Ciclones extratropicales

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Ciclones extratropicales.
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Sistema extratropical sobre los Estados Unidos.

Ciclones extratropicales: Son un sistema atmosférico cuya fuente primaria de energía es el gradiente horizontal de la temperatura. Los ciclones extratropicales también llamados ciclones de latitudes medias o tormentas baroclínicas, son sistemas de baja presión asociados a frentes fríos, cálidos o ocluídos. Los ciclones extratropicales son un fenómeno diario que, junto con los anticiclones, mueven el tiempo sobre muchas partes de la Tierra, produciendo al menos nubosidad y tormentas.


Terminología

Los ciclones extratropicales pueden abarcar una clase de tormentas con muchos nombres. A pesar de que a veces se refiere a ellos como "ciclones", esto es impreciso; ciclón se aplica a muchos tipos de zonas de baja presión. La acepción extratropical significa que este tipo de ciclones generalmente ocurre fuera de los trópicos, en las latitudes medias de la Tierra. El término de ciclones de latitudes medias puede ser utilizado debido a que se forman después de los ciclones tropicales, si ha ocurrido una transición extratropical. Los meteorólogos y el público en general suele describirlos como "depresiones" o "bajas". También pueden usarse términos como frontal de ciclón, depresión frontal, frontal baja, baja extratropical, bajas no tropicales, y bajas híbridas. Los ciclones extratropicales se clasifican principalmente como baroclínicos, porque se forman a lo largo de zonas de temperatura y gradiente de punto de rocío conocidas como zonas frontales. Pueden convertirse en barotrópicas tardíamente en su ciclo de vida, cuando la distribución de calor en todo el ciclón se convierte en bastante uniforme con su radio.

Formación

Los ciclones extratropicales consisten en centros de bajas presiones similares en apariencia a los ciclones tropicales o polares, pero que se forman en una franja de latitudes comprendida entre los 35º y los 70º tanto al norte como al sur del Ecuador. A diferencia de los ciclones tropicales, que toman su energía del mar, en el caso de los ciclones extratropicales la energía proviene del choque de masas de aire a distinta temperatura en la atmósfera. El fenómeno de formación de este tipo de eventos climáticos, identificado como ciclogénesis, se produce cuando dos masas de aire con gran contraste de temperaturas, una de aire polar muy frío al norte y otra de aire húmedo y cálido al sur chocan, generando fuertes vientos y abundantes precipitaciones. Si este proceso se produce en un corto periodo de tiempo, el fenómeno se denomina ciclogénesis explosiva. Cuando este tipo de fenómenos se forman en el Atlántico Norte y afectan principalmente a Europa Noroccidental, suelen denominarse «tormentas invernales». Su época de máxima actividad se centra en los meses de diciembre a febrero, cuando el océano todavía se mantiene cálido y entra en contacto con masas de aire polar.

Evolución del ciclón

Los ciclones extratropicales puede traer un clima templado con un poco de lluvia y vientos en la superficie de 15-30 km/h (10-20 mph), o puede ser frío y peligroso con lluvias torrenciales y vientos superiores a 119 km/h (74 mph), (a veces conocido como tormentas de viento en Europa). La banda de precipitación que se asocia con el frente cálido suele ser extensa. En los ciclones extratropicales maduros, un área conocida como la coma la cabeza en la periferia noroeste de la superficie bajo puede ser una región de fuertes precipitaciones, tormentas son frecuentes. Los ciclones tienden a moverse a lo largo de un camino predecible a un volumen moderado ritmo de avance. Durante otoño, invierno y primavera, la atmósfera a través de los continentes puede ser bastante frío a través de la profundidad de la troposfera a causa nevadas.

Características

Los ciclones tropicales, a diferencia de los extratropicales, no manifiestan un gradiente horizontal de temperaturas tan sustancial en todo el diámetro de la tormenta, a nivel de la superficie, y sus vientos son generados por la liberación de energía durante la formación de las nubes y la lluvia, que son a su vez el producto del aire tropical, cálido y húmedo, que asciende desde la superficie. Los vientos más fuertes en un ciclón tropical ocurren cerca de la superficie de la tierra, mientras que en un ciclón extratropical los vientos más fuertes ocurren cerca de la tropopausa (a una altura de 12 km. Estas diferencias surgen como consecuencia de que el ciclón tropical tiene un "núcleo cálido" en la tropósfera (debajo de la tropopausa), mientras que el ciclón extratropical tiene un núcleo frío en la tropósfera y cálido en la estratósfera (arriba de la tropopausa). La expresión "núcleo cálido" significa que el centro del ciclón está más cálido que el medio-ambiente en la periferia de la tormenta, en la misma superficie isobárica. Cuando los ciclones tropicales se mueven hacia el norte y recurvan hacia el este, usualmente se transforman en ciclones extratropicales. También, un ciclón extratropical pierde sus características frontales ocasionalmente, al desarrollar un centro fuerte de convección, y se convierte propiamente en un ciclón tropical. Este último proceso es común en el norte del Atlántico y en el noroeste del Pacífico. La transformación de un ciclón tropical a un ciclón extratropical (y viceversa) es actualmente uno de los problemas más difíciles del pronóstico meteorológico. En un ciclón extratropical, los vientos más fuertes se distribuyen de forma irregular por la parte exterior del sistema, lo que los diferencia radicalmente de los ciclones tropicales.

Efectos

Los ciclones extratropicales puede traer un clima templado con un poco de lluvia y vientos en la superficie de 15-30 km/h (10-20 mph), o puede ser frío y peligroso con lluvias torrenciales y vientos superiores a 119 km/h (74 mph), (a veces conocido como tormentas de viento en Europa). La banda de precipitación que se asocia con el frente cálido suele ser extensa. En los ciclones extratropicales maduros, un área conocida como la coma la cabeza en la periferia noroeste de la superficie bajo puede ser una región de fuertes precipitaciones, tormentas son frecuentes. Los ciclones tienden a moverse a lo largo de un camino predecible a un volumen moderado ritmo de avance. Durante otoño, invierno y primavera, la atmósfera a través de los continentes puede ser bastante frío a través de la profundidad de la troposfera a causa nevadas.

Condiciones meteorológicas adversas

La característica principal de estas formaciones es la dispersión en los valores punta de la velocidad del viento, repartidos por la zona exterior de la perturbación. Esto implica que los vientos más fuertes se distribuyen irregularmente por la parte exterior del sistema, lo que los diferencia radicalmente de los ciclones tropicales. Las líneas de turbonada, o bandas sólidas de Tormenta eléctrica fuertes, pueden formarse por delante de los frentes fríos debido a la presencia de humedad atmosférica significativa y grandes divergencias en las capas altas de ésta, lo que trae granizo y fuertes vientos. Cuando existe una significativa cizalladura del viento direccional en la atmósfera por delante de un frente frío en la presencia de una fuerte corriente en chorro en niveles altos, es posible la formación del tornados. Aunque los tornados se pueden formar en cualquier parte de la Tierra, el mayor número se producen en las Grandes Llanuras en Estados Unidos, porque los vientos que bajan de las Montañas Rocosas que están en orientación norte-sur, que puede formar una línea seca también llamada línea de punto de rocío, o frente de Marfa (Dry line), ayudan a la formación de éstos fenómenos en cualquier intensidad.

Ciclones históricos

En España el precedente más próximo se remonta a 1984, en el que el Huracán Hortensia alcanzó las costas de Galicia, si bien con una magnitud muy inferior a la desarrollada por Klaus, ya que en su caso se trataba de los restos de un ciclón tropical debilitado que alcanzó la Península en forma de borrasca. En el centro de Europa se recuerdan todavía los efectos de los ciclones Lothar y Martin, acaecidos entre el 26 y el 28 de diciembre de 1999, que dejaron severos efectos en Francia, Suiza y Alemania. También el 18 de enero de 2007 se dejaron sentir los efectos del Huracán Kyrill. Estos eventos tuvieron una magnitud similar a la del Ciclón extratropical Klaus, aunque su trayectoria fue la típica para este tipo de eventos. Los nombres de los ciclones extratropicales son asignados en Europa por el Instituto Meteorológico de la Universidad Libre de Berlín. La práctica está inspirada en el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, que asigna los nombres de huracanes y tifones, y que se inició durante la Segunda Guerra Mundial.

Efectos en Cuba

Aunque no es frecuente la afectación de estos fenómenos en Cuba, su impacto a la Isla ha sido en forma bajas extratropicales en la etapa invernal. Los sistemas de bajas presiones se forman sobre los Estados Unidos en cada temporada de invierno. En ocasiones, estas bajas logran una extensión considerable, de varios cientos de kilómetros en la escala horizontal, y la circulación ciclónica alcanza las aguas del Golfo de México, o bien se desarrollan en dicha área. Allí los vientos se aceleran. Las marejadas que una baja extratropical puede causar en el Golfo de México se propagan y no tardan mucho en llegar a la costa norte occidental. Así sucedió en marzo de 1983, febrero de 1992 y marzo de 1993 donde grandes olas rompieron con vehemencia en el litoral y provocaron serias inundaciones en los tramos más bajos. Estas promueven en Cuba fuertes vientos del oeste al noroeste, pero también de componente sur, con velocidades superiores a 50 kilómetros por hora, los cuales afectan con más frecuencia en el período poco lluvioso, el que inicia en noviembre y termina en abril. Ocasionan inundaciones costeras en la parte sur del archipiélago. Las líneas de Tormenta eléctrica que se forman delante de los frentes fríos a veces adquieren carácter severo y producen muchísimos rayos, intensas lluvias y granizos. En casos extremos provocan tornados y vientos lineales de más de 100 kilómetros por hora, como el Tornado de La Habana (2019) ocurrido en la noche del 27 de enero del 2019 causando severos daños materiales y pérdidas de vidas humanas. Las provincias occidentales han sido las más golpeadas por estos vendavales.

Característica de un ciclón extratropical sobre Cuba

  • Valores de presión inferiores a los 1013 hPa sobre cualquier área del territorio cubano, aunque la isobara no esté cerrada pero presente una curvatura ciclónica y pertenezca al sistema.
  • Isobara cerrada, en este criterio se considera la presencia de al menos una isobara cerrada sobre Cuba (que pertenezca a la circulación del sistema), aunque su valor no sea inferior a 1013 hPa.
  • Influencia directa de la circulación del sistema, es decir que alguna parte del territorio cubano esté dentro de la circulación del sistema, aunque ésta no la delimite una isobara cerrada o el valor de la presión no sea inferior a 1013 hPa.

Fuentes