Santa Lucía (Ángel)

Santa Lucía
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Religión o MitologíaCatólica
Día celebración13 de Diciembre
País o región de origenSiracusa, Sicilia (Italia)

Santa Lucía. Es muy antigua la devoción a Santa Lucía tanto en el oriente como en el occidente. Su nombre figura en el canon de la misa romana, lo que probablemente se debe al Papa Gregorio Magno. De acuerdo con "las actas" de Santa Lucía, nuestra santa nació en Siracusa, Secilia (Italia), de padres nobles y ricos y fue educada en la fe cristiana. Perdió a su padre durante la infancia y se consagró a Dios siendo muy joven. Sin embargo, mantuvo en secreto su voto de virginidad.

Historia

Se estima que Lucía nació en Siracusa, Italia, en el 281 de nuestra era. Siracusa era una importante ciudad griega que fue tomada por los romanos en el 212 y era considerada una de las más importantes de la provincia de Sicilia.

El cristianismo había llegado a través del obispo Marciano, enviado por San Pedro. Y San Pablo estuvo allí tres días de paso hacia Roma. Cuando nació Lucía, la comunidad cristiana era numerosa y había en el lugar templos y catacumbas.

Los cristianos del lugar peregrinaban todos los años a la ciudad de Catania, para venerar los restos de Santa Águeda, que había muerto en el 251, durante le persecución de Dedo.

Águeda era venerada por los cristianos, pero sobretodo era muy conocida por los numerosos milagros que había operado. El 5 de febrero de 301, fiesta de la santa, Lucía y su madre peregrinaron hasta Catania para rogar por la curación de Eutiquia que sufría de hemorragias desde hacia cuarenta años.

En el templo Lucía se durmió y en sueños se le apareció Águeda diciéndole: "Lucía, ¿por qué me pides lo que tú misma puedes conceder? Tu fe ha alcanzado gracia y tu madre está curada". Al despertarse, Lucía le contó a su madre el sueño y Eutiquia descubrió que estaba completamente curada. El suceso sirvió para que madre e hija iniciaran una relación más estrecha. Lucía le confió que había decidido consagrarle su vida al Señor y Eutiquia le anticipó que había decidido dejar en sus manos su cuantiosa fortuna.

A su regreso, Lucía comenzó a vender sus bienes y a repartirlo entre los pobres. El hecho fue interpretado por las autoridades como un claro indicio de que Lucía se había hecho cristiana.

La Denuncia

Un joven de la ciudad, enamorado de Lucía, desilusionado por la ausencia de matrimonio, después de que Lucía le había explicado que ella se había consagrado a Jesús, se vengó con rabia, denunciándola al prefecto romano Pascasio como secuaz de Cristo. El Emperador Diocleziano había emitido un edicto que preveía una feroz represión en contra de los cristianos.

El Arresto

Lucía fue arrestada y condenada ante el prefecto Pascasio, que le ordenó hacer sacrificios paganos para que abandonase a su propia fe cristiana. Lucía se opuso refutándolo. Pascasio se dio cuenta de que no había obtenido nada y, entonces, ordenó que la joven fuese llevada a los peores barrios marginales de la ciudad, para que fuera tratada con violencia.

Los Prodigios

Los soldados la tomaron para llevársela, pero por más que se esforzaban no podían con ella, probaron también atarla con cuerdas, en las manos y en los pies, pero por más que se esforzaban no podían. Inexplicablemente la muchacha permanecía rígida como una gran piedra. Dios no permitía que nadie se la llevara.

El Martirio

Pascasio furiosamente la condenó a ser decapitada, muerte reservada a los condenados de la noble estirpe. Santa Lucía, antes de la ejecución, preanunció la muerte de Diocleziano, ocurrió pocos años después, al final de la persecución que terminó en el 313 d.C con el edicto de Constantino. Lucía falleció el 13 de diciembre del 304 y fue sepultada en el mismo lugar donde, en el año 313, fue construido un Santuario dedicado a ella.

En el 1039, el General Bizantino Jorge Mariace transfiere el cuerpo de Santa Lucía de Siracusa a Constantinopla, para alejarla del período de invasión de la ciudad de Siracusa por parte de los Sarracenos. En el 1204, durante la cuarta cruzada, el duque de Venecia Enrique Dandolo, encuentra en Constantinopla los restos de la Santa, los lleva a Venecia al monasterio de San Jorge, y en el 1280, los hace transferir a la Iglesia dedicada a ella en Venecia.

Santa Lucía salvó muchas veces a Siracusa en momentos dramáticos como hambre, terremotos, guerras y ha intervenido también en otras ciudades como Brescia que, gracias a su intersección, fue liberada de una gran miseria.

Los Ojos de Lucía

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Se representa a Santa Lucía con la palma del martirio (en su mano izquierda), y con una copa con dos ojos incrustados (en su mano derecha). Una leyenda que hizo popular la Iglesia primitiva cuenta que Lucía se arrancó los ojos para dejar de agradar a su prometido; de allí que algunos crean que la representación de esta santa con la bandeja con sus dos ojos venga de esta "historia" . Pero... esto entra dentro de las leyenda, muchos teólogos y estudiosos de santos han rechazado como cierto este relato escrito muchos años después que Lucía fuera martirizada. El hecho que se le represente así, podría ser por el significado de su nombre: "luminosidad".

Una leyenda popular cuenta que a la Santa le fueron sacados los ojos de sus órbitas, por eso alguna iconografía la representa con un plato plano en la mano en el cual fueron puestos sus ojos. Santa Lucía es la protectora de la vista.

Devoción

La devoción a Santa Lucía se difundió rápidamente después de su muerte y ha sido trasmitida hasta nuestros tiempos. El testimonio más antiguo es un epígrafe de mármol en griego que data del siglo IV, descubierto en el 1894 en las catacumbas de Siracusa. El Papa Gregorio Magno, que vivió entre el año 590 y el 604, agregó a Santa Lucía en el canon de la misa romana. Algunas citas sobre ella se encuentran en la Suma Teológica de Santo Tomás de Aquino. Entre sus devotos encontramos también a Santa Catalina de Siena y San León Magno. Dante la convirtió en el símbolo de la gracia iluminante y se definió como un fiel devoto suyo. La reputaba como protectora de la vista y, como cuenta en "El Convivio", a ella se le atribuye la curación de las afecciones de los ojos.

Tradición de Santa Lucía

La fiesta de Santa Lucía es el 13 de diciembre. En el norte de Italia, en Checoslovaquia y también en Austria se festeja Santa Lucía como portadora de donaciones para los niños. En Dinamarca y en Suecia la Santa se festeja con la búsqueda de una joven que la represente y en el cortejo con otros muchachos que la acompañan a llevar donaciones a los niños y a instituciones de caridad. En Suecia es muy venerada también en la Iglesia luterana.

Protección y patronazgo

Es por excelencia la patrona de todos los invidentes, también de las modistas y de los sastres y de todos aquellos oficios que necesitan tener una vista muy atenta.

Fuente