la casa de un señor Ríos, realizando allí varios paisajes que complementaban la bella pintura de la casa. Tras la derrota de los patriotas en La Puerta Edos. Aragua y Guárico, en 1814, Castillo fue perseguido por haber sido propagandista fervoroso de la causa independentista y emigra a Valencia Edo. Carabobo, donde fue por mucho tiempo el único pintor reconocido en dicha ciudad. Además de sus trabajos pictóricos, realizó esculturas y fue un buen dorador sobre madera y vidrio y en el ramo de esmaltes sobre plateados bruñidos con colores. Aparte de las lecciones que recibió de su maestro italiano, Pedro Castillo siguió perfeccionando su arte estudiando en los libros las obras de pintores como Mengs, lecciones de dibujo lineal, arquitectura y caligrafía, que llegó a dominar con maestría.

En 1827, año en que el artista formaba parte del Concejo Municipal de Valencia, se le encomendó una escultura, La esperanza hoy desaparecida, para rematar la torre sur de la iglesia parroquial, hoy Catedral de Valencia, y en 1828 un Ángel de la Guarda, encargado por Jesús María Guerra. También de 1829 a 1830, según Francisco González Guinán, realiza las pinturas murales en falso fresco de la Casa-Museo General José Antonio Páez Valencia, Edo. Carabobo, donde éste vivió entre 1830 y 1831, y que representan algunas escenas mitológicas en las que incluye el desnudo neoclásico en el salón principal, y las principales victorias del célebre caudillo durante la guerra de Independencia, pintadas con el sistema de perspectiva a la caballera o de vista a vuelo de pájaro en los corredores: "las obras de Pedro Castillo son el primer testimonio en Venezuela de una pintura de guerra en la que un artista venezolano asume la difícil tarea de realizar una composición histórica sobre un hecho bélico, representando el desarrollo de la acción militar propiamente dicha, con multitud de soldados en un escenario tropical, con anotaciones geográficas y topográficas detalladas" Cuando el consejero Lisboa visita Valencia, en 1853, encontró que las pinturas, de "tosco pincel", habían sido parcialmente destruidas y que la figura de Páez, que sobresalía en ellas, había sido simplemente raspada de las imágenes por la reacción monaguista de 1848. Aparte debe subrayarse la calidad del trabajo caligráfico de Castillo en los frescos de la Casa-Museo General José Antonio Páez Valencia, Edo. Carabobo: en 1909, Eloy Palacios, en un informe preliminar como director de la Casa, lo calificaba de obras maestras. Además de las leyendas al pie de los cuadros, Castillo había inscrito en las cornisas laterales los nombres de los próceres de la Independencia, entre ellos a José Tadeo Monagas, quien tendría tan oscuras repercusiones en la vida de Páez. Finalmente, no debe desestimarse en estas obras de Castillo el trabajo paisajístico: en Mata de Miel y en la Acción del Yagual, el río circunscribe el espacio, y en Queseras del Medio, una llanura en distintos planos ocupa tres cuartas partes del espacio con un cielo de nubes diluidas al fondo. En 1829, cuando el general Páez monta Otelo en su casa, el decorado estuvo también a cargo de Castillo. Según escribe John G. Williamson en su Diario 16 de septiembre de 1838, Páez poseía en el cuarto superior de su casa de Caracas, La Viñeta, los retratos de todos los miembros de su familia pintados por Castillo 1954 , de allí que le pidiera a su amigo sir Robert Ker Porter que posara para el pintor, a quien había traído de Puerto Cabello; el retratista termina su "retrato chino" al día siguiente 22 de agosto de 1833, lo que desdice comentarios como los de Ramón de la Plaza quien señalaba que Castillo se dedica a pintar retratos, en que la semejanza con sus modelos era perfecta" aunque también agregaba que "no conocía, sin embargo, ni el dibujo correcto, ni mucho menos los secretos del colorido" Según Alfredo Boulton, Páez guardaba el retrato de Porter, de cuerpo entero y gran uniforme, en La Viñeta 1968. El Retrato de Juan José Páez, 1833; el Retrato de un caballero, tal vez alguno de los amigos que recuerda Michelena en su breve biografía; el retrato del presbítero y doctor José Vicente de Unda, obispo de Mérida 1836; la Niña María del Rosario Febres Cordero Monagas; el retrato de Ramón Montilla y su esposa Micaela Tronaes 1851. Entre sus obras religiosas se conservan Nuestra señora del Rosario y su Santísima Trinidad. A Castillo también se le atribuyen dos pinturas sobre madera La Última Cena y La Anunciación Juan Röhl, al referirse a su producción artística expresó: estas ocho pinturas de la Casa Museo General José Antonio Páez constituyen uno de los documentos más interesantes y valiosos que se conservan de la Epopeya Libertadora, tanto por el valor histórico como por la manera ingenua, sincera y de candorosa espontaneidad con que están concebidas y ejecutadas. Las pinturas del gran salón representan: La serpiente pitón, Minos, Eaco y Radamanto, Arión, El casamiento de Venus y El juicio de Paris. Estos paneles fueron semidestruidos por pintores de brocha gorda a fines del siglo pasado XIX y rehechos posteriormente por el artista Germán Otero, no con mucha eficiencia. A juzgar por la ordenada composición de las figuras en ellos representadas, sospechamos que fueron copiados de láminas ejecutadas en Europa. De su mano eran quizás las decoraciones murales en la antigua Casa Municipal de Valencia, con representaciones de las batallas libradas en Carabobo; en Naguanagua, ganada por Páez, y la defensa de Valencia por Urdaneta contra Boves en 1814. La Casa Municipal fue derribada en 1921 para construir el nuevo edificio de la Municipalidad y no se tomó la precaución de dejar una constancia fotográfica de los murales. Uno de los mejores ejemplos de los retratos pintados por Castillo, es el del doctor obispo José Vicente de Unda 1857, colección Concejo del Municipio Libertador, Caracas. De colorido pobre y próvido de detalles innecesarios, la actitud del prelado en ademán de bendecir es sin embargo, muy expresiva"

Pintura

  • Retrato de un Caballero. Óleo sobre Tela adherido a visopán , Sin Fecha.
  • Eecutaba retratos con un parecido admirable
  • Pnta una Virgen del Cura Edos. Aragua para ornamentar y decorar la casa de un señor Ríos, realizando allí varios paisajes que complementaban la bella pintura de la casa
  • Realiza pictóricos, realizó esculturas y fue un buen dorador sobre madera y vidrio y en el ramo de esmaltes sobre plateados bruñidos con colores
  • Raliza las pinturas murales en falso fresco de la Casa-Museo General José Antonio Páez Valencia, Edo. Carabobo, donde éste vivió.
  • Rpresentan algunas escenas mitológicas en las que incluye el desnudo neoclásico en el salón principal.
  • Castillo se dedica a pintar retratos, en que la semejanza con sus modelos era perfecta.

Muerte:

El día 24 de noviembre de 1858

Fuente