Pedro Plaza Fernández

Pedro Plaza Fernández
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NombrePedro Plaza Fernández
Nacimiento23 de mayo de 1934
Colonia cañera Amancio del antiguo Central Francisco
Fallecimiento26 de septiembre de 1958
San Miguel del Junco
PadresJoaquín y Dulce

Pedro Plaza Fernández. Mártir del municipio Amancio, combatiente revolucionario integrado al Movimiento 26 de Julio, sirvió de guía a la Columna 11 en su paso de Las Tunas a Camaguey, donde fue asesinado.

Síntesis biográfica

Nació el 23 de mayo de 1934, en la colonia cañera Sitio Viejo (Amancio), del antiguo Central Francisco. Sus padres, Joaquín y Dulce, eran de procedencia social humilde y ganaban el sustento familiar en labores agrícolas y ganaderas.

Pedrito, como cariñosamente lo llamaban, sintió muy de cerca los rigores del sistema de explotación imperante; no obstante, con el sacrificio de su núcleo familiar asistió a una escuela particular y de esa forma alcanzó el 8vo grado.

A los 14 años se vió obligado a trabajar para ayudar al sustento de la familia y se empleó como repartidor de carne, percibiendo un salario de 0.50 centavos diarios.

Pedrito era alegre, jaranero y entusiasta, pero muy responsable en sus actos, le gustaban las fiestas y las corridas de cintas.

En 1958 contrajo matrimonio con María Gerpe y de esa unión deja, al morir, una hija.

Actividad revolucionaria

La miseria, la necesidad y los atropellos a que eran sometidos los trabajadores y el pueblo humilde despertaron en él los deseos de luchar por la libertad y, a fines de 1956, se incorporó al Movimiento 26 de Julio, laborando en la venta de bonos, traslado de alimentos y medicinas; cooperó en lo que pudo desde el punto de vista económico y llevó mensajes a los tropas de Jaime Vega, también le sirvió de práctico hasta los montes de San Miguel, tarea que desarrollaba constantemente, logrando con su astucia burlar las emboscadas del ejército batistiano, con lo cual salvaba a los guerrilleros pero ponía en peligro su vida.

Muerte

La columna No.11 “Cándido González” salió el 8 de septiembre de 1958, desde las Vegas de Jibacoa en la Sierra Maestra, con la misión de establecer un frente en Camagüey.

Al pasar el río Tana, hace contacto con el Movimiento 26 de Julio del Francisco (Amancio) y se le recomendó situar, en un lugar adecuado, algunos camiones para que les sirvieran de traslado esa noche.

Penetraron en el municipio Santa Cruz del Sur, en la noche del 24 de septiembre, al cruzar el río Sevilla. Recibieron en el campamento de “Laguna Baja” al Dr. Iglesias y otros dirigentes del Movimiento 26 de Julio del Francisco, quienes garantizaron el transporte para el traslado de la tropa hasta el siguiente campamento.

Guiados por Pedro Plaza, camionero del lugar, la columna arribó al amanecer del día 26 de septiembre de 1958,al Batey de San Miguel del Junco, donde fueron acogidos con hospitalidad por los vecinos, que relatan con sumo orgullo, las atenciones brindadas por ellos a Camilo y Che.

En el campamento, la jefatura de la columna hicieron contacto con miembros del Movimiento 26 de Julio de Macareño, quienes alertaron reiteradamente los peligros que entrañaba el paso por Pino 3, dado el estado de actividad que tenía el ejército en la zona.

Después de recibir informaciones del movimiento del ejército hacia el lugar, la jefatura de la columna ordenó montar una emboscada en el camino de acceso. Para ello, designan una escuadra, la cual llevaba consigo una mina de 25 lbs de explosivo, para colocarla en el camino. Esta avanzada salió del campamento en la camioneta conducida por Pedro Plaza de regreso al Francisco. La mina fue sembrada en medio del terraplén entre Corea y la entrada a la vereda de San Miguel, la escuadra se ocultó en un campo de caña cercano y esperó.

Pedro Plaza, al llegar al Francisco es detenido, interrogado y torturado; por mucho que niega su colaboración con la guerrilla, algunos peines vacíos dejados sobre la camioneta lo delataron, los guardias decidieron finalmente llevarlo en el primer camión de una caravana, destinada a localizar y atacar a la columna guerrillera.

Pedro sabía que iba hacia la muerte; sin embargo, de su boca no salió palabra alguna, prefirió perecer junto con los esbirros que lo conducían, antes de poner en peligro a los rebeldes.

La escuadra rebelde emboscada ve aparecer una columna de varios camiones cargados de soldados. Toman posesión y esperan el momento oportuno, una descarga hace pensar a los emboscados que han sido descubiertos, pero inmediatamente se percatan de que es un tiro escapado. Instantes más tarde, el primer camión pasa sobre la mina; los guerrilleros, ignorantes de que en él va Pedro Plaza, lo hacen detonar. La explosión levanta en peso el vehículo con todos sus ocupantes provocando su muerte.

Fuentes

  • Museo Municipal Amancio
  • Biblioteca Pública Amancio
  • Dirección Municipal de Cultura de Amancio
  • Datos de la Familia de Pedro Plaza.

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