Ahmed Dickinson
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Ahmed Dickinson Con su elegancia y virtuosismo, podemos decir que es uno de los grandes guitarristas clásicos contemporáneos. Tras haberse graduado con honores de primera clase, en el Instituto Superior de Arte de La Habana, no ha parado de cosechar éxitos en sus presentaciones, desde hace una década
Sumario
Síntesis biográfica
Nació en la Ciudad de La Habana el 11 de Diciembre del 1978. Desde los primeros años de su vida integro el grupo musical "Meñique" dirigido por la reconocida y admirada musicologa y pedagoga María Álvarez Rios,donde participó en numerosas actividades a lo largo y ancho del país incluyendo actuaciones en el teatro, cine , la televisión, en la Brigada Fronteriza,la Base naval de Guantánamo, Sala Universal de la FAR, Cuerpo Diplomático de la Embajada Rusa, Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio del Interior,y otros organismos. En el año 1985 incursiona en el cine en el film de coproduccion,Venezuela/Puerto Rico/Cuba llamado "Tesoro". Inicia sus estudios musicales de guitarra en 1987 en la Escuela Elemental de Música "Guillermo Tomas" en el Municipio de Guanabacoa con los maestros Fernando López y Roberto Kessel. A partir de ese momento comienza su carrera como guitarrista destacándose en varias actividades y concursos infantiles.
El 26 de Mayo del 2000 la Facultad de Música del Instituto Superior de Arte le otorga el Primer Premio "Musicalia 2000" Integra ese mismo año el Duo "Scherzo" con el estudiante del Instituto Superior de Arte Juan Pablo Oliva haciendo su debut durate la última edición de la fiesta de La Joven Guitarra en la Capital Camagüeyana, el Museo Nacional de la Música,el Instituto Superior de Arte, la Escuela Latinoamericana de Medicina,la Escuela de Altos Estudios de Hoteleria y Turismo,el Convento de San Franacisco de Asis y con mucho éxito en la VII Edición del Festival de jóvenes Concertistas "Rafael Cabrera in Memoriam" celebrado en la Ciudad de Bayamo, Monumento Nacional. Integra la Orquesta Sonantas Habaneras dirigida por el maestro Jesús Ortega. En Julio del 2000 con esta prestigosa agrupación participó en la Expo Universal celebrado en la Ciudad de Hannover Alemania . Participó en la Fiesta de Guitarra "Aires Americanos" en Septiembre del 2001,en el Teatro Amadeo Roldan como solista invitado interpretando todos los temas compuestos por Ñico Rojas,bajo la drección artística de María Elena Mendiola. Realizó duranre algunos años un trabajo en conjunto con una de las figuras más respetada y fundadora del movimiento Feeling Ñico Rojas. Participó en actividades en homenaje al Feeling en el Teatro Amadeo Roldan. Centro Cultural de España, Museo de Bellas Artes, comparte en el Teatro Nacional con figuras como la inolvidable Señora Señora Sentimiento Elena Burque, Cesar Portilo de la Luz, Angel Diaz, Ela Calvo, Omara Portuondo y nuestro querido Ñico Rojas. Curso estudios de Post grado en la prestigiosa Academia Real de Música de Londres y en estos momentos en la mundialmente reconocida Guildhall,de la misma ciudad. Es miembro de la UNEAC
Ahmed Dickinson interpreta a Ñico Rojas
Puede que parezca un poco caprichoso pero no me importa confesar que siempre, al escuchar a Ñico Rojas cantar y acompañarse sus canciones, recibí la impresión de que él lo hacía poniendo en juego dos corazones particulares –uno para cada una de aquellas expresiones–. Algo parecido me ocurría si cerraba los ojos y lo escuchaba tocar cualquiera de sus solos de guitarra: no era una guitarra sino dos; no eran sino cuatro manos -corazón aparte–. Creo que por esa razón siempre venía él al encuentro de las personas que amábamos su música trayendo, bien agarradas, en una mano la guitarra y en la otra a algún instrumentista o cantante con quien aliviaba la carga emotiva compartiendo el placer de entregar su arte. Recuerdo una joven flautista, recuerdo a más de un guitarrista, a un violinista o a la voz de oro de Pedrito Alfonso, el dulce intérprete de sus boleros en la Matanzas de los 60. No me extrañó, en una fiesta entre colegas por mi cumpleaños –allá por el 2002– que, abriendo sus ojos más de la cuenta y repitiendo mi nombre tres veces seguidas como siempre lo hizo cuando quería decirme algo importante, me pusiera delante a un jovencito alto y delgado y me dijera: Marta Marta Marta, tiene que escuchar a Ahmed Dickinson tocando mis cosas . Por encima del aspecto técnico, lo que más me impresionó de este muchacho fue la identificación con el pensamiento de Ñico, la total comprensión de ese complejo discurso que lo hace único y, como resultado, su capacidad para hacerlo inteligible. Ahmed toma la factura guitarrística de una pieza y le da a cada uno de sus componentes el justo valor, gracias al nivel de ejecución que le caracteriza. La emoción nace y va creciendo en la medida en que el músico parece decirnos constantemente: "mírenlo, miren cómo es de verdad, escuchen sus voces interiores, déjense llevar por sus melodías, retocen con el movimiento de sus bajos, deslícense por sus escalas, fíjense que el ritmo se hace más presente en la medida en que aparece sobreentendido pero, sobre todo, saboreen en el transcurso del tiempo ese goce indefinible que, únicamente, se desprende de lo cubano". Poco tiempo después, Ñico me insistió en que asistiera a un recital del joven en la Sala Caturla del Teatro Amadeo Roldán. El programa estaría dedicado íntegramente a sus piezas para guitarra. Yo no había encontrado antes a alguien que fuera capaz de asumir semejante plan. Allí estaba Ahmed, algo azorado pero seguro de lo que se había propuesto y que, todavía, sostiene: dedicar buena parte de su labor artística a la divulgación de la obra de este compositor pero -sobre todo-de este hombre. Conservo una grabación del concierto: el muchacho interpretó catorce piezas, en un esfuerzo que los presentes nos encargamos de coronar con aplausos, especialmente largos al final, donde no faltaron los "¡Viva Ñico!" La grabación a que me he referido, vino, de la mano del jovencito, acompañada del ruego del compositor para que la escuchara con la mente puesta en la necesidad de escribir unas palabras, a modo de presentación o de aval: en realidad no entendí bien pero dije que sí con los ojos cerrados y me di a la tarea de hacerlo lo mejor posible. Ahora llevo una semana escuchando el disco que la madre de Ahmed me entregó en el Museo Nacional de la Música, de parte suya, la tarde del lanzamiento del libro de Ivón Peñalver dedicado a Ñico. Obra de un músico hecho y derecho, grabada en estudio profesional, 10 de las 16 piezas escogidas para mostrar al mundo, a la luz de la más depurada técnica y de los más estrictos cánones del repertorio guitarrístico universal, los valores de la obra concebida por el compositor, son el resultado de la transcripción que realizara el propio intérprete, asesorado por aquella especie de abuelo mágico que, en tiempos de su adolescencia, luego de recibirlo día a día y permitirle escuchar cintas donde las ejecutaba en vivo, ya fuera en casa o en actuaciones informales y donde era posible comprobar el lujo que se daba de no ejecutar dos veces de modo idéntico una misma pieza, rondaba y rondaba al muchacho precisando aquí, corrigiendo allá, complacido ante tanto cariño que colmaba la sala de su casa por las mañanitas y le refrescaba el corazón. Así, como la mata de tilo que estoy ayudando a prender, creció la obra de Ahmed Dickinson dedicada a Ñico Rojas que, bellamente empaquetada, mantengo a la vista con desenfadada complacencia. Nacido en La Habana en 1978, luego de concluir en esta ciudad sus estudios musicales de nivel superior, tomó varios cursos de posgrado en Europa, desde donde ha proyectado exitosamente su trabajo profesional, siempre orientado hacia el repertorio guitarrístico cubano y latinoamericano y –muy especialmente– hacia el legado del compositor a quien, por estos días, hemos estado rindiendo tributo. La crítica ha sido, justamente, elogiosa hacia el disco Ahmed Dickinson plays Ñico Rojas, laureado, en el año 2009, con uno de los premios que otorga Cubadisco. Por encima del aspecto técnico, lo que más me impresionó de Ahmed Dickinson fue la identificación con el pensamiento de Ñico Rojas, la total comprensión de ese complejo discurso que lo hace único y, como resultado, su capacidad para hacerlo inteligible. Ahmed toma la factura guitarrística de una pieza y le da a cada uno de sus componentes el justo valor, gracias al nivel de ejecución que le caracteriza.
Premios obtenidos
- El “Best Instrumental solista” y “mejor álbum Instrumental” en Cubadisco 2009
- “Mejor canción” y “Mejor artista revelación” en el World Music Magazine, “
- “Mejor álbum” y “Mejor solista instrumental” en el Latin America Music Awards del Reino Unido.
Fuentes
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