Centenario de los Sitios
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Centenario de los Sitios conmemoración del acontecimiento histórico de los Sitios de Zaragoza por las tropas de Napoleón (1808-9), que, cien años después, en 1908, brinda un excelente marco para grandes actos organizados por las fuerzas vivas de la ciudad, muy especialmente a la burguesía.
Características
Conmemoración del acontecimiento histórico de los Sitios de Zaragoza por las tropas de Napoleón (1808-9), que, cien años después, en 1908, brinda un excelente marco para grandes actos organizados por las fuerzas vivas de la ciudad, muy especialmente a la burguesía. Esta clase social vive ahora una interesante generación: la del período 1898-1908 (que coincide cronológicamente con la llamada Regeneracionismo del 98), conservadora, pero por vez primera regionalista; esencialmente mercantil e industrial, cuenta también con numerosas profesiones liberales, casi siempre importantes propietarios agrícolas; particularmente emprendedora, ha orientado sus intereses rurales hacia otros más modernos: la remolacha azucarera permite las primeras instalaciones industriales serias de la región, y la red de harineras, entre otros.
Asociado a esto y al comercio, se da en Zaragoza un pequeño despegue industrial a principios de siglo, muy en la línea del de otras ciudades agrarias españolas (Valladolid); presenta caracteres muy variados: construcción de centrales eléctricas y ferrocarriles secundarios, industrias de transformados metálicos ligados a las azucareras y al ferrocarril; aparición o planteamiento de la banca de alcance regional en torno a 1908: Banco de Aragón (1909), Zaragozano (1910). Por estas fechas se ultiman las obras del Canal de Aragón y Cataluña; Zaragoza ha superado los 100.000 habitantes y crece con sus ensanches y nuevas construcciones en estilo modernista. En este ambiente propicio se conmemora la gloriosa efemérides local y se aprovecha ésta para el reforzamiento de la conciencia regional, la «puesta de largo» de la ciudad, la superación de viejos tópicos, y para el fortalecimiento de los crecientes lazos económicos, principalmente con Francia.
La iniciativa de estas celebraciones surge de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País y del Ayuntamiento en 1902, formándose a tal efecto la Real Junta del I Centenario de los Sitios de Zaragoza; se abre una suscripción pública, pero, según reconoce uno de sus miembros, «nada se hizo de positivo y real» hasta que el Estado concedió en 1907 una subvención de 2.500.000 pesetas por intermedio del senador aragonés Segismundo Moret. Además de la Exposición Hispano-Francesa, se dieron con motivo del Centenario muchas otras actividades resumidas a continuación: Congresos (se celebran, entre otros los de Exportación, Agrícola Nacional, Internacional de Turismo, Económico de Amigos del País, Histórico Internacional de la Guerra de Independencia, Pedagógico, de la Buena Prensa, Mariano Nacional, etc.), actos de diversa índole (traslado de los restos de Palafox y otros combatientes, visita de Alfonso XIII y Maura, fiestas y bailes populares y de alta sociedad, concesión a Zaragoza del título de Inmortal -decreto del 14-VI-1908-, etc.), publicaciones y escritos innumerables, sobre todo los referidos a los Sitios (edición del Diario manuscrito de Faustino Casamayor y Ceballos, folletos, amplias reseñas en los periódicos de la época...). Las realizaciones urbanísticas constituyen el capítulo de mayor trascendencia, y casi todas sus manifestaciones han llegado, hasta hoy: los edificios del actual Museo Provincial (obra de Ricardo Magdalena Tabuenca y Julio Bravo Folch), de la Escuela de Artes y Oficios (Félix Navarro Pérez), La Caridad (Luis de la Figuera y Lezcano y Los Yarza), y los monumentos a los Sitios (A. Querol), a Agustina de Aragón (M. Benlliure), a la Exposición (Hnos. Oslé), y obeliscos y gran número de lápidas en Zaragoza y otras localidades de Aragón.
Fuentes
- Artículo sobre Centenario de los Sitios publicado en la Gran Enciclopedia Aragonesa. Consultado el 20 de Junio de 2022. (Licencia Creative Commons)
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