Pesca sostenible
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La pesca sostenible. Se sustenta en prácticas y técnicas responsables con el medio ambiente, sin afectar la productividad, la diversidad biológica y los procesos ecológicos de los ecosistemas marinos, proporcionando grandes beneficios económicos y sociales.
Sumario
Manejo sostenible de la actividad pesquera
Alcanzar un manejo sostenible de la actividad pesquera no es solamente una meta importante para lograr objetivos de la conservación del medio ambiente, sino que constituye a su vez una necesidad prioritaria por los evidentes síntomas de decrecimiento de los recursos pesqueros.
El empleo de tecnologías que impactan negativamente al medio ambiente, el excesivo esfuerzo pesquero con la consiguiente sobreexplotación de los recursos; el uso de artes de pesca que afectan poblaciones de especies y los fondos marinos; la explotación intensiva de rubros específicos por su alta demanda y valor económico, así como la contaminación del medio por fuentes terrestres y marinas y la ausencia de criterios biológicos, ecológicos y científicos en general en las políticas y programas pesqueros, entre otras causas, ha conducido a afectaciones tales como el agotamiento de recursos pesqueros, destrucción de hábitats y la pérdida de integridad de ecosistemas. La aplicación de prácticas responsables es la única vía para evitar el agotamiento de los recursos pesqueros, la pérdida de fuentes valiosas de proteína para la alimentación, de empleo para los pescadores y de sustento para las comunidades pesqueras.
La sociedad y el manejo sostenible
Los pescadores, personal técnico, directivos del sector, investigadores científicos y tomadores de decisiones de los gobiernos y todos los actores sociales, tenemos que contribuir a la conservación de los ecosistemas marinos y al manejo sostenible de los recursos pesqueros, para asegurar su uso en el presente y el futuro, reducir y mitigar los impactos negativos al medio ambiente por la actividad pesquera, en primer lugar y por cualquier otra actividad humana.
Otras consideraciones para el manejo sostenible de los recursos pesqueros
- Poseer conocimiento del estado y evolución del ecosistema marino.
- Mantener y restablecer la integridad del ecosistema marino.
- Mantener y restablecer las poblaciones de las especies de captura.
- Establecer y cumplir las regulaciones pesqueras.
- Establecer y ejecutar un sistema de manejo responsable de las pesquerías, siguiendo el código de pesquerías responsables de la FAO.
- Establecer reservas de pesca (zonas bajo régimen especial de uso y protección) como mecanismo fundamental para mantener y recuperar recursos pesqueros.
- Establecer zonas vedadas para la pesca, por intereses nacionales de protección de los recursos naturales, ecosistemas y del patrimonio.
Conservación de los ecosistemas
El mantenimiento y conservación de los ecosistemas permite a su vez, el mantenimiento y conservación de las comunidades de organismos marinos, porque de esta manera se protege su hábitat, fuentes de nutrientes y alimentos, los competidores y depredadores que regulan su población y todas sus necesidades, es decir, su nicho ecológico. Constituye un aspecto muy importante para lograr la sostenibilidad, contar con un ordenamiento de las pesquerías, partiendo del estado de los ecosistemas, de la composición y potencial de las especies comerciales y su dinámica poblacional.
Otras medidas necesarias
La aplicación de medidas que posibiliten la reproducción y la recuperación, de las especies agotadas, y evitar la excesiva mortalidad por la pesca, incluyendo las vedas y zonas de no captura temporales o permanentes según el caso.
Se requiere establecer niveles de captura partiendo de análisis de la dinámica poblacional de las especies, potencial productivo y ciclo biológico, para lograr altos rendimientos con el mínimo de impactos negativos. En ocasiones es conveniente establecer cuotas razonables de captura por zonas o unidades de pesca. En cuanto a la captura, se tendrá en cuenta también el establecimiento de las tallas mínimas y la planificación del tiempo dedicado a la faena.
El esfuerzo pesquero debe corresponderse con la captura máxima sostenible de acuerdo con el potencial de las especies comerciales y del impacto sobre las demás especies y el ecosistema en general. La captura máxima sostenible puede variar de acuerdo con las condiciones ecológicas y de manejo de las áreas de cría, reproducción y pesca. Por eso el análisis debe ser muy integral. Debe hacerse una selección adecuada de las artes de pesca, en correspondencia con los objetivos pesqueros y de conservación y mantenimiento del ecosistema.
Las artes que se empleen deben evitar la captura de especies incidentales, (moralla), la mortalidad excesiva y la captura de individuos con talla inferior a la recomendable, y el deterioro del hábitat.
No se deben destruir corales ni otros refugios para capturar organismos, ni para permitir el paso de las redes. Los chinchorros son muy dañinos para los fondos pesqueros, en particular los arrecifes coralinos. Hay que evitar pescar en el justo momento que los peces van a agruparse para la reproducción, como sucede con el uso de los tranques. No se utilizarán nunca técnicas que usen explosivos, sustancias tóxicas y venenosas. Se requiere utilizar prácticas responsables con el medio ambiente con las que se puede lograr la integralidad, función y diversidad del ecosistema, alcanzar pesquerías de altos rendimientos a niveles razonables con beneficios sociales y económicos justos a corto y largo plazo.
Fuentes
- Serrano Méndez, H. Manejo sostenible de los recursos pesqueros. En:Temas sobre el Mar, las Pesquerías, los pescadores y el Medio Ambiente. Editado por: CITMA, Proyecto PNUD/GEF Sabana-Camaguey, Centro de Investigaciones Pesqueras del Ministerio de Industria Pesquera.
- Ortega R, I. Rodríguez (1994). Manual de Gestión del Medio Ambiente. Editorial MAPFRE. S.A., Madrid, España, pp 282-292
- Ley 37.322. Pesca y Acuicultura del 12 de noviembre de 2001 de la Republica Bolivariana de Venezuela. Ediciones de la Asamblea Nacional, Caracas-Venezuela.
