San Luis en el período neocolonial (1902-1958)

Revisión del 23:54 19 abr 2019 de Javiermartin jc (discusión | contribuciones) (Texto reemplazado: «<div align="justify">» por «»)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)
San Luis en el período neocolonial
Información sobre la plantilla
Fecha:1902 - 1958
Lugar:San Luis, Santiago de Cuba, Bandera de Cuba Cuba
Descripción:
Al establecerse la república neocolonial, en toda Cuba ocurren transformaciones.
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba


San Luis en el período neocolonial (1902 - 1958). El 20 de mayo de 1902 se establece la república neocolonial en Cuba. Su primer presidente, Tomás Estrada Palma, contaba con el visto bueno de las autoridades norteamericanas como posible freno a la ascendencia del liderazgo militar más radical en la vida política del país. En San Luis, Santiago de Cuba, este proceso tuvo influencias desde el punto de vista económico, político y social.

Etapa 1902 - 1925

A partir del año 1902 los moradores de San Luis continúan dependiendo casi exclusivamente de la actividad cíclica de dos ingenios: Ingenio Unión e Ingenio Santa Ana de Auza. Queda esta industria al margen de las transformaciones norteamericanas que se concentraron en los ferrocarriles. Estas inversiones posibilitan la apertura del ferrocarril a Guantánamo en 1907 y a Palma Soriano, Bayamo y Manzanillo en 1908, convirtiéndose San Luis en centro de comunicaciones ferroviarias.

En medio del acontecer republicano se perfilan dos partidos políticos, el Liberal y el Conservador. Hasta 1908 estos partidos lo integran elementos de los sectores con mayores potencialidades revolucionarias dentro de la sociedad, procedentes en su mayoría de las filas mambisas. El Partido Liberal lo lideraba el General de Brigada Bernardo Camacho Olazagasty y el Comandante José Pagliery Norma.

Al finalizar la primera década del siglo la política del municipio estaba marcada principalmente por la actividad y las pugnas entre liberales y conservadores sin llegar a concretar acciones que redundaran en defensa del interés local, introduciendo la corrupción como estilo de manejar la cuestión pública.

De esta forma el patrimonio local continúa en total abandono, las calles se encuentran en mal estado constructivo, no existe un acueducto para el abasto de agua y la situación sanitaria general de la población es mala, no existen hospitales, asilos de beneficencia, ni se disfruta de la energía eléctrica. El adinerado sanluisero Federico Almeida, solicita al gobierno provincial de Santiago de Cuba la autorización para instalar una planta generadora de electricidad para el alumbrado público y otros usos industriales. El proyecto es aceptado comenzando los trabajos para su instalación en 1909 y concluyéndose al año siguiente.

En el año 1912 se efectúa un enfrentamiento racial liderado por Evaristo Estenoz y Pedro Ibonet, hecho este que deja un amplio rastro de muerte, convirtiendo al municipio en el escenario de una brutal carnicería. Cientos de hombres se levantan en armas en las zonas de: La Luz, Santa Isabel de Corralillo y Río Grande.

Para 1914, impulsado por la I Guerra Mundial, resurge el Ingenio Borgita, teniendo como principal accionista la compañía azucarera canadiense Maisí, entrando esta producción en franca prosperidad ascendiendo a 246 059 269 arrobas de caña. Por otro lado, la contienda bélica estimula la producción de manganeso, comenzando a explotar las minas ubicadas en San Nicolás, cuyos primeros embarques son realizados por la Cauto Mining Company.

Favorecido por las ganancias obtenidas en el comercio de exportación se comienza la realización de los primeros trabajos para la construcción de un acueducto, al concluir parte del mismo se funda, en 1918, la fábrica de hielo de Adriano Enríquez e Hijo.

En este período se produce un aumento poblacional considerable estimulado fundamentalmente por una fuerte corriente migratoria, que asciende a 5 353 ciudadanos para 1919.

Como consecuencia de la crisis de 19201921 y la incapacidad de Federico Almeida de enfrentar la deflación, vende el Ingenio Santa Ana de Auza de su propiedad a la West Indies Sugar Corporation, compañía norteamericana que se apodera de cinco centrales de los ocho existentes en la provincia oriental, pasando parte de esta industria a manos extranjeras.

Desde 1921 - 1925 y como parte de la evolución política de la región se producen movimientos de protesta y rebeldía pero que no llegan a concretarse en organizaciones o movimientos políticos por la liberación nacional, y es el caso de la manifestación masiva efectuada el 30 de mayo de 1922, la que se dirige a la alcaldía exigiendo trabajo a los desocupados y la rebaja de la tarifa pagada por el consumo de agua.

Etapa 1925 - 1940

Manifestación de las luchas obreras en el municipio

Los obreros ferroviarios camagüeyanos decretan la huelga demandando el reconocimiento por parte de la administración, de la Cuban Company, del convenio de trabajo íntegro que ha sido acordado recientemente con los trabajadores y que se negaban ahora aprobar. El 14 de abril de 1926 en solidaridad con los ferroviarios camagüeyanos, los sanluiseros se unen a la huelga. La situación se agudiza cuando la compañía se niega a efectuar el pago a los obreros, lo que conlleva a que estos ratifiquen sus posiciones planteando que mientras no se le abonen sus haberes correspondientes, no regresan a sus puestos de trabajo.

En plena huelga la Primera División de los Ferrocarriles exige a los jefes de estaciones prestar servicio, amenazando con clausurar éstas. Enrique Ferrer Pérez, delegado de los ferrocarriles informa de la situación al Dr. Américo Portuondo, abogado asesor de la hermandad, quien aconseja que ningún jefe de estación abandone el local de la misma, ya que permanecen allí en virtud de un contrato y solo los tribunales de justicia podrán decretar el desalojo.

La estación de Dos Caminos de San Luis es clausurada al negarse el jefe de la misma a darle paso al tren correos. El trayecto Guantánamo - San Luis es recorrido por motores de líneas fuertemente custodiados por soldados del ejército, para facilitar la transportación de la correspondencia.

En 1927 el Gremio de Panaderos, bajo la dirección de un grupo de líderes obreros entre los que se encontraban: Ignacio Castro, Gonzalo Estella, Armando Campo y Agustín García, organizan un movimiento huelguístico cuya solicitud básica era el trabajo diurno, petición que fue negada por los dueños de panaderías. El fracaso de esta huelga demuestra la necesidad de que la organización responda verdaderamente a los intereses obreros.

El sector de los trabajadores desarrolla un intenso trabajo de fortalecimiento organizativo que conduce a la fundación de la Unión de Torcedores de San Luis el 23 de abril de 1928, que agrupa a todos los tabaqueros del poblado.

La política de restricción azucarera aplicada desde 1926 representa una disminución del tiempo de zafra y a su vez del número de obreros empleados en ella. Esta situación, unido a la crisis en que se ve envuelta la economía del país desde 1929, incide también en el aumento del desempleo, rebaja de los salarios y el alza del costo de la vida, lo que provoca continuas protestas de los diferentes sectores obreros.

En 1929 los trabajadores del Ingenio Borgita van a la huelga demandando el aumento del tiempo de molienda y obtienen resultados favorables con un incremento de la producción a 60 mil sacos de azúcar.

En 1931 los obreros de la panadería El Trust se declaran en huelga reclamando el aumento de salario a $2.50, la existencia permanente de agua potable en la panadería y el mejoramiento de las condiciones de salubridad en los baños. La guardia rural interviene haciendo prisioneros a los huelguistas, a quienes amenazan para que regresen al trabajo, pero estos se mantienen firmes en defensa de sus demandas. La huelga culmina al cabo de siete días con éxito parcial pues el propietario concede un ligero aumento en el sueldo de los panaderos (a $1.70) y el compromiso de mantener las condiciones higiénicas de los baños.

En febrero de 1932 los tabaqueros sanluiseros van a la huelga solicitando aumento de salarios, construcción de taburetes (trabajaban en bancos) y el aumento del precio del tabaco lo que redunda en una ganancia mayor para los obreros. Al cabo de los 12 días se le conceden las demandas a los trabajadores: aumento del salario de 25 a 35 centavos, entrega de los taburetes y se eleva el precio del tabaco a 3 centavos.

Durante el Gobierno de los Cien Días fue aprobado el establecimiento de la jornada de 8 horas de trabajo para todos los obreros, sin embargo, esta medida era burlada por los patrones lo que provoca continuas protestas de los obreros. En este caso se encontraban los trabajadores del Ingenio Unión, lo que además de las ocho horas demandan un aumento salarial. La situación de los obreros se torna crítica al decidir el dueño del ingenio el cierre del mismo para dedicar las tierras a la ganadería motivado por la crisis que atravesaba la industria azucarera.

La paralización del ingenio trae aparejado el crecimiento del número de desocupados, sumándose a las ya existentes los 200 obreros que permanecen en las labores de zafra y 26 en reparaciones. En este mismo año en el Ingenio Santa Ana de Auza se producen algunas manifestaciones de los obreros a favor del derecho de reunión y la libertad de expresión, mientras los patronos tratan de imponer los sindicatos "de bolsillo".

En marzo de 1936 los obreros de Borgita protestan por la cuota de producción asignada al ingenio, pues esta medida implica la reducción de los días de zafra y por ende de la fuente de empleo.

En marzo de 1937, al calor de la apertura democrática propiciada por el gobierno, se crea la Federación General de Trabajadores de Oriente (FGTO) promoviendo la reorganización de los sindicatos obreros, entre ellos el del Ingenio Borgita, que comienza a funcionar con una nueva dirección, logrando que le sean concedida una serie de demandas como es: el pago de la superproducción, la recogida de basuras, el alumbrado del central, reparaciones de casas, reconocimiento de un escalafón y la instalación de una caja de agua fría. La obtención de estos beneficios contribuye al mejoramiento de las condiciones de vida y trabajo de los obreros.

Al siguiente año, la FGTO convoca una reunión a la cual asisten dos representantes del sindicato de Borgita: Enrique Cuza y Carlos Muñoz, en la cual se acuerda reorganizar las fuerzas y buscar la unidad para enfrentar los problemas que aún subsisten en el sector.

En enero de 1939 se celebra el congreso de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en el que participa una representación de los ingenios Borgita y Santa Ana.

Promovido por el Partido Comunista de Cuba (PCC) se constituye la Comisión Pro-molienda del Ingenio Unión integrada por: Víctor Guerra, Emiliano Hernández, Daniel Morales, Juan Bosch, Fredesvindo Hurtado, Julián Costrafreda y Rafael Vizcay, aunque sus intentos fracasan.

Los campesinos, sector más pobre y abandonado

La etapa de 1920 - 1940 se caracteriza por la explotación de los campesinos, sector más pobre y abandonado. En 1938, impulsados por la grave situación que presentan cientos de campesinos, recorren las calles del poblado a caballo en protestas por el desalojo que se le intenta hacer de las tierras que habitan, conocidas como las monterías en Majaguabo. Los trabajadores que estudiaban en la Universidad Popular José Martí los acompañan desde allí hasta el cuartel de San Luis.

Buscando solución a sus problemas los campesinos se agrupan en Asociaciones Campesinas, por ejemplo: en Majaguabo Arriba, barrio de Dos Caminos de San Luis, el 8 de marzo de 1939 en la casa del señor Julián Jiménez Ochoa (finca "Bella Elisa”), señalando que siendo imperiosa la necesidad tanto para los trabajadores de la ciudad como en el campo constituirse en colectividad, debidamente organizada, para defender mejor y con mayores ventajas los intereses de la clase a que pertenecen los campesinos, pequeños propietarios o arrendatarios de tierras y trabajadores agrícolas.

También en Majaguabo, barrio de San Luis, en la casa de Escolástico Castillo y en Monte Dos Leguas así como en la finca La Picada en la casa de Valeriano García en 1940, así como en otras zonas también se constituyeron estas asociaciones.

Crisis del sistema

En lo económico

Durante este período la producción agrícola continúa siendo la base de la economía, subordinada a los intereses de los latifundistas y las compañías extranjeras que controlaban las mejores y mayores porciones de tierra, muchos de forma improductiva. Un rico latifundista, de origen canario fue Alberto Almeida, quien poseía 101 caballerías de tierra, desde La Yua hasta La Escondida y 20 en el Hondón de Majaguabo dedicadas fundamentalmente al cultivo de la caña de azúcar. Otras tierras la dedica a la ganadería vacuna, pero en menor medida.

Otros latifundistas (que poseían grandes cantidades de tierra) fueron: Rivas, en San Nicolás, y Julián Suárez, con más de 50 caballerías; los Ferrer y Manuel Díaz en la Dacha y Quevedo Monier en La Escondida. Hacia estos lugares, hasta ese momento improductivos, se producen en este período migraciones motivadas fundamentalmente por la búsqueda de empleo, lo que lleva al surgimiento de núcleos poblacionales en Chamarreta, El Ají, Almeida, Paraíso y La Fuente, entre otros, los que vivían en estado de miseria, aislamiento y ruindad. Es así como se incrementa la población rural que asciende a 18 465 habitantes de los 27 196 que tiene el municipio para 1931.

Sin embargo, la economía agropecuaria mantiene durante esta etapa la estructura agraria caduca, llena de insuficiencias y limitaciones de índole material y organizativa, las cuales constituyen las causas fundamentales del subdesarrollo agropecuario que existe en el municipio.

El panorama de la industria no azucarera es desolador, pues la mayoría de estas se encuentran en la ciudad de Santiago de Cuba, existiendo en el municipio muy pocas fábricas, entre ellas: la de hielo El Cristal (existente desde 1918), la de calzado El Patio Oriental, la fábrica de licores, propiedad de Pedro Almeida y una de grúas de madera, propiedad de Enríquez e Hijos.

En la localidad se observa un ligero ascenso de las industrias productoras de los bienes de consumo y de servicios, existiendo: 9 cafés y restaurantes; 5 carnicerías; 2 dulcerías; 4 farmacias; 3 ferreterías; 3 academias comerciales; 6 barberías; 6 peleterías y sombrererías; 9 tiendas de ropas, tejidos y sederías; 4 sastrerías; 5 tabaquerías; 1 fotografía; 2 panaderías; 5 tiendas mixtas y 2 hoteles.

En lo Social

La situación educacional no pudo ser más crítica, primando la educación privada ya fuera laica o religiosa en las llamadas escuelitas de barrios, teniendo un peso significativo las escuelas auspiciadas por congregaciones de la religión católica como la escuela de la respetable Logia José Maria Heredia No. 22, promovida por Eliseo López Rodríguez.

Durante todo el período republicano, la educación enfrenta serias limitaciones materiales, por la ausencia de un programa de desarrollo de los gobiernos, lo que lleva a que las aulas creadas, sean ubicadas en su mayoría, en casas alquiladas, con divisiones internas y en mal estado constructivo. Para 1927 el distrito de San Luis contaba con 44 aulas.

Según la Revista Oriente, propaganda comercial y de turismo, solo existe una escuela que enseña hasta el 8vo. Grado, El Gran Educador, de la cual es su directora Blanca Perdomo de Pinedo, auxiliada por 3 profesores. Tenía anexa una academia nocturna de comercio y mecanografía. Esta situación lleva a que, según el censo de 1931, 2 559 personas no saben leer y de los niños de 5 a 9 años 2 981 no asisten a la escuela.

Como parte de la necesidad de instrucción y recreo de los descendientes de españoles, y dada la carencia de instituciones culturales, surge en este período La Colonia Española, en la calle Martí No. 4, con 388 miembros, cuyo objetivo fundamental es proporcionar a sus asociados la asistencia sanitaria, fomentar el amor al estudio y a las letras y sobre todo facilitar a estos el recreo y los deportes, realizando varias acciones con este fin dentro de sus salones.

El sistema de salud presenta una situación dramática, pues no existe un centro de socorros de emergencia a pesar de ser pedido en reiteradas oportunidades por el jefe de sanidad del municipio el Dr. Santiago U. Somodevilla.

El estado del matadero y el cementerio local era pésimo, se carecía de cunetas en las calles, lo que empeora el estado sanitario. En medio de esta desatención el pueblo logra establecer el Negociado de Higiene Infantil, dirigido por la comadrona facultativa, Delfina Coello Valiente, para atender los partos.

En lo político

Ante la crisis económica, social y el descrédito del sistema político, los sectores progresistas se mantienen en efervescencia, tienen lugar en los primeros días de enero de 1931, una acción conjunta de obreros y estudiantes que se dirigen al Club Barceló, e irrumpiendo en este, destruyen un retrato de Antonio Machado que pocos días antes había sido develado en gesto de servilismo al gobierno. Por otro lado se realizan acciones que expresan la inconformidad del pueblo con el régimen imperante, ejemplo de ello es la distribución de volantes y colocación de pancartas en los muros del Parque Moncada.

En 1932 se crea una célula del Partido Comunista con el objetivo principal de lograr la unidad obrera para la lucha y apoyar a los campesinos en su combate contra los desalojos. La lucha contra la tiranía machadista alcanza su clímax en 1933, en que se asalta y toma el cuartel de la guardia rural, actual Museo 29 de Abril.

Asalto y toma del cuartel de San Luis

En el año 1932, Antonio Guiteras Holmes, líder antimachadista, se da a la tarea de crear la denominada Unión Revolucionaria, que sostiene como única vía de derrocar al gobierno, la lucha armada. De esta forma se propone un plan consistente en la ocupación simultánea de varios cuarteles en la provincia Oriental. Entre los días 26 y 27 de abril de 1933, Guiteras se entrevista con Antonio López Rondón y Luis Trompeta Garay (miembros de la Unión Revolucionaria), en la casa de vivienda del antiguo Ingenio San Luis, determinando que el día 29 es el día señalado para asaltar y tomar el cuartel.

Para llevar a cabo la acción los combatientes se dividen en tres grupos. El primero tiene la misión de atacar por el fondo de la calle Villuenda, avanzando sobre el cuartel y en caso de fracasar la acción cubrir la retirada del grupo que atacaría por el frente; el segundo se apoderaría de la oficina del cuartel y cortaría las comunicaciones y el tercero atacaría por el frente, ocupando el armamento y parque de la guarnición. Previamente han fabricado bombas incendiarias en el taller de Máximo González Madrigal, teniendo la misión de lanzarlas en el interior del cuartel, Demetrio Ortega.

En el combate sostenido solo resulta herido el combatiente Esteban Lago, mientras que de la parte del ejército caen los soldados Molina y Galán. El pueblo se lanza a la calle en apoyo a los revolucionarios, quienes tras la toma del cuartel se dirigen a ocupar la jefatura de la policía, la alcaldía, la Junta Electoral y la Oficina de Correos. El poblado de San Luis en pocas horas estaba bajo el poder de las fuerzas de la Unión Revolucionaria. También se realizan otras acciones en apoyo a la toma del cuartel. Al tener conocimiento del fracaso del movimiento en Santiago de Cuba, Guiteras decide dirigirse a San Luis. También llegan al poblado fuerzas del ejército machadista dirigidos por el Capitán José La Rubia. Este hecho determina la decisión del jefe máximo del movimiento de indicar la retirada hacia las zonas rurales, dividiéndose en tres grupos. El grupo que se dirige a caballo hacia Santa Isabel tiene un fuerte encontronazo con un camión de soldados de la tiranía en el cual mueren: Amador Montes de Oca, Francisco Vidal, Luis Milanés y Julio Castillo. Al reconquistar el poblado, el ejército desata una feroz represión siendo detenidos y asesinados muchos pobladores.

Situación económica y social

En el año 1934 y motivado por la crisis que atraviesa la industria azucarera y las demandas constantes de los trabajadores, el dueño del Ingenio Unión decide parar la molienda para dedicar las tierras a la ganadería. La paralización del central, medio de vida más importante, trae aparejado el crecimiento del número de desocupados, los que se ven obligados a ir hacia las montañas a vender su fuerza de trabajo en la cosecha cafetalera.

Al calor de la apertura democrática, instaurada a partir de 1936 con el gobierno de Federico Laredo Brú y liderado por Julio Antonio Mella, surge la Universidad Popular José Martí, idea que fructifica en San Luis en 1937. Dicha institución era sostenida con la cooperación popular, estaba ubicada en la calle Rousseau, esquina Silencio (hoy Máximo Gómez y Carbó). Al año siguiente, promovido por los fundadores de la Universidad Popular y en una sala contigua a esta surge la Biblioteca Circulante Enrique José Varona, con 204 libros y con Samuel Deulofeu como director.

En el período siguen proliferando las Sociedades de Instrucción, Recreo y Socorro, siempre con un carácter racista y para pequeños sectores sociales, pero que juegan un importante papel en la conservación y divulgación de la cultura, surgiendo en 1937 el Faro de Oriente y posteriormente el Club de Leones.

En 1939 se logra, a instancias del alcalde Manuel Rodríguez Formeza, instalar un radio receptor en el Parque Moncada y un año después se coloca un equipo amplificador que contribuye a mantener informado al pueblo y sirve como medio de distracción. Ese mismo año son invitados a participar en el congreso de la CNOC, los obreros elegidos de los ingenios Borgita y Santa Ana, donde se funda la CTC. En búsqueda de solucionar sus problemas, los campesinos de San Luis se agrupan en asociaciones, quedando constituidas varias de estas en la zona de Majaguabo.

Etapa 1940 - 1953

A partir de 1940 y hasta 1946 el país se encuentra bajo el impacto de la II Guerra Mundial, llegando a convertirse en el principal abastecedor de azúcar al mercado norteamericano. El municipio San Luis, cuya economía sigue basada fundamentalmente en la producción de azúcar, comienza un período de reanimación de esta industria sobrepasando en eficiencia y calidad el Ingenio Santa Ana de Auza de propiedad norteamericana.

Amparados en la bonanza económica y tras fuertes gestiones de Rigoberto de Armas, a mediados de 1941 sale al aire la emisora radial CMKQ, situada en la calle General García número 67, con una programación variada de 8 horas diarias. También en esta etapa surgen algunas obras sociales que de una manera u otra benefician a la población como es el caso del parque infantil José Martí, donde se encuentra ubicada actualmente la Plaza Roja de San Luis; el Parque "Mariana Grajales" (donde se develó un busto de esta estoica figura) y la nueva terminal de trenes inaugurada en 1943. Cuenta el municipio para estos años con algunos ómnibus que cubren las rutas San Luis - Santiago de Cuba y de San Luis al Ingenio Santa Ana en período de zafra. Se cuenta además con una pizarra telefónica manual de 75 teléfonos, operados por obreros que atienden el servicio local y larga distancia, incluyendo a los tres centrales azucareros.

A pesar de esta recuperación para 1943 la agricultura absorbe el 26 % de la fuerza laboral, solo el 7 % se dedica a la industria transformadora y el 66 % se encuentra sin ocupación lucrativa. En ese mismo año la población del municipio asciende a 34 083 habitantes, como consecuencia del alto ritmo de crecimiento de la población rural que contaba con 24 337 habitantes, ubicados en los asentamientos de Dos Caminos, La Luz, Majaguabo y Monte Dos Leguas.

En este período se llevan a cabo constantes propuestas obreras, teniendo entre ellas mayor repercusión la huelga de hambre iniciada el 17 de diciembre de 1944, cuyo objetivo es la incorporación del Ingenio Unión a la molienda, el que estaba parado desde 1934. Como consecuencia de la misma se paraliza el tránsito, se impide el paso de los trenes, se cierra el comercio y el pueblo se vuelca a las calles, lo que lleva a que se conceda una entrevista de sus dirigentes con el Ministro de Gobernación. Finalmente, el Consejo de Ministros acuerda que el central iniciara sus labores en la próxima zafra. Su propietario José Rousseau decide la venta del central a los cubanos Julio Lobo y Germán López, iniciando la zafra en marzo de 1945.

Situación política

Las elecciones parciales de 1948 concluyen con el triunfo del Partido Republicano Auténtico. En San Luis es electo como alcalde Juan Rodríguez Reyes, esto propicia la aprobación del escudo del municipio, en el cual quedan plasmados los elementos representativos de la localidad: el central como principal fuente económica; el ferrocarril, principal vía de comunicación; La Mejorana, sitio histórico importante y el árbol de la fraternidad, sembrado con tierra de los 126 municipios de Cuba, símbolo de amor y unidad.

La profunda crisis del Partido Revolucionario Cubano (PRC) condujo a la creación del Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo) por el grupo de “inconformes” liderados por Eduardo Chivas Rivas. En San Luis, Rafael Benítez Quevedo, está al frente de este partido, que a pesar de las pugnas internas que se manifiestan al comenzar el año 1952, cuenta con una fuerte organización. Esta situación, unida al desprestigio de los gobiernos auténticos, da posibilidad al Partido Ortodoxo de ganar las próximas elecciones, convocadas para 1952, frustrados por el golpe de estado el 10 de marzo de ese año.

El panorama existente se agudiza con el golpe de estado, creando una situación revolucionaria expresada en la protesta de Auténticos y Ortodoxos entre los que se encontraban Pedro Román, Miguel Acre y Juan Pérez, quienes se dirigen al ayuntamiento nombrando una comisión encargada de ir al Cuartel Moncada, pero al llegar ya la fortaleza se había plegado al golpe. Otro grupo de concejales ortodoxos se niegan a firmar los nuevos estatutos implantados por el tirano. El Partido Socialista Popular manifiesta su abierta condena al golpe militar en declaraciones hechas por su máxima dirigencia a la prensa partidista. En el municipio se discuten estas declaraciones y algunos militantes fueron apresados, siendo uno de ellos Aracelio Rosales.

Otra manifestación de repulsa al régimen batistiano tuvo lugar en el Rincón Martiano, cuando un grupo de sanluiseros pertenecientes a la Juventud Ortodoxa cubre con un paño negro el busto de José Martí, con el objetivo simbólico de que no viera las injusticias y crímenes que se cometen en el país. Muchas fueron las manifestaciones de repudio a la dictadura, expresadas fundamentalmente por la juventud sanluisera.

Fidel Castro quien comenzaba a despuntar como figura importante dentro del escenario político del país, comprendió que la única forma de combatir a Batista era con las armas. Así un grupo de jóvenes honestos, inspirado en los ideales martianos elaboraron un programa para rendir homenaje al Héroe Nacional en el año de su natalicio, los que atacarían los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes para tomar las armas, entregarlas al pueblo e iniciar en el país la lucha armada.

Luego de los acontecimientos del 26 de julio de 1953, un grupo de jóvenes honestos es apresado cerca de San Luis, el día 29 (en la entrada del puente San Rafael), entre ellos Raúl Castro, quien es conducido hasta el cuartel donde es encerrado en una celda. El día 30 es trasladado como prisionero hasta el VIVAC de Palma Soriano y entregado al jefe de esta plaza por el Teniente Campos (Jefe de la plaza de San Luis).

Creación de organizaciones de oposición al régimen

A partir de 1953 los sectores más revolucionarios, sobre todo la juventud sanluisera, comienzan a nuclearse en diferentes organizaciones de oposición al régimen. Creando la Organización Auténtica en 1955 y luego la Triple A, dirigidas ambas por Edgardo Morales Castro. Las mismas realizan diferentes acciones como: la quema de caña, colocación de petardos y letreros pintados en las paredes, que incluían consignas contra el régimen. Otra organización fundada en el municipio es el Frente Cívico de Mujeres Martianas dirigido por Evarista Figueroa, ellas juegan un importante papel en la oposición al régimen.

A fines de 1955 queda constituido el M-26-7 siendo su coordinador el compañero Aldo Llorente Cleger, jefe de acción y sabotaje Miguel Morales Castro, responsable de propaganda Rafael Reyes Llópiz, de finanza Juan Edgardo Morales Castro y del frente obrero Miguel Acre. En la primera reunión se orienta la creación de células para cada uno de los frentes de trabajo. Entre las misiones en estos primeros años está la recaudación de fondos a través de la venta de bonos, la propaganda que se realiza distribuyendo los periódicos La Calle y El Aldabonazo, la revista universitaria Alma Mater, y posteriormente de forma clandestina el Periódico Sierra Maestra.

En el municipio circulaba un periódico local dirigido por Julián Ercilio Navarro, El Trabajador, mediante el cual se combate la cuota sindical mujalista, la corrupción política y se orienta a los trabajadores en su lucha contra el régimen. También se imprimen volantes con contenidos revolucionarios que se hacen circular por las calles de forma clandestina.

Situación económica

La fuente fundamental de trabajo eran los tres ingenios azucareros: Unión, Borgita y Santa Ana, que no satisfacen las necesidades de empleo de la población a lo que se suma los días del año que estos trabajadores no laboran, pues la zafra oscilaba entre 148 días en 1952 y 138 en 1958.

Al ser la industria azucarera la producción fundamental, pocas áreas están dedicadas a otros cultivos, por ejemplo: existen 146 fincas de café con una producción variada; algunas vaquerías como las de Janate, Bucuey, Arroyito y La Cristina; algunos locales donde se tuerce tabaco, todos muy pequeños, con una fuerza empleadora mínima, que no resuelve el desempleo existente.

Situación social

Predominan las casas de yagua o madera, guano y piso de tierra que representaban el 40.8 % del total, siguiéndole las de madera, tejas y pisos de madera y las viviendas de mampostería y piso de mosaico que representa el 3.6 % del total. Por los datos referentes a la vivienda se pueden valorar los índices vinculados a la salud del pueblo como el servicio sanitario y el suministro de agua. Del total de viviendas en el municipio el 31.5% no posee letrina, ni servicio sanitario, y solo el 20.8 % recibe agua por sistema de acueducto, el 59.3 % toma el agua directa del río, pozo o manantial, y por otras vías un 16.8 % de las casas, lo que influye de algún modo en la proliferación de enfermedades y epidemias en el territorio.

En cuanto a la salud solo existía en esta etapa una casa de socorro con un personal mínimo; siete médicos particulares y dos comadronas. En las zonas rurales se carecía de recursos asistenciales.

Desde el punto de vista educacional en este período continúa el déficit de escuelas, estando el 71.1 % de los niños y jóvenes con edad escolar sin matricular en escuela alguna. En el curso escolar 19441945 dejan de asistir a la escuela 9240 niños y solo se benefician educacionalmente 3745. En la zona urbana se encuentran las escuelas primarias: Mariana Grajales, José de la Luz y Caballero y José Antonio Saco. Proliferan los colegios privados entre los que se encontraban: el bautista José Martí; la católica, María Inmaculada; Eliseo López y El Gran Educador (estos dos últimos surgidos desde fines de la década del 30).

En el año 1945, tras fuertes gestiones de la profesora Estela Martínez Velazco, se funda la Escuela Primaria Superior Mariana Grajales Cuello ubicada en la calle Martí, esquina Goulet. Al concluir el 8vo. grado los jóvenes se ven obligados a trasladarse a Santiago de Cuba para continuar estudios, viéndose imposibilitada la gran mayoría de estos a asistir, por falta de recursos económicos.

En el ámbito cultural, debido a la falta de estímulos de los gobernantes de promover el surgimiento de entidades públicas para el disfrute de la población, continúan estando en el centro de la vida cultural las Sociedades de Instrucción, Recreo y Socorro, las que unidas a las actividades festivas de origen religioso, como San Joaquín, Sábado de Gloria, San Juan, San Lázaro, Santa Bárbara, las navidades, los Altares de Cruz (fundamentalmente Monte Dos Leguas y Majaguabo), conforman el acerbo cultural del pueblo sanluisero.

En mayo de 1947 el Cine - teatro Parra es clausurado por un incendio, reiniciando sus actividades para fines de este año, con el nombre de Jairo. También debemos destacar la inauguración de una nueva institución cultural Cine - teatro Cuba en 1948, en el que se realizan funciones teatrales por compañías procedentes de La Habana.

Desde el punto de vista gubernamental no existe ninguna atención a las prácticas deportivas, las que son estimuladas desde las Sociedades de Instrucción , Recreo y Socorro y por el pueblo de forma espontánea existiendo los equipos de pelota: Los Dorados, Los Mulos de San Luis, Semiprofesionales y La Liga.

Con relación al servicio eléctrico, se circunscribe a la zona urbana contando con 1800 consumidores, carecen de este importante servicio el 60 % de los habitantes.

En esta etapa proliferaron los Comités y Patronatos con el fin de recaudar fondos para solucionar los principales problemas sociales que afectan el municipio. Ejemplo de ello son los creados con el objetivo de la construcción de la carretera San Luis - Mayarí y San Luis - Santiago de Cuba; así como el arreglo del camino vecinal del Manzano - Paraíso, donde el 30 % de los recursos es aportado por los campesinos.

Al hablar de la clase obrera en este período, donde se desata la Política de Guerra Fría, debemos decir que el sector más activo fue el azucarero; aunque otros sectores se manifiestan en busca de sus demandas, carecen de una organización cohesionada y poseen muy poca preparación en cuanto a métodos de lucha.

Etapa 1953 - 1958

La inercia e incapacidad de los partidos políticos burgueses para enfrentar al régimen castrense, al cual se adhieren algunos de estos partidos, contrasta con la beligerancia de los sectores populares, en especial de la joven generación que recién nace a la vida política. De sus filas nace un movimiento de nuevo tipo, encabezado por Fidel Castro, un joven abogado cuyas primeras actividades políticas se desarrollan en el medio universitario y las filas de la ortodoxia, el movimiento revolucionario cubano.

Principales Acciones en San Luis

Misión importante desarrollada por los militantes del M-26-7 es la recogida de armas. En las zonas rurales generalmente se obtienen escopetas y revólveres arrebatados por la fuerza a los soldados de la dictadura. En 1956 el trabajo del Movimiento se centra en la preparación del levantamiento armado del 30 de noviembre. El objetivo de San Luis es impedir el paso de las fuerzas del ejército de Batista hacia Guantánamo, donde también se producen acciones simultáneas al alzamiento de Santiago de Cuba. Para esto colocan polines en la línea férrea que conduce a Guantánamo, cortan las líneas telefónicas y telegráficas imposibilitando todo tipo de comunicación.

A raíz de los sucesos del 30 de noviembre la dirección municipal del M - 26 - 7 sufre cambios al pasar Rafael Reyes Llópiz a ocupar el frente de acción y sabotaje, y en su lugar como responsable de propaganda se designa a la compañera Evarista Figueroa.

Durante el año 1957 se desarrolla una sostenida acción saboteadora que incluye la quema de cañaverales, obstrucción de vías férreas, telefónicas, eléctricas y sabotajes a los centrales azucareros. No obstante, el principal objetivo del Movimiento en los primeros meses de ese año fue contribuir a la consolidación de la guerrilla en la Sierra Maestra.

El asesinato de Frank País el 30 de julio de ese año, genera en el municipio un paro de las actividades del comercio durante varios días. El 22 de noviembre son asesinados los combatientes del movimiento 26 de julio Edgardo Morales Castro e Ignacio Castro Cabrera. El pueblo se vuelca a las calles, se hace guardia de honor a los caídos y se les pone el brazalete del M - 26 - 7 y la bandera cubana. Los féretros son acompañados por el pueblo hasta el cementerio, lo que se convierte en una masiva manifestación de repudio a la tiranía.

En febrero de 1958 se reestructura la dirección municipal del Movimiento pues algunos compañeros han tenido que irse a las montañas y otros, como Edgardo Morales Castro, han sido asesinados. Se mantiene en la dirección como coordinador al compañero Aldo Llorente Cleger, acción y sabotaje Primitivo Enrique, finanzas Joaquín Suñe Reina, propaganda Esther Castillo Garcés, buró obrero Ulises Escalona Osorio y en la sección de resistencia cívica Renato Cordero.

El 11 de Marzo termina en Piloto del Medio la histórica marcha de Raúl Castro con 76 hombres al mando de la columna 6, queda constituido el Segundo Frente Oriental Frank País. El día 12 se crea el Comité Campesino Revolucionario. El 5 de abril se produce la pérdida de dos valerosos combatientes en el Manzano, Eduardo Izquierdo Quiñónez y Francisco Javier Llamos.

Con vista a la huelga del 9 de abril se orienta el paro del sector azucarero, comercio y pequeñas industrias. No obstante el hostigamiento a las fuerzas de la tiranía, la ocupación de los tres centrales con sus guarniciones no se lleva a cabo, debido a los cambios en los planes de acción que se adoptaron a nivel nacional, pero se tiene conocimiento de que el Ingenio Unión, con el pretexto de realizar una limpieza, para la molienda apoyando de esta forma la huelga.

A mediados de 1958 se crea en el municipio el Frente Obrero Nacional (FON), instrumento para aunar y dirigir a los obreros en la lucha contra la dictadura, este apoya al Ejército Rebelde, no solo en el envío de avituallamiento, sino en la creación de células obreras en centros de trabajo.

Para el mes de julio en Segundo Frente se produce un salto cualitativo y por el propio desarrollo y organización que va adquiriendo el Ejército Rebelde se crean en el municipio numeroso campamentos guerrilleros que entran en acción posteriormente. En el territorio operaron fundamentalmente las compañías “A” y “C” de la columna 17, dirigida por el comandante Antonio Enrique Lussón. El 12 de Agosto fuerzas de la compañía “A” llevan a cabo el asalto y toma del tren central Habana - Santiago con el objetivo de efectuar el Rescate de Carlos Iglesias Fonseca dirigente nacional del M-26-7 (más conocido como Nicaragua).

Los días 4 y 5 de noviembre se liberaron los poblados de Chile y Dos Caminos, junto a las medidas tomadas para evitar la entrada del enemigo por los lugares de acceso al poblado, de esta forma estaban dadas las condiciones para la toma de San Luis, por el Ejército Rebelde.

Liberación de San Luis

El 13 de noviembre fuerzas de las compañías “A” y “B” al mando de los capitanes Raúl Menéndez Tomassevich y Feliberto Olivera, dirigidos por el comandante Lussón, atacan sincronizadamente puntos estratégicos de las fuerzas de la tiranía. La Casa de Socorro, el Ayuntamiento y la Policía son incendiados, rindiéndose los efectivos militares que se encuentran en esta última. El cerco al cuartel lo abandonan al llegar refuerzos de la compañía 104 de Bayamo, al mando del capitán Francisco Sierra. El 16 se produce el segundo ataque donde pierden la vida: Doris Manuel Martínez Mejías, Luis Enrique Ávila Arias, Luis Carrión, Antonio González Cobas. Los días siguientes continúa el asedio y hostigamiento a las fuerzas enemigas, pero el cuartel no ha caído debido a la escasez de municiones y la concentración de refuerzo enemigo en el mismo.

El 6 de diciembre se produce la ofensiva rebelde de tropas combinadas de las columnas 17 y 9. En más de una ocasión se conmina a la rendición de las tropas acantonadas en el cuartel, no siendo aceptada, pues se espera un refuerzo procedente del Cuartel Moncada, el cual llega el 7 de diciembre, compuesto por más de un centenar de soldados, tanques, ametralladoras, microondas y otros medios. Su objetivo no era la defensa del poblado, sino el rescate de las fuerzas que se encuentran en el cuartel. Desconociendo los rebeldes estos propósitos se retiran de sus posiciones y se ubican en puntos limítrofes del poblado.

El 8 de diciembre de 1958 las tropas de la tiranía abandonan el cuartel. Con la salida del ejército desmoralizado e impotente, los combatientes de las columnas 9 y 17 entraron definitivamente a San Luis.

San Luis después de su liberación

Tras la liberación del poblado se crea la primera unidad de la Policía Rebelde en territorio libre, al frente de la cual se designa al compañero Abelardo Reyes Trejo con la misión de preservar el orden y asegurar la retaguardia. Esta Policía Rebelde es un órgano nacido de las entrañas del propio Ejército Rebelde.

También se constituye la Comisión de Asuntos Civiles y Militares, en la casa de vivienda de la antigua farmacia de Juan B. Salis en la calle Carbó esquina Martí, queda integrado por Juan Armero Santos como comisionado principal, Gardenia Chuig Arnau, Edmundo Pérez País, Elías Milanés como subcomisionado de Dos Caminos y Luis Cabrera Soto. Esta comisión integra el Gobierno Provisional que reglamenta el Sistema de la Administración Municipal.

En los tres centrales fueron nombrados comisionados libres con la responsabilidad de cumplir con las orientaciones del Frente Obrero Nacional Unido (FONU).

Es válido señalar que antes de constituirse el gobierno civil y militar ya la clase obrera ha desalojado a los dirigentes mujalistas de los sindicatos azucareros, constituyendo nuevas directivas, con elementos revolucionarios, que dieron todo su apoyo al Ejército Rebelde y al gobierno municipal.

El desalojo de los elementos mujalistas en el territorio y la designación de los comisionados libres en los centrales azucareros permite que los verdaderos representantes de la clase obrera guíen a los trabajadores hacia las conquistas de sus derechos y el total apoyo del gobierno revolucionario, una vez alcanzado el triunfo definitivo del país el 1 de enero de 1959.

Vida cultural durante el período neocolonial en San Luis

Las manifestaciones culturales más significativas del período se expresan:

También muy significativa fue la concesión por el Presidente de la República a petición de los veteranos y dado por la efervescencia patriótica, del local para que se ubicara la Delegación ó Centro de Veteranos (nave del antiguo hospital español), siendo nombrado como su presidente el capitán Anselmo Verdecia Rubalcaba. Este centro se convierte en rector de las actividades cívicas ofrecidas fundamentalmente en conmemoración de fechas patrias.

Ver además

Fuentes