Vega de Pestán (Cauto Cristo)

Vega de Pestán (Cauto Cristo)
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Sitio Histórico Vega de Pestán. En la campaña de 1895, Cauto Cristo tuvo el privilegio histórico de ser testigo de unos de los grandes hechos ocurridos en esta etapa decisiva, la Invasión de Oriente a Occidente por la Columna Invasora bajo el mando del General Antonio Maceo y Grajales.

Vegas de Pestán se convierte en el primer campamento general de la columna después de salir de Mangos de Baragua .

Salida de Mangos de Baraguá

Después de salir de los Mangos de Baraguá la Columna Invasora realiza una jornada de marcha de Júcaro a Guayacán y Sabanilla, de esta última a Vegas de Pestán, donde llegaron el General Maceo y las fuerzas invasoras el 26 de octubre de 1895.

Después de andar 27 leguas desde Baraguá, los cuales estuvieron ensombrecidas por los rumores esparcidos acerca del conflicto gravísimo que se planeaba a la revolución con malos consejeros del general Masó.

En Vegas de Pestán se ve claramente que el gobierno es una carga pesada para la columna, la capacidad política de este no está a la altura de los momentos.

Maceo, desde Vegas de Pestán, fechó una carta al General Capote advirtiéndole la marcha de la Columna Invasora para que estuviera preparado para servirle de apoyo le dice con marcada ironía:

… Los miembros del gobierno que me acompañan irán conmigo hasta que usted me haga entrega de las fuerzas que me corresponden dar al contingente, en Lugar donde se haga entrega endosaré a usted la ilustre independencia…

Ese mismo día se dirige en comunicación #68 al General Gómez informándole la llegada del Presidente y Consejo de Gobierno a Oriente y la brillante recepción que les ofrecía.

Maceo continúa dirigiendo correspondencia desde el Campamento General, las constantes visitas de personalidades hacen ardua la etapa del general en Vegas de Pestán. Entrevistas que valoran la situación creada por Bartolomé Masó, en correspondencia Maceo deja ver claramente su estado de premura por avanzar.

… Me encuentro ya en marcha para occidente aunque pasando la situación creada por la resistencia pasiva que ha venido haciendo el Mayor General ciudadano Bartolomé Masó …

Maceo en esta ocasión relata la historia del incidente provocado por Bartolomé Masó y las advertencias que por escrito le ha echo.

Encuentro en el Cuartel General

Al Cuartel General situado en Vegas de Pestán llegó el General Jesús Rabí para conferenciar con Maceo e informarle directamente de la resistencia cada día mayor que presentaba Masó a las órdenes de Gómez y Maceo. Era portador de una comunicación del General Masó de la que entregó copia a Maceo, cuyo contenido no augura nada bueno diciendo entre otras cosas lo siguiente:

...según lo dispuesto por el general en jefe las fuerzas de este segundo cuerpo quedarán a la disposición del General Maceo para extraer el contingente que debe ir a Las Villas pero como el elevado consulta ha dicho el general en jefe sobre el número que se me pide, que considero excesivo esperar la contestación para determinar el numero con que debas contribuir esa brigada, cuya orden la comunicaré para que como jefe sea usted quien ejecute y no sus coroneles porque eso sería quebrantarle la fuerza moral de querer usted estar revestido...

Agradezca la felicitación que usted me dirige por haber sido nombrado vicepresidente, cuyo puesto es renunciado por considerar que mi servicios sería más beneficioso al frente de este segundo cuerpo.

Supongo que el General Maceo le comunicaría en particular la constitución del gobierno porque oficialmente nada a dicho el general en jefe, de haberlo hecho ya lo hubiera yo enterado a usted.

Esta noticia grave de por sí unida a los comunicados por los coroneles Estrada, Masó, Parra, Zamora en el sentido de haber retenido el General Masó los oficios del General Maceo que el Coronel Tamayo le entregó con destino a esos jefes del segundo cuerpo. Obligaron al lugar teniente general a dirigir a Masó una carta enérgica comunicando a comparecer en el Cuartel General de todo lo actuado informó detalladamente al Presidente Cisneros.

Reunido el Consejo de Gobierno el 27 de octubre en Vegas de Pestán, sus miembros conocen del caso. Reflejamos la crisis de Masó como a de los hechos más discutidos y polémicos analizados después de la llegada en Vegas de Pestán.

Al siguiente día de su instancia en Vegas de Pestán, Maceo celebro una junta de generales que asistieron: José Maceo, Rabí, Bandera, Feria y Capote concurriendo también algunos otros oficiales de la alta graduación como Portuondo y Pérez Carbó.

Luego de escuchar las opiniones autorizadas de Rabí y Capote, determino Maceo ascender a general de brigada al coronel Zalvador M. Ríos y confiarle el mando de la jurisdicción de Manzanillo, nombrar al coronel Florencio Salceda, Saturnino Lora, Francisco Rabí, Victor Ramos con los que se estimaba se obtendrían positivas ventajas estableciendo la disciplina y activando las operaciones.

Los hermanos Maceos

Vegas de Pestán fue testigo de uno de los hechos más relevantes ocurridos en esta época. El abrazo de dos titanes, la despedida de los hermanos Maceos.

Antonio Maceo y José Maceo en un último abrazo que conmovió las fibras del bravo general, amante de sus hermanos en especial su cariño con José.

Los clarines del Cuartel General tocaron en la mañana formación y marcha el día 28 de octubre, en Vegas de Pestán. Era momento de separarse Antonio Maceo y José Maceo, toda aquella noche, vísperas de la partida la habían pasado en vela en continuo diálogo fraternal sobre un tema único, Cuba y sus libertades.

La república cubana establecida con sacrificios y el desinterés de sus hijos mejores sobre bases firmes y perdurables con toda la verdad de los principios revolucionarios era la única ambición de aquellos dos héroes que no conocían la fatiga y el cansancio cuando de la patria se trataba y que una vez más se coordinaba sus órdenes y consejos, sobre todo la más estrecha cooperación en todos los momentos de la actividad incansable para no dejar de romperse el enemigo y la inmediata organización del segundo contingente que estaría a las órdenes de Cabrera y Ríos; en una parte momentánea Maceo cariñosamente le recordó a Lino Dou y a Giraldo que le cuidaran a José.

Las tropas invasoras ya habían partido, en el lugar donde permanecía Antonio Maceo y José Maceo llagaban los confusos rumores de la infantería en marcha mezclada a los lejanos ecos de la banda de música que alegraban las primeras etapas de jornada rumbo a Tranquera, en dirección opuesta hacia la caballería del primer cuerpo unos 300 hombres que volvían a Santiago de Cuba y Guantánamo con José Maceo, en la carta expresada donde había estado acampando durante tres días solo quedaban casi frente a frente a caballo, acompañados de sus ayudantes escoltas respectivamente, los dos hermanos impulsados por un mismo sentimiento Antonio Maceo y José Maceo se abrazaron estrechamente.

Hermosa la vivencia donde bajo el cielo de Cauto Cristo, a lo largo de las riveras del Cauto, dos titanes hacen reflejar todas las ternuras de hombres sencillos, quienes amaron la patria.

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Fuentes

  • Archivos del Historiador del Municipio.
  • Antonio Maceo. Apuntes de una historia de su vida. Franco L. José. Edt de Ciencias Sociales_1995

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