Cruz de Cerro
La Cruz de Cerro
La Cruz, el símbolo sagrado de la redención Humana, se ha erguido con esbeltez singular y con gallardía divina en La Loma de la Cruz, situada en la parte Norte de la Cuidad de Holguín, próxima a la población, como atalaya indiscutible de la Fe Cristiana.
Su colocación, a un costado saliente de la cúspide del cerro, visible a varias leguas a la redonda, se le atribuye al Prior o Rector de un grupo de Padres que residieron en comunidad Franciscana, en Holguín, desde el año 1789, nombrado Fray Antonio Alegría, quien hubo de dejar inmarcesibles recuerdo de su obra moral evangélica, pues su muerte ocurrió en esta cuidad de Holguín el 26 de Junio de 1791, justamente a los 3 años de su llegada.
El Fraile Antonio Alegría colocó solemnemente en el año 1790 (38 años después de fundado en ayuntamiento y haber recibido Holguín el título de Ciudad) en la efeméride que se conmemora la “Invención de la Santa Cruz”, en lugar destacado, previa bendición y ante una numerosa concurrencia de fieles holguineros ¡La Cruz de Cristo!, en el cerro norteño, habiéndose autorizado tal hecho por el entonces Excelentísimo Obispo don A, Feliú y Centeno, así como la celebración en aquel lugar del Santo Sacrificio de la misa y comunión, en un altar de campaña.
Data del año 1790, la colocación de una cruz en el cerro que ha tomado tradicionalmente su nombre, recibiendo las reverencias y emociones de la fe y según el decir de las “lenguas de antaño”, los católicos de profunda y arraigada creencias solían todos los años, por la fecha del 3 de mayo, “regar” de flores el pedestal del Santo Madero y hacer 3 solicitudes al calor de fervientes oraciones, que casi siempre eran objetos de milagrosas realidades y por parte menos culta del pueblo se reverenciaba la Cruz de Cerro como un “amuleto disipador de fantasmas”.
La tradición se ha perpetuado y el pueblo de Holguín, el 3 de Mayo de cada año, sube hasta la cúspide del cerro a cumplir promesas, a alfombrar de flores el símbolo de la Paz y el Amor y a pedir favores y beneficios para la felicidad de la familia y bienestar del hogar y de la Patria.
Fuente
- PEÑA OBREGÓN, Ángela C. Y GUERRA ÁVILA, María Julia./Pasajes holguineros, /Ediciones Holguín/2009/Cuba/p 19.
