Palma Soriano ante José Martí (1895)
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José Martí en Palma Soriano. Suceso histórico donde narra el encuentro fatal entre el Coronel Sandoval y un grupo de patriotas enviados por Gómez, a quien acompañan a Martí y otros Jefes, falleciendo el 19 de mayo de 1895 a las dos de la tarde sobre el campo de batalla, entre Bijas y Dos Ríos en Palma Soriano el Apóstol José Martí, regando con sangre generosa de Héroe el suelo patrio para que muy pronto Cuba gozara de libertad.
Sumario
Inicio
Al estallar la guerra hubo algunos esfuerzos de querer penetrar en Palma Soriano; la Parroquia de Sta. Filomena sufrió mucho, fueron quemadas todas las casas y por último la Iglesia para evitar que la Tropa de Palma pudiera poner en ella ninguna avanzada. Lo que el Padre Ganuza pudo salvar del incendio fueron una custodia, un cáliz, una patena, copón, sello parroquial; el Libro segundo de Bautismos, el Primero de Matrimonios, el Primero de Confirmaciones y el Primero de Informaciones Extrajudiciales.
El Padre Manuel Rodríguez, nombrado sucesor del Padre Ganuza, ni llegó a tomar posesión. Este fue el final de Sta. Filomena, como parroquia separada, pues volvió desde entonces a la jurisdicción de Ntra. Sra. del Rosario.
Suceso histórico en Palma Soriano
El 12 de mayo de 1895 las fuerzas de Máximo Gómez y el Jefe Máximo de la Revolución, José Martí, acamparon en el Término de Palma Soriano, en las Ventas de Casanova.
El 15 de mayo el Comandante de la provincia, Sr. Salcedo, le comunicaba al Coronel D. José Jiménez de Sandoval: "Coronel, en las Ventas de Casanova hay un fuerte núcleo de insurrectos, mandados por Gómez, a quien acompañan Martí y otros Jefes: allí tiene usted el fajín de General".
Sandoval con su columna española sale en persecución del adversario, pero en vez de atacarle de frente, le soslaya y avanza cauteloso y trata de pernoctar en la Bija a 7 km. y medio de Dos Ríos; Gómez, pensando que Sandoval sigue adelante, trata de encontrarle para trabar combate, y deja atrás en la Bija a Martí con una pequeña escolta a fin de que no luchara y salvar su preciosa vida para la causa.
La Fuerza de Sandoval y la pequeña escolta de Martí, ignorándose, se sorprenden y se produce el encuentro fatal y luctuoso.
Muerte de José Martí
El 19 de mayo de 1895 fue de luto para la Patria Nueva; próximo a las dos de la tarde sobre el campo de batalla, entre Bijas y Dos Ríos en Palma Soriano muere Martí, regando con sangre generosa de Héroe el suelo patrio para que muy pronto Cuba gozara de libertad.
Se ignora completamente en que momentos se separó Martí del núcleo cubano y hacia donde se dirigió. Le acompaña tan sólo Ángel de la Guardia. Gómez dice en su "Diario" que "Martí lo había abandonado y se encontraba con un niño que jamás se había batido".
Castellanos, después de un minucioso estudio de las distintas opiniones mantenidas sobre la tragedia, sólo puede afirmar: "Concluyente es que mal encaminados (Martí y La Guardia), o quizá en busca de la casa de Pacheco, o bien para dar un rodeo en retirada hacia el camino que trajeron de Las Vueltas, recibieron de sorpresa una descarga", descarga hecha por la sección mandada por Sánchez de León y la que abatió a Martí e hirió el caballo de La Guardia, haciendo caer a éste, aunque ileso. El caballo de Martí se dirigió a sus filas y fue recogido por el insurrecto José Gutiérrez.
Castellanos con muy buen juicio rechaza toda posibilidad de que Martí se suicidara, tanto por su propia mano, como lanzándose con el propósito de que lo mataran, sobre los fusileros españoles. Ni se suicidó ni hizo que lo matasen; murió casual y fatalmente en la pelea, o debido a "flojera y poco brío" de los cubanos, según confiesa Gómez en su "Diario", el mismo día de la tragedia. Lo abatieron tres heridas de bala: una en el pecho, otra en el cuello y otra en el muslo derecho.
Apenas llegó Ximénez de Sandoval a Remanganaguas y dio parte telegráfico de la acción su jefe, el General Juan Salcedo, en Santiago de Cuba, procedió rápida y cautelosamente a dar sepultura a Martí en fosa común, sin dedicarle una frase, sin siquiera encerrarlo en un ataúd. Estos fueron los honores y homenajes que espontáneamente tributó Ximénez de Sandoval a su ilustre y leal adversario y hermano masón.
Noticia de la muerte
Después de llegada la noticia de la muerte de Martí a España y los gobernantes españoles se dan cuenta de la trascendencia singularísima que dicha muerte representaba, trata de sacar de ella todo el partido posible en favor de la causa española y ordenan que el cadáver de Martí sea desenterrado, embalsamado, exhibido al público y nuevamente sepultado.
A los cuatro días de muerto y tres de sepultado, el 23, se realiza su embalsamiento en Remanganaguas por el Dr. Pablo A. de Valencia y Forns, según certificación detallada que éste expide el día 26 en Santiago de Cuba. Su cuerpo, fue velado primero en el ángulo oeste (corredor de la casa de Juana Álvarez en aquel entonces) de la Plaza de Armas, y luego en el corredor de la casa que existía donde estuvo el Banco Núñez. Aquella casa era propiedad de Rogelio Sigarreta y unas veces sirvió de enfermería y otro cuartel de la Guerrilla Local.
Traslado del cadáver
Relata el escritor Faustino Pérez Morando sobre el traslado del cadáver del Apóstol a Palma Soriano en su folleto “Memorias:” "La columna al mando del Teniente Coronel Michelena debía de escoltar los restos funerarios. Todo esto es bien conocido pero he aquí el dato histórico, en Juan Barón es hecho prisionero el soldado del Ejército Libertador Juan de la Cruz Pérez, a quien llamaban "El Manso", sorprendido por el práctico de guerrillas españolas, Jerónimo Isaac, junto a un soldado de apellido Romero, llevado Cruz Pérez ante las fuerzas que conducían el cadáver de Martí, lo obligaron a conducir la mula en el cual estaba atravesado el ataúd conteniendo tan preciados restos.
Atadas las manos por detrás y sujetos al cabestro de la bestia, condujo hasta Palma Soriano los despojos de Martí. Al día siguiente tuvo que reanudar su tarea obligado por las fuerzas españolas. En San Luis el cadáver de Martí fue puesto en el vagón de ferrocarril que lo condujo a Santiago de Cuba. Cruz Pérez y sus compañeros, continuaron prisioneros".
Monumento Nacional
El 25 de mayo, llega a Palma Soriano, la columna española integrada por 700 hombres y comandados por el Teniente Coronel Michelena, con el cadáver de José Martí, lugar donde pernocta en espera de continuar la marcha al amanecer del siguiente día. Ya dentro del poblado, se encamina a la Plaza donde queda expuesto el cadáver bajo estrecha vigilancia. La permanencia temporal de los restos de José Martí en ese sitio fue tan significativa para los pobladores de la localidad, que inmediatamente después del advenimiento de la seudorepública, la calle principal y la referida Plaza comienzan a llamarla José Martí.
Precisamente en esta ciudad, en la casa de José Rafael Estrada, se encontraban almacenados en varios “huacales” las piezas del Monumento confeccionado en Italia para ser erigido en Dos Ríos, donde había caído Martí.
Las circunstancias que provocaron la permanencia de dichas piezas sin ser trasladadas y ubicadas en el sitio que correspondía, dieron la oportunidad al alcalde municipal, Valero Fernández Ochoa, de proponer a los vecinos que el Monumento fuera levantado en el centro del Parque que desde entonces llevaría su nombre.
Llegado el momento, el Ayuntamiento de la ciudad no cuenta con los fondos necesarios para las conmemoraciones de los días 19 y 20 de mayo, por lo que una comisión de vecinos reunidos en la Casa Constitucional acuerda crear comisiones para recolectar donativos y organizar las actividades; también la contribución monetaria de los Veteranos de las Guerras de Independencia aportó a dicho propósito.
Esta hermosa obra de carácter fúnebre, cuyas inscripciones en el mármol son alusiones a la vida y obra del Héroe Nacional de Cuba, fue inaugurada oficialmente el 20 de mayo de 1913, en solemne acto con la presencia del Mayor General de la Guerra de Independencia en Cuba Jesús Rabí, quien trató de rescatar el cadáver de José Martí durante el traslado hacia el Cementerio de Santa Ifigenia, también declarado Monumento Nacional, en la ciudad de Santiago de Cuba. Hoy este parque es lugar propicio para celebraciones, conmemoraciones y actividades de carácter patriótico y cultural en Palma Soriano.
José Martí presente
La presencia en Palma Soriano de los Clubes Martianos y del Consejo Municipal de la Sociedad Cultural ¨José Martí¨ deviene en necesario impulso para dar vida a sueños todavía pendientes con la huella que, por esta tierra, dejó el Héroe Nacional de Cuba y que este pueblo reconoce como suya, digna de mantener, conservar y avivar. Logia simbólica José Martí no. 18, Fundada el 27 de Agosto de 1911 Palma Soriano, Santiago de Cuba.
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Fuentes
- Castillo Amoros M, Ramirez Benitez A, García del Valle M. Donde yace el apóstol, XXXV Edición del Evento Juvenil Martiano, Universidad de las Ciencias Informáticas, Cuba. 2009.
- Periódico La Discusión 4 de junio de 1895
- Máximo Gómez: Diario de campaña, Talleres del Centro Superior Tecnológico, Ceiba del Agua, 1940, p. 335.
