Tintura de anís estrellado

Tintura de anís estrellado
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Tintura de anis estrellado: El uso del aceite esencial del Anís estrellado en altas dosis produce delirio, congestiones cerebrales y convulsiones. No usar en tratamientos prolongados y a dosis elevadas, el aceite esencial puede resultar tóxico, con efectos narcóticos.

Descripción y origen de la planta

Arbol o arbusto de hasta 6 m de altura, con follaje siempre verde. Las hojas son más largas que anchas, de color verde y se ven lustrosas. Tiene grandes flores vistosas y solitarias de color crema. Sus frutos están como escondidos entre las hojas y tienen forma de estrella con 8 picos y cada pico libera una semilla. Originario de China, habita en clima cálido, desde los 90 y hasta los 890 m SNM. Asociado a vegetación perturbada derivada de bosque tropical subperennifolio.

Preparación y Posología

  • La decocción de 5 g del fruto (3 estrellas) en 200 ml (1 vaso) de agua; tomar de 3 a 4 veces al día.
  • El extracto fluido (1:1) se prepara por doble percolación con un disolvente hidroalcohólico (agua-alcohol 75 %). 10-30 gotas, una a tres veces al día
  • Tomar de 10 a 15 gotas de tintura de Anís estrellado disueltas en 100 ml de agua, 3 o 4 veces al día.
  • Infusión de Anís estrellado (frutos): 1 g/taza. Una taza después de las comidas.

Otros usos

aperitivo, corrector de olor y de sabor en alimentos y medicamentos..

Precauciones

  • El aceite esencial del fruto ejerció una acción irritante cuando se aplicó sobre la piel de una persona adulta. Además una ingestión excesiva o prolongada puede ser tóxica ya que produciría irritación de la mucosa gástrica y aturdimiento.

Contraindicado

  • embarazo, lactancia, hiperestrogenismo. A dosis elevadas, el aceite esencial puede resultar tóxico, con efectos narcóticos, delirio, anestesia y convulsiones. Existe un grave peligro de intoxicación si se produce una falsificación del anís estrellado por otra especie: Illicium religiosum(badiana del Japón), rica en alcaloides tóxicos (shikimina, shikimitoxina), con acción estupefaciente y cardiotóxica. Ya que la distinción entre ambas especies -incluso macroscópica- es bastante fácil, el farmacéutico deberá comprobar que no existe adulteración: en Europa se considera poco frecuente, sin embargo en España, quizás debido a menores controles de calidad, la adulteración se describe como bastante habitual.

Fuentes