Diferencia entre revisiones de «Basura»

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{{Desarrollo}} '''Basuras y desechos'''<br>Durante milenios las comunidades humanas han generado [[basura|basura]], pero pocos [[residuos |residuos ]]derivados de una actividad productiva socialmente organizada. <br>  
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{{Desarrollo}}{{Definición}} '''Basuras y desechos'''<br>Durante milenios las comunidades humanas han generado [[Basura|basura]], pero pocos [[Residuos|residuos derivados]] de una actividad productiva socialmente organizada. <br>  
  
 
== Introducción<br>  ==
 
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No se percibe, pues, que el amontonamiento de desperdicios en las calles generara un problema social, aunque sus consecuencias sí lo hicieran, ya que hasta el siglo XIX favoreció la propagación de grandes epidemias.  
 
No se percibe, pues, que el amontonamiento de desperdicios en las calles generara un problema social, aunque sus consecuencias sí lo hicieran, ya que hasta el siglo XIX favoreció la propagación de grandes epidemias.  
  
Con la industrialización, la sociedad ya no pudo soslayar un problema que, si bien empezó por dañar la salubridad urbana, en pocos decenios acabó por afectar todo el medio ambiente y cuya solución requiere técnicas avanzadas, ya sea para eliminar los residuos, ya sea para reducir su volumen. <br>Los residuos son aquellas [[sustancias|sustancias]] que se consideran inservibles y que, por lo tanto, se desea eliminar. La eliminación de los residuos exige clasificarlos en grupos con características similares. El origen por sector o subsector económico da una primera indicación al respecto; así, por ejemplo, los residuos sólidos urbanos (RSU) y las aguas negras urbanas (procedentes sobre todo del sector de los servicios y del consumo humano) pueden ser eliminados por vertido o mediante el empleo de tratamientos relativamente uniformes, mientras que los residuos y efluentes de la industria no asimilables a los urbanos exigen el empleo de métodos más específicos.  
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Con la industrialización, la sociedad ya no pudo soslayar un problema que, si bien empezó por dañar la salubridad urbana, en pocos decenios acabó por afectar todo el medio ambiente y cuya solución requiere técnicas avanzadas, ya sea para eliminar los residuos, ya sea para reducir su volumen. <br>Los residuos son aquellas [[Sustancias|sustancias]] que se consideran inservibles y que, por lo tanto, se desea eliminar. La eliminación de los residuos exige clasificarlos en grupos con características similares. El origen por sector o subsector económico da una primera indicación al respecto; así, por ejemplo, los residuos sólidos urbanos (RSU) y las aguas negras urbanas (procedentes sobre todo del sector de los servicios y del consumo humano) pueden ser eliminados por vertido o mediante el empleo de tratamientos relativamente uniformes, mientras que los residuos y efluentes de la industria no asimilables a los urbanos exigen el empleo de métodos más específicos.  
  
Residuos sólidos urbanos <br>Los residuos sólidos urbanos están constituidos por las basuras, tanto domésticas como de otro tipo, generadas en los hogares y en las empresas de servicios de ciudades y pueblos. La cantidad y calidad de los residuos sólidos urbanos generados depende de los hábitos de consumo del lugar en que se producen. En los llamados países desarrollados se genera una mayor cantidad de basura por habitante, sobre todo de papel, plástico, vidrio y envases que contienen materias combustibles e inertes, con muy baja proporción de [[materia|materia]] [[orgánica|orgánica]]. <br>Residuos tóxicos <br>La denominación de residuos tóxicos engloba tanto las sustancias más mortíferas y los metales pesados que actúan por acumulación en los seres vivos, como los compuestos orgánicos que presentan grados distintos de toxicidad. La metalurgia y la química concentran los principales riesgos de dispersión de tales sustancias (cianuros, disolventes, pinturas, aceites minerales, medicamentos, metales pesados en baterías, pilas o fluorescentes, etc.). Para evitar que se viertan en cualquier sitio o se mezclen con los residuos urbanos, dado su uso generalizado en todo tipo de pequeñas empresas y, en parte, también en los hogares, se potencia la recogida selectiva y, sobre todo, se organizan servicios de recogida para la industria, complementados por medidas administrativas. <br>Residuos radiactivos <br>Los residuos radiactivos, sean tecnológicos (utensilios y objetos contaminados) o de proceso (combustible, agua y demás sustancias que intervienen en el proceso considerado), provienen principalmente de todas las fases del ciclo del combustible nuclear, pero también del desmantelamiento de las centrales y de actividades no energéticas (militares, médicas, etc.). <br>Se puede distinguir entre residuos de baja, media y alta radiactividad. Generalmente, como suelen coincidir actividad baja y media con vida corta (años o decenios) y actividad alta con vida larga (miles de años), el problema más importante en cuanto a los riesgos potenciales para la salud los plantean los residuos de este último grupo. La recogida de los residuos se lleva a cabo con la ayuda de trenes, camiones de plataforma o barcazas, encerrándolos en blindajes radiobiológicos. Para eliminarlos se recurre en ocasiones al reciclado o reprocesamiento del uranio y del plutonio (extracción físico- química con la ayuda de disolventes), al relleno de minas abandonadas con el estéril de baja actividad de minas y fábricas, y a su concentración o vitrificación para depositarlos definitivamente en cementerios nucleares. <br>El tratamiento de los residuos está condicionado por el grado de dispersión territorial de estos últimos y por factores técnicos y económicos. Así, la eliminación de tierras donde se han esparcido sustancias altamente tóxicas o radiactivas es un procedimiento al que sólo se recurre en situaciones extremas.<br>El primer problema que debe resolverse en lo que respecta a los residuos es el de recogida y transporte. En las ciudades, junto al modelo más extendido (contenedores públicos, camiones hasta los centros de transferencia cercanos a la ciudad, trailer para el transporte a las plantas o vertederos), aparecen sistemas automáticos que simplifican la recogida, como la concentración de basuras en depósitos de barrio mediante redes de conducción neumática desde las viviendas.<br>En general, la eliminación de los residuos consiste en convertirlos en materias relativamente inocuas para la vida y la salud (por estabilización, mineralización, aislamiento, dilución) y, si cabe, en aprovecharlos para obtener energía o reintroducirlos en el ciclo productivo mediante el reciclaje.  
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Residuos sólidos urbanos <br>Los residuos sólidos urbanos están constituidos por las basuras, tanto domésticas como de otro tipo, generadas en los hogares y en las empresas de servicios de ciudades y pueblos. La cantidad y calidad de los residuos sólidos urbanos generados depende de los hábitos de consumo del lugar en que se producen. En los llamados países desarrollados se genera una mayor cantidad de basura por habitante, sobre todo de papel, plástico, vidrio y envases que contienen materias combustibles e inertes, con muy baja proporción de [[Materia|materia]] [[Orgánica|orgánica]]. <br>Residuos tóxicos <br>La denominación de residuos tóxicos engloba tanto las sustancias más mortíferas y los metales pesados que actúan por acumulación en los seres vivos, como los compuestos orgánicos que presentan grados distintos de toxicidad. La metalurgia y la química concentran los principales riesgos de dispersión de tales sustancias (cianuros, disolventes, pinturas, aceites minerales, medicamentos, metales pesados en baterías, pilas o fluorescentes, etc.). Para evitar que se viertan en cualquier sitio o se mezclen con los residuos urbanos, dado su uso generalizado en todo tipo de pequeñas empresas y, en parte, también en los hogares, se potencia la recogida selectiva y, sobre todo, se organizan servicios de recogida para la industria, complementados por medidas administrativas. <br>Residuos radiactivos <br>Los residuos radiactivos, sean tecnológicos (utensilios y objetos contaminados) o de proceso (combustible, agua y demás sustancias que intervienen en el proceso considerado), provienen principalmente de todas las fases del ciclo del combustible nuclear, pero también del desmantelamiento de las centrales y de actividades no energéticas (militares, médicas, etc.). <br>Se puede distinguir entre residuos de baja, media y alta radiactividad. Generalmente, como suelen coincidir actividad baja y media con vida corta (años o decenios) y actividad alta con vida larga (miles de años), el problema más importante en cuanto a los riesgos potenciales para la salud los plantean los residuos de este último grupo. La recogida de los residuos se lleva a cabo con la ayuda de trenes, camiones de plataforma o barcazas, encerrándolos en blindajes radiobiológicos. Para eliminarlos se recurre en ocasiones al reciclado o reprocesamiento del uranio y del plutonio (extracción físico- química con la ayuda de disolventes), al relleno de minas abandonadas con el estéril de baja actividad de minas y fábricas, y a su concentración o vitrificación para depositarlos definitivamente en cementerios nucleares. <br>El tratamiento de los residuos está condicionado por el grado de dispersión territorial de estos últimos y por factores técnicos y económicos. Así, la eliminación de tierras donde se han esparcido sustancias altamente tóxicas o radiactivas es un procedimiento al que sólo se recurre en situaciones extremas.<br>El primer problema que debe resolverse en lo que respecta a los residuos es el de recogida y transporte. En las ciudades, junto al modelo más extendido (contenedores públicos, camiones hasta los centros de transferencia cercanos a la ciudad, trailer para el transporte a las plantas o vertederos), aparecen sistemas automáticos que simplifican la recogida, como la concentración de basuras en depósitos de barrio mediante redes de conducción neumática desde las viviendas.<br>En general, la eliminación de los residuos consiste en convertirlos en materias relativamente inocuas para la vida y la salud (por estabilización, mineralización, aislamiento, dilución) y, si cabe, en aprovecharlos para obtener energía o reintroducirlos en el ciclo productivo mediante el reciclaje.  
  
 
Se acostumbra a verter y diluir en el mar las salmueras, si bien este procedimiento es perjudicial cuando se trata de residuos tóxicos. Con escombros y ciertos residuos mineros se rellenan minas y hoyos o se forman montículos y colinas (escombreras), lo que ha dado pie a una toda una técnica de rehabilitación de paisajes degradados. Para los residuos radiactivos de baja intensidad, también se aplica un método parecido, en el que se extreman las precauciones y los controles. Para los de alta intensidad, la única solución hallada es su almacenamiento, en contenedores especiales, en el fondo de minas excavadas en terrenos estables e impermeables. En el caso de la basura urbana, el vertedero tradicional, donde los residuos se mineralizan con el paso del tiempo, no es una buena solución (contaminación de aguas, incendios provocados por la autocombustión del biogás). El vertedero controlado, en el que se impermeabiliza la excavación, existe en dos versiones, según que los residuos se compacten y depositen en capas sucesivas recubiertas por tierra, o se trituren. En la primera versión, la fermentación es anaerobia, tarda bastantes años en completarse y hay que prever la evacuación del biogás o su aprovechamiento. En la segunda, la degradación de la materia orgánica es en su mayoría aerobia, con poca emisión de gas, y más breve.<br> La combustión a una temperatura de 1.000 °C a 1.300 °C de muchos tipos de residuos permite reducir su volumen a un tercio o menos, así como obtener energía térmica o eléctrica. Pero produce gases y polvo que se propagan en forma de aire y contaminación atmosférica, y escorias y aguas de enfriamiento con notable presencia de metales. <br>Pirólisis La pirólisis es en esencia una destilación a una temperatura de 1.000 °C a 2.000 °C que descompone los residuos en gases (CO, CO2, H2, N2), líquidos (agua, alquitrán) y sólidos carbonosos, en proporciones parecidas. Su ventaja radica en que los gases y sólidos residuales son buenos combustibles. <br><br>El vertido, como método adecuado de eliminación de residuos, sigue dos procedimientos opuestos. El primero, habitual para los sólidos, consiste en concentrar y aislar el residuo, para no perder espacio útil y, eventualmente, proteger el paisaje (escombreras, relleno de minas u hoyos con escombros y estéril), o para dejar que el residuo se mineralice (vertederos de residuos orgánicos, pozos negros) o se descomponga o estabilice (cementerios de residuos tóxicos y nucleares).  
 
Se acostumbra a verter y diluir en el mar las salmueras, si bien este procedimiento es perjudicial cuando se trata de residuos tóxicos. Con escombros y ciertos residuos mineros se rellenan minas y hoyos o se forman montículos y colinas (escombreras), lo que ha dado pie a una toda una técnica de rehabilitación de paisajes degradados. Para los residuos radiactivos de baja intensidad, también se aplica un método parecido, en el que se extreman las precauciones y los controles. Para los de alta intensidad, la única solución hallada es su almacenamiento, en contenedores especiales, en el fondo de minas excavadas en terrenos estables e impermeables. En el caso de la basura urbana, el vertedero tradicional, donde los residuos se mineralizan con el paso del tiempo, no es una buena solución (contaminación de aguas, incendios provocados por la autocombustión del biogás). El vertedero controlado, en el que se impermeabiliza la excavación, existe en dos versiones, según que los residuos se compacten y depositen en capas sucesivas recubiertas por tierra, o se trituren. En la primera versión, la fermentación es anaerobia, tarda bastantes años en completarse y hay que prever la evacuación del biogás o su aprovechamiento. En la segunda, la degradación de la materia orgánica es en su mayoría aerobia, con poca emisión de gas, y más breve.<br> La combustión a una temperatura de 1.000 °C a 1.300 °C de muchos tipos de residuos permite reducir su volumen a un tercio o menos, así como obtener energía térmica o eléctrica. Pero produce gases y polvo que se propagan en forma de aire y contaminación atmosférica, y escorias y aguas de enfriamiento con notable presencia de metales. <br>Pirólisis La pirólisis es en esencia una destilación a una temperatura de 1.000 °C a 2.000 °C que descompone los residuos en gases (CO, CO2, H2, N2), líquidos (agua, alquitrán) y sólidos carbonosos, en proporciones parecidas. Su ventaja radica en que los gases y sólidos residuales son buenos combustibles. <br><br>El vertido, como método adecuado de eliminación de residuos, sigue dos procedimientos opuestos. El primero, habitual para los sólidos, consiste en concentrar y aislar el residuo, para no perder espacio útil y, eventualmente, proteger el paisaje (escombreras, relleno de minas u hoyos con escombros y estéril), o para dejar que el residuo se mineralice (vertederos de residuos orgánicos, pozos negros) o se descomponga o estabilice (cementerios de residuos tóxicos y nucleares).  

Revisión del 11:21 25 mar 2011

Basura
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Basuras y desechos
Durante milenios las comunidades humanas han generado basura, pero pocos residuos derivados de una actividad productiva socialmente organizada.

Introducción

No se percibe, pues, que el amontonamiento de desperdicios en las calles generara un problema social, aunque sus consecuencias sí lo hicieran, ya que hasta el siglo XIX favoreció la propagación de grandes epidemias.

Con la industrialización, la sociedad ya no pudo soslayar un problema que, si bien empezó por dañar la salubridad urbana, en pocos decenios acabó por afectar todo el medio ambiente y cuya solución requiere técnicas avanzadas, ya sea para eliminar los residuos, ya sea para reducir su volumen.
Los residuos son aquellas sustancias que se consideran inservibles y que, por lo tanto, se desea eliminar. La eliminación de los residuos exige clasificarlos en grupos con características similares. El origen por sector o subsector económico da una primera indicación al respecto; así, por ejemplo, los residuos sólidos urbanos (RSU) y las aguas negras urbanas (procedentes sobre todo del sector de los servicios y del consumo humano) pueden ser eliminados por vertido o mediante el empleo de tratamientos relativamente uniformes, mientras que los residuos y efluentes de la industria no asimilables a los urbanos exigen el empleo de métodos más específicos.

Residuos sólidos urbanos
Los residuos sólidos urbanos están constituidos por las basuras, tanto domésticas como de otro tipo, generadas en los hogares y en las empresas de servicios de ciudades y pueblos. La cantidad y calidad de los residuos sólidos urbanos generados depende de los hábitos de consumo del lugar en que se producen. En los llamados países desarrollados se genera una mayor cantidad de basura por habitante, sobre todo de papel, plástico, vidrio y envases que contienen materias combustibles e inertes, con muy baja proporción de materia orgánica.
Residuos tóxicos
La denominación de residuos tóxicos engloba tanto las sustancias más mortíferas y los metales pesados que actúan por acumulación en los seres vivos, como los compuestos orgánicos que presentan grados distintos de toxicidad. La metalurgia y la química concentran los principales riesgos de dispersión de tales sustancias (cianuros, disolventes, pinturas, aceites minerales, medicamentos, metales pesados en baterías, pilas o fluorescentes, etc.). Para evitar que se viertan en cualquier sitio o se mezclen con los residuos urbanos, dado su uso generalizado en todo tipo de pequeñas empresas y, en parte, también en los hogares, se potencia la recogida selectiva y, sobre todo, se organizan servicios de recogida para la industria, complementados por medidas administrativas.
Residuos radiactivos
Los residuos radiactivos, sean tecnológicos (utensilios y objetos contaminados) o de proceso (combustible, agua y demás sustancias que intervienen en el proceso considerado), provienen principalmente de todas las fases del ciclo del combustible nuclear, pero también del desmantelamiento de las centrales y de actividades no energéticas (militares, médicas, etc.).
Se puede distinguir entre residuos de baja, media y alta radiactividad. Generalmente, como suelen coincidir actividad baja y media con vida corta (años o decenios) y actividad alta con vida larga (miles de años), el problema más importante en cuanto a los riesgos potenciales para la salud los plantean los residuos de este último grupo. La recogida de los residuos se lleva a cabo con la ayuda de trenes, camiones de plataforma o barcazas, encerrándolos en blindajes radiobiológicos. Para eliminarlos se recurre en ocasiones al reciclado o reprocesamiento del uranio y del plutonio (extracción físico- química con la ayuda de disolventes), al relleno de minas abandonadas con el estéril de baja actividad de minas y fábricas, y a su concentración o vitrificación para depositarlos definitivamente en cementerios nucleares.
El tratamiento de los residuos está condicionado por el grado de dispersión territorial de estos últimos y por factores técnicos y económicos. Así, la eliminación de tierras donde se han esparcido sustancias altamente tóxicas o radiactivas es un procedimiento al que sólo se recurre en situaciones extremas.
El primer problema que debe resolverse en lo que respecta a los residuos es el de recogida y transporte. En las ciudades, junto al modelo más extendido (contenedores públicos, camiones hasta los centros de transferencia cercanos a la ciudad, trailer para el transporte a las plantas o vertederos), aparecen sistemas automáticos que simplifican la recogida, como la concentración de basuras en depósitos de barrio mediante redes de conducción neumática desde las viviendas.
En general, la eliminación de los residuos consiste en convertirlos en materias relativamente inocuas para la vida y la salud (por estabilización, mineralización, aislamiento, dilución) y, si cabe, en aprovecharlos para obtener energía o reintroducirlos en el ciclo productivo mediante el reciclaje.

Se acostumbra a verter y diluir en el mar las salmueras, si bien este procedimiento es perjudicial cuando se trata de residuos tóxicos. Con escombros y ciertos residuos mineros se rellenan minas y hoyos o se forman montículos y colinas (escombreras), lo que ha dado pie a una toda una técnica de rehabilitación de paisajes degradados. Para los residuos radiactivos de baja intensidad, también se aplica un método parecido, en el que se extreman las precauciones y los controles. Para los de alta intensidad, la única solución hallada es su almacenamiento, en contenedores especiales, en el fondo de minas excavadas en terrenos estables e impermeables. En el caso de la basura urbana, el vertedero tradicional, donde los residuos se mineralizan con el paso del tiempo, no es una buena solución (contaminación de aguas, incendios provocados por la autocombustión del biogás). El vertedero controlado, en el que se impermeabiliza la excavación, existe en dos versiones, según que los residuos se compacten y depositen en capas sucesivas recubiertas por tierra, o se trituren. En la primera versión, la fermentación es anaerobia, tarda bastantes años en completarse y hay que prever la evacuación del biogás o su aprovechamiento. En la segunda, la degradación de la materia orgánica es en su mayoría aerobia, con poca emisión de gas, y más breve.
La combustión a una temperatura de 1.000 °C a 1.300 °C de muchos tipos de residuos permite reducir su volumen a un tercio o menos, así como obtener energía térmica o eléctrica. Pero produce gases y polvo que se propagan en forma de aire y contaminación atmosférica, y escorias y aguas de enfriamiento con notable presencia de metales.
Pirólisis La pirólisis es en esencia una destilación a una temperatura de 1.000 °C a 2.000 °C que descompone los residuos en gases (CO, CO2, H2, N2), líquidos (agua, alquitrán) y sólidos carbonosos, en proporciones parecidas. Su ventaja radica en que los gases y sólidos residuales son buenos combustibles.

El vertido, como método adecuado de eliminación de residuos, sigue dos procedimientos opuestos. El primero, habitual para los sólidos, consiste en concentrar y aislar el residuo, para no perder espacio útil y, eventualmente, proteger el paisaje (escombreras, relleno de minas u hoyos con escombros y estéril), o para dejar que el residuo se mineralice (vertederos de residuos orgánicos, pozos negros) o se descomponga o estabilice (cementerios de residuos tóxicos y nucleares).

El segundo procedimiento, aplicado a líquidos y gases, consiste en diluir o dispersar el contaminante en un medio que ya lo contenga, y en donde su presencia pueda ser regulada por sistemas naturales (vertido de salmueras en el mar, de dióxido de carbono y otros gases en el aire), o en dispersarlo en unas condiciones que permitan la autodepuración del medio receptor (vertido de aguas fecales, previo tratamiento primario, en masas hídricas de volumen o caudal adecuado). En general, se tiende a reducir los vertidos, incluso si se efectúan correctamente, por problemas de espacio (vertederos) o por necesidad de aprovechar los subproductos que se obtienen de los residuos.

Vertedero controlado
El vertedero controlado es una instalación utilizada para aislar residuos sólidos urbanos o lodos de depuración, y garantizar su fermentación y mineralización naturales con el mínimo de consecuencias negativas para el entorno.

Vertedero incontrolado
El vertedero tradicional, donde se echan todo tipo de residuos en cualquier excavación u hondonada, asegura la mineralización final de la basura orgánica a un alto coste, en cuanto a dispersión de contaminantes, suciedad y riesgo de incendios.

Se trata de procesos muy apropiados para residuos industriales. En el primero, lo más común es emplear hipocloritos, bisulfitos, etc. en reacciones de oxidación- reducción, así como ácidos y bases que regulan el pH, para que precipiten hidróxidos y se formen otros compuestos estables. En el tratamiento bioquímico hay que seleccionar microorganismos que elaboren enzimas específicos, para descomponer los desechos en productos más inocuos.
Tratamiento químico
El tratamiento químico para la eliminación de residuos, sin buscar su aprovechamiento energético o de otro tipo, se aplica a sólidos y líquidos procedentes de la industria, así como en la depuración de gases.

Para varios tipos de aguas químicas, se efectúa una oxidación autotérmica en un reactor; con soluciones residuales de compuestos metálicos, se utilizan ácidos, bisulfitos o hipocloratos, con el fin de regular el pH alrededor de 8,5 y obtener la precipitación de hidróxidos y otras sustancias no tóxicas, como cianatos a partir de los cianuros.

Tratamiento bioquímico
La fermentación espontánea de la basura orgánica es el primer proceso, y el más extendido, de tratamiento bioquímico para la eliminación de residuos.

Esta coincidencia se produce también con las nuevas técnicas de biolixiviación por bacterias, empleadas para recuperar metales valiosos, cuyo campo de aplicación se extiende, además, a la minería. La selección de microorganismos especializados en la elaboración de enzimas que descompongan compuestos orgánicos como los hidrocarburos se ha experimentado ya en vertidos de petróleo en el mar.



Fuente

  • Reforma Educativa en Marcha, Ministerio de Educación, Dirección Nacional de Educación, San Salvador, El Salvador, C.A. 1996.
  • Comisión Nacional del Medio Ambiente, Instituto Nacional de Administración

Pública y Secretaría Ejecutiva de la Presidencia de la República. -CONAMA, INAP-
“Modelo de un Sistema de Gestión Ambiental Municipal en 20 municipalidades de
la IX Región de Chile”. Guatemala, 1997-09-14