Cultivo protegido y semiprotegido

Cultivo protegido y semiprotegido
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Concepto:Edificación cubierta con una tela de malla para reducir la radiación solar en la producción de hortalizas en climas cálidos y templados.

Casas de cultivo protegido y semiprotegido. Denominación dada en Cuba a las edificaciones de estructura de perfiles o tubos de metal, cubiertas con una tela en forma de malla, que reduce la radiación solar y permite cultivar hortalizas en cualquier época del año. También se les denomina casas de tapado.

Antecedentes

En los países fríos se utilizan los llamados invernaderos o umbráculos, que consisten en locales cerrados cubiertos de vidrio o plástico, que dejan pasar la radiación solar e impiden que el calor acumulado salga al exterior, aumentando la temperatura interior hasta niveles convenientes para el desarrollo de las plantas. En los países de clima templado o cálido se utiliza un tipo de instalación similar, pero con cubierta más ligera, para lograr un efecto contrario: impedir el paso de gran parte de la radiación para mantener en el interior una temperatura más baja que afuera. Como ventajas colaterales están en que las cubiertas de malla reducen la fuerza con que incide la lluvia evitando así los daños directos a las plantas, y evita o reduce en gran medida la introducción de insectos y de gérmenes nocivos.

Características técnicas

Por lo regular se construyen bloques o conjuntos de estas casas, con dimensiones estandarizadas según el modelo. Las casas tienen una altura entre 5 y 7 m, y una gran parte de las construidas en Cuba tienen una superficie entre 540 y 800 m2. Sin embargo, se recomiendan actualmente las de 31 m de ancho y 40 m de longitud (1 240 m2).

Estructura

Una casa típica de cultivo protegido está construida de una armazón de tubos o barras de acero que sostiene el techo y paredes, los cuales están formados de una malla de hilos de material plástico que deja pasar solo una parte de la irradiación solar.

Al estar la casa completamente cerrada por esta malla se reduce la corriente de aire y por consiguiente hay una disminución del transporte por convección de calor. Solo se mantienen unas ventanas o aberturas en la parte superior para evacuar con mayor eficiencia el aire caliente generado en su interior.

A la entrada hay un pequeño compartimento para evitar que se entre directamente al interior, y en el cual se coloca en el piso un depósito para que el obrero moje previamente las suelas de sus zapatos en una solución desinfectante para evitar la entrada de portadores de enfermedades de las plantas.

En el interior de las casas los cultivos se siembran en canteros o directamente en el suelo. Los tallos de las plantas se mantienen en posición vertical atándolos a alambres horizontales, con lo cual se logra un óptimo aprovechamiento del espacio y se facilita la circulación del aire.

Instalaciones de cultivos semiprotegidos

Instalación de cultivo semiprotegido.

Las instalaciones de cultivo semiprotegido solo tienen techo, produciendo el llamado efecto sombrilla, que busca lograr una disminución de la alta radiación solar incidente y permitir al mismo tiempo continuas renovaciones del aire en su interior. Su gran ventaja es que el costo de inversión es por lo menos siete veces menor que con las casas de cultivo protegido.

Fuentes