Vocativo
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Vocativo. Función apelativa de nombres propios y algunos sustantivos por la que mediante la función fática del lenguaje se llama a alguna persona de la que se requiere su atención, para establecer una comunicación con ella. Se presentan aislados entre pausas en el curso de la cadena sonora, y en la lengua escrita estas pausas se representan mediante comas.
Sumario
Tipos
- De apelación pura: Refiere al uso del pronombre en segunda persona, o de un imperativo verbal. Al producirse la emisión en estos casos, la apelación es predominante, y el pronombre es una señal que produce una reacción en el oyente: ¡Y tú, qué miras!
- De tratamiento: Aquel de la categoría negativa o formal. Aquí, el uso del Usted para apelar al oyente es una estrategia de la cortesía formal que indica respeto o distancia hacia el oyente. También los sustantivos señor/señora son empleados como vocativos de respeto.
- Vocativo retórico o poético: Modalidad empleada para apelar a una entidad no personal o inanimada, como por ejemplo, objetos de la naturaleza: ¡Oh tú, Madre Tierra, pobre víctima de los desbordes de tus hijos!
Posición en el enunciado
Desde el punto de vista gramatical, la colocación del vocativo al principio, en medio o al final carece de importancia; sin embargo, no tiene el mismo valor expresivo. Su colocación al principio tiene el propósito de llamar la atención del oyente hacia lo que va a decirse, que generalmente es una súplica, una pregunta o un mandato. Colocado en medio o al final, se reduce casi siempre a un simple recurso enfático. Su misión en estos casos es la de reforzar la expresión, o suavizarla, según la entonación con que se emita.
Sustantivos y pronombres que realizan función de vocativo
El uso del vocativo se cumple, por lo general, a través de los nombres propios y los pronombres de segunda persona. Sin embargo, también los nombres comunes pueden cumplir esa función. Ejemplo: Abuelo, no salga tan desprotegido que hace mucho frío.
El vocativo llama la atención del receptor, por la mención de un término que lo designa, indicándole que el discurso se dirige a él. El caso más frecuente de vocativo es el del nombre de la persona, pero puede ser también la posición social o familiar y la profesión o el título.
El vocativo en los actos de habla
El emisor puede dirigirse al receptor empleando vocativos en los distintos actos de habla: saludar, dirigirse a una audiencia, ordenar, preguntar, hacer un pedido, escribir una carta, agradecer, etc., simultáneamente, el vocativo puede servir tanto para llamar la atención del receptor (vocativo de apelación pura), como para dirigirse a él con la máxima cortesía.
La coma en el vocativo
El vocativo constituye una oración unimembre, por lo que cuando aparece junto a otra oración en el contexto se utiliza la coma para aislarlo del resto de la oración. En posición inicial la coma se coloca después del vocativo, en posición intermedia se escribe entre dos comas, y cuando está al final la coma se escribe antes del vocativo. Ejemplos:
- Mamá, te espero en la casa.
- Me preocupa, Ana, tu situación académica.
- Las flores son para ti, María.
Fuentes
- García Dini, Encarnación. Algo más sobre el vocativo. Disponible en: cvc.cervantes.es
- César Barán, Hugo. Lenguaje en uso: apelativos, vocativos y deícticos. Disponible en: Monografías.com
